Un nuevo estudio de UNICEF y OMS confirma que otros 51.000 niños menores de 5 años pueden morir en Oriente Medio y África del Norte para finales de 2020 debido a las interrupciones en la asistencia sanitaria primaria causadas por el COVID-19.
Ciudad del Vaticano.- «La pandemia de COVID-19 está poniendo al sistema de salud de la región (Oriente Medio y África del Norte) bajo una presión sin precedentes”. Lo han afirmado conjuntamente el Director Regional del UNICEF para Oriente Medio y África del Norte, Ted Chaiban y el Director Regional de la OMS para la Región del Mediterráneo Oriental, Ahmend Al-Mandhari.
A pesar de que no hay muchos casos de COVID-19 entre los niños de la región, es evidente que la pandemia está afectando a la salud de los menores; los datos lo confirman: “51.000 niños menores de 5 años podrían morir en la región para finales de 2020 si continúa la actual interrupción de los servicios esenciales de salud y nutrición y aumenta la malnutrición”. Si esto ocurre – dicen los directores de UNICEF y OMS – “habrá un aumento de casi el 40% en comparación con los datos anteriores al COVID, revirtiendo los progresos realizados para la supervivencia de los niños de la región en unas dos décadas”.
Las 51.000 muertes adicionales llevarían a un total de 184.000 niños menores de cinco años
El informe ha tomado como referencia la cifra de mortalidad de menores de cinco años en la región en seis meses, asegurando que es de casi 133.000 muertes. Sin embargo, estas 51.000 muertes adicionales llevarían al total de casi 184.000 niños menores de cinco años. El estudio abarca diez países, entre ellos: Argelia, Djibouti, Egipto, Iraq, Jordania, Marruecos, Siria, Sudán, Túnez y Yemen.
«Una combinación de factores contribuiría a esta triste predicción. Bajo un estrés excesivo, muchos trabajadores sanitarios de primera línea han desplazado su compromiso de responder a la epidemia a una situación en la que se carece de equipo de protección de personal y otras ayudas esenciales. El confinamiento, las restricciones de movimiento y las barreras económicas podrían impedir aún más el acceso de las comunidades a la atención de la salud. Como consecuencia de ello, es probable que los niños y las madres pierdan medidas preventivas como la vacunación, el tratamiento de infecciones neonatales y enfermedades infantiles, la asistencia durante el embarazo y el parto y los servicios para prevenir el aumento de la malnutrición aguda” se lee en el informe.
Objetivo: evitar este escenario y permitir que decenas de miles de niños celebren su quinto cumpleaños rodeados de familiares y amigos
Tras poner sobre la mesa la situación que se viene encima, los directores de dichas organizaciones hacen un llamamiento para que “se tomen las medidas juntas para evitar este escenario” y confirman su compromiso “a apoyar el sistema de atención de la salud en la región” para que se apliquen dichas medidas. Entre ellas, destaca: La reanudación plena y segura de las campañas de vacunación y los servicios de nutrición, siguiendo estrictas medidas de precaución para prevenir la infección, utilizando equipo de protección personal, evitando las aglomeraciones y respetando el distanciamiento social en los centros de salud. También piden facilitar el acceso a los servicios de asistencia de salud primaria para todos los niños, especialmente los más vulnerables, así como dotar a los equipos de intervención de base comunitaria de toda la región de los requisitos mínimos para la prevención y el control del contagio, incluida la aplicación de las precauciones estándar y el equipo de protección personal.
Prensa CEV
Nota de Vatican News
15 de junio de 2020