Valencia.- Este miércoles 26 de febrero de 2020, la Iglesia Católica inició la Cuaresma, tiempo de oración, ayuno y limosna. El Arzobispo de Valencia, Monseñor Reinaldo Del Prette, presidió la Santa Misa de Miércoles de Ceniza, en horas de la mañana, en la Basílica Catedral de Valencia.
En su homilía, Monseñor Del Prette, manifestó que la “Cuaresma es un tiempo de cambio, de conversión, es un tiempo de Dios para que nos vea por dentro y sane las heridas, el pecado que todos llevamos dentro”.
“No hay que rasgarnos las vestiduras sino el corazón, nada de lo que está afuera hace impuro al hombre, lo que lo hace impuro es lo que produce su corazón”, expresó el Arzobispo. “Nada contamina sino lo que produce el corazón como la envidia, la maledicencia, el odio, el rencor, por eso debemos ‘rasgar nuestro corazón’, como dice el profeta Joel, ante Dios debemos tener sinceridad, añadió el prelado valenciano”.
El prelado exhortó, además, a no desperdiciar estos cuarenta días. “Es un tiempo de gracia, aprovechemos este tiempo para nuestro encuentro con Dios; es Dios mismo que pasa y toca nuestros corazones en estos días de Cuaresma”.
El Arzobispo de Valencia invitó a los presentes a no vivir la cuaresma de una manera superficial, cumpliendo el ayuno, la limosna y la oración como una fachada, pues eso no lo recibe Dios. Allí entra lo que manifestó el profeta Joel “no te rasgues las vestiduras sino el corazón”. “A Dios le interesa el corazón, tus acciones, tu modo de vivir. Si vas a orar, dar limosna o ayunar que nadie se enteré porque «Tú Padre que está en lo secreto te lo recompensará», como manifiesta el Evangelio de San Mateo. Que podamos vivir la Cuaresma como lo pide Jesús en su Palabra y como manda la Santa Iglesia”.
La Eucaristía prosiguió con la imposición de la Cenizas a los fieles, quienes colmaron la Basílica Catedral de Valencia en el comienzo de este tiempo litúrgico en que la Iglesia invita a prepararse para el Misterio Pascual, es decir, la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
Prensa CEV
Nota de prensa Arquidiócesis de Valencia
27 de febrero de 2020