Segundo aniversario de la Carta Apostólica Admirabile signum

01
Dic
2021

“El hermoso signo del pesebre, tan estimado por el pueblo cristiano, causa siempre asombro y admiración”: inicia así la Carta Apostólica Admirabile signum sobre el significado y el valor del pesebre, que el Papa Francisco firmó el 01 de diciembre de 2019.

El Papa, recordando los orígenes de la representación del nacimiento de Jesús, subraya la etimología latina de la palabra: «praesepium», es decir, pesebre, y cita a san Agustín que observa como Jesús, “puesto en el pesebre, se convirtió en alimento para nosotros”. 

«Frente al pesebre descubrimos lo importante que es para nuestra vida, a menudo frenética, encontrar momentos de silencio y oración. El silencio, para contemplar la belleza del rostro del niño Jesús, el Hijo de Dios nacido en la pobreza de un establo. La oración, para expresar el «gracias» maravillado por este inmenso regalo de amor que nos es dado.«

En el pesebre está el pequeño Jesús: Dios «es imprevisible» – afirma el Papa – «fuera de nuestros esquemas» y «así se presenta, en un niño, para ser acogido en nuestros brazos. En la debilidad y la fragilidad esconde su poder que crea y transforma todo» con amor. «El pesebre nos hace ver, nos hace tocar este acontecimiento único y extraordinario que ha cambiado el curso de la historia.

Prensa CEV
Con información de Vatican News
01 de diciembre de 2021