La Congregación para la Educación Católica presenta tres herramientas para poder actuar y trabajar en favor del Pacto Educativo Global. Desde el inicio de la pandemia se han puesto en marcha diversas iniciativas para abordarlo desde diferentes puntos de vista, y para trazar diferentes caminos formativos específicos.
Vaticano. En un comunicado la Congregación para la Educación Católica recordó que, el Pacto Educativo Global anunciado por el Papa Francisco el 12 de septiembre de 2019 lamentablemente no pudo tener lugar el 14 de mayo de 2020, precisamente por la propagación del virus, pero las iniciativas locales se han multiplicado en casi todas partes, y están adquiriendo una relevancia significativa en los distintos niveles institucionales.
Tres herramientas de trabajo
A tal fin, el Dicasterio presenta tres herramientas: el Vademécum como guía para la implementación del Pacto Educativo, destinado a los educadores que tienen la tarea de acompañar a los niños y jóvenes en los distintos caminos de formación formal e informal; el volumen titulado «Educazione tra crisi e speranza» – recientemente editado por la Libreria Editrice Vaticana – concebido como líneas-guías en las cuales se presentan cinco temas centrales del Pacto Educativo en sus diversas articulaciones, los cuales pueden convertirse en áreas a profundizar: el diálogo interreligioso e intercultural, la dignidad y los derechos humanos, la cultura de la paz y la ciudadanía, la fraternidad y la cooperación, las tecnologías y la ecología integral; y finalmente un facsímil de un convenio que se puede utilizar a nivel local para construir una alianza operativa orientada a concretar el Pacto Educativo.
Un encuentro en el Vaticano
Las publicaciones de los documentos, en cinco idiomas, estarán disponibles en el sitio web oficial del Global Compact on Education: https://www.educationglobalcompact.org/, junto al encuentro que tendrá lugar en el Vaticano el próximo 5 de octubre entre representantes de las religiones, sobre el tema: “Religions and Education: towards a Global Compact on Education”. Tal evento, que contará con la participación de unos veinte exponentes de diversas confesiones religiosas del mundo, se propone «reavivar el compromiso por y con las nuevas generaciones, renovando la pasión por una educación más abierta e inclusiva, capaz de escucha paciente, diálogo constructivo y mutua comprensión».