Bogotá.-En el marco de la 38.ª Asamblea General del Celam, las diferentes regiones del continente presentaron sus informes sobre su realidad eclesial que se enmarca en el clamor de los creyentes ante situaciones inesperadas y los desafíos pastorales que animan su tarea misionera.
Las luces y sombras así como las esperanzas, fueron compartidas por los presidentes de los episcopados ante los miembros de la asamblea del organismo de comunión cuya misión es acompañar a las 22 Conferencias Episcopales de América Latina y el Caribe.
La región del cono sur está integrada por Brasil, Uruguay, Paraguay, Argentina y Chile, cada nación tiene sus particularidades. Los presidentes de las Conferencias Episcopales transmitieron aquello que les inquieta y las iniciativas que les permitieron constatar que la Iglesia sigue siendo un referente para las familias en aspectos como la educación, la ayuda solidaria y el acompañamiento espiritual.
Argentina: contrastes y nuevas pastorales
En Argentina, la fuerza de la pandemia desnudó las desigualdades de una sociedad en la que mientras unos sufrían por bajos niveles de conectividad y dificultad para acceder a la nuevas tecnologías para estudiar o mantener el trabajo, otros nos contaban con el agua como recurso mínimo para prevenir o minimizar el contagio del Covid-19.
Ante estas realidades, el presidente de la Conferencia Episcopal, Monseñor Óscar Ojea Quintana, explicó que la Iglesia se vio interpelada para llegar con la misma eficacia a toda la población, sin importar sus diferencias. En este sentido se trabajó con creatividad en el desarrollo de actividades pastorales acordes con las necesidades de quienes en medio del encierro y las cargas laborales excesivas, se apoyaban en una misa virtual o revitalizaban su esperanza con un rosario por lo que como Iglesia se vieron retados a compartir la fe desde la virtualidad. Asimismo el apoyo de organizaciones como Cáritas fue decisivo para acompañar a las poblaciones carentes de suficientes alimentos, sin trabajo y graves carencias económicas.
Brasil; una voz profética ante la indiferencia
Dom Walmor Oliveira de Azevedo, presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil, se refirió a los efectos negativos de las posturas extremas que impiden la concertación y el diálogo en el ámbito político de su país, como una de las realidades más apremiantes; sin olvidar el segmento de la población que vive en medio de la indiferencia ante las dificultades de otras personas; es decir las víctimas de la pobreza y la devastación de la casa común. Aquí el rol de la Iglesia ha sido decisivo para trabajar tendiendo puentes entre las organizaciones, motivando la unión de voluntades y alzando la voz para denunciar situaciones adversas que vulneran de manera expresa los derechos de las comunidades.
Chile: un camino de conversión pastoral
La crisis eclesial, sociopolítica y sanitaria que se ha vivido durante los últimos años en Chile ha motivado la búsqueda de un camino de conversión pastoral. Así lo manifestó el presidente del episcopado Monseñor Santiago Silva Retamales al relatar como en 2018 los abusos de poder, sexuales y de conciencia por parte del clero, desencadenaron un gran dolor para la Iglesia pero también motivaron un tiempo de reflexión y discernimiento que luego se hizo acción a través de un trabajo que contó con la participación de diversos actores y profundiza en el significado de la integridad en el servicio eclesial. Igualmente se destaca el proceso de reparación a las víctimas por parte de la Iglesia y la organización de la Tercera Asamblea General en donde se busca reavivar la pasión por el Evangelio.
Paraguay: el auge de las nuevas tecnologías
En el caso de la Iglesia paraguaya Monseñor Amancio Francisco Benítez, Secretario General de la Conferencia Episcopal, indicó que la pandemia motivó el auge de múltiples iniciativas pastorales que se valieron de la tecnología y las redes sociales para llegar a la gente y acompañarla en momentos difíciles. Propuestas que gozaron de gran aceptación entre la gente que se unió a foros, encuentros y espacios de oración. Uno de ellos la consagración del país a Nuestra Señora de los milagros de Caacupé que dio paso a la experiencia del año de la Eucaristía.
Uruguay: superando la ausencia de lo comunitario
Monseñor Arturo Eduardo Fajardo, presidente de la Conferencia Episcopal uruguaya aseguró que la ausencia de presencialidad en la vida de la Iglesia fue una de las situaciones más desafiantes. Experimentar la pérdida de lo comunitario ha causado dificultades en el acompañamiento de las familias.
Aquí el mayor esfuerzo se ha centrado en el aprovechamiento de los medios de comunicación, las redes sociales y la televisión para llegar a todos. Sin olvidar el trabajo caritativo en donde actividades como las ollas populares han contribuido para evitar la desnutrición en muchas comunidades carentes de los alimentos básicos para vivir adecuadamente ante la pérdida de los recursos para sostenerse desde lo económico.
Prensa CEV
Nota de prensa CELAM
20 de mayo de 2021