Magisterio de la Iglesia sobre San José: El Custodio de los tesoros de Dios

18
Feb
2021

Caracas.- El Papa Francisco, convocó a celebrar el Año de San José el 08 de diciembre de 2020, con motivo del 150° aniversario de la declaración de San José como patrono de la Iglesia Universal. Habiendo asumido la paternidad legal de Jesús, José es “un intercesor, un apoyo y una guía en tiempos de dificultad”. ¿Qué han dicho los papas sobre el rol de San José en la historia de la salvación?

En 1870, el Papa Pío IX, declaró a San José como Patrono de la Iglesia Universal, a través del decreto Quemadmodum Deus (Del modo en que Dios). En él, se compara a san José con el rol de José, hijo de Jacob en Egipto. Se expresa en el documento, que Dios eligió a José como custodio de sus tesoros más preciosos, “porque tuvo por esposa a la inmaculada virgen María, de la cual por obra del Espíritu Santo nació nuestro señor Jesucristo, tenido ante los hombres por hijo de José, al que estuvo sometido”.

En 1889, el Papa León XIII publicó la Encíclica Quamquam Pluries (Aunque muchas veces), sobre la devoción a San José. “Las razones por las que el bienaventurado José debe ser considerado especial patrono de la Iglesia, y por las que a su vez, la Iglesia espera muchísimo de su tutela y patrocinio, nacen principalmente del hecho de que él es el esposo de María y padre putativo de Jesús. De estas fuentes ha manado su dignidad, su santidad, su gloria”, se lee en el documento. “José, en su momento, fue el custodio legítimo y natural, cabeza y defensor de la Sagrada Familia. Y durante el curso entero de su vida él cumplió plenamente con esos cargos y esas responsabilidades. Él se dedicó con gran amor y diaria solicitud a proteger a su esposa y al Divino Niño”.

Fue el papa Pío XII quien lo nombró, en 1955, patrono del trabajo, fijando el 01 de mayo como día para celebrar a San José Obrero, siendo aún la fiesta del 19 de marzo la fecha más solemne y definitiva del Patrocinio de San José sobre la Iglesia universal. Por otra parte, la Carta Apostólica Le Voci (Las Voces) de Juan XXIII, publicada el 19 de marzo de 1961 sobre el fomento de la devoción a San José, recoge diferentes alocuciones y documentos en los que el magisterio ha hecho hincapié en la veneración del digno esposo de María. “José, fuera de algún resplandor de su figura que aparece aquí o allá en los escritos de los Padres, permaneció durante siglos y siglos en su ocultamiento característico, casi como figura decorativa en el cuadro de la vida del Salvador. Y requirió tiempo antes de que su culto penetrase de los ojos al corazón de los fieles y de él sacasen especiales lecciones de oración y confiado abandono.”

El papa Juan Pablo II presentó la Exhortación Apostólica Redemptoris Custos en el año 1989,  centenario de la encíclica Quamquam Pluries. “Deseo presentar a la consideración de vosotros, queridos hermanos y hermanas, algunas reflexiones sobre aquél al cual Dios «confió la custodia de sus tesoros más preciosos», Con profunda alegría cumplo este deber pastoral, para que en todos crezca la devoción al Patrono de la Iglesia universal y el amor al Redentor, al que él sirvió ejemplarmente”, señalaba el Sumo Pontífice en el documento. “Podemos decir que José ha experimentado tanto el amor a la verdad, esto es, el puro amor de contemplación de la Verdad divina que irradiaba de la humanidad de Cristo, como la exigencia del amor, esto es, el amor igualmente puro del servicio, requerido por la tutela y por el desarrollo de aquella misma humanidad”.

Patris corde” (Con corazón de Padre), es la Carta Apostólica del Papa Francisco, publicada el 8 de diciembre de 2020 en la Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María y 150° Aniversario de la declaración de San José como Patrono Universal de la Iglesia. Con ella, se convocó al año de San José desde ese día hasta el 8 de diciembre de 2021, año en el que los fieles del mundo meditarán las virtudes del custodio de Jesús y María. En Patris Corde, el Papa Francisco describe a José como padre amado, padre en la ternura, padre en la obediencia, padre en la acogida, padre de la valentía creativa, padre trabajador y padre en la sombra. “Después de María, Madre de Dios, ningún santo ocupa tanto espacio en el Magisterio pontificio como José, su esposo. Mis predecesores han profundizado en el mensaje contenido en los pocos datos transmitidos por los Evangelios para destacar su papel central en la historia de la salvación”, destaca el Santo Padre. “El objetivo de esta Carta apostólica es que crezca el amor a este gran santo, para ser impulsados a implorar su intercesión e imitar sus virtudes, como también su resolución”.

El Año de San José, es también una oportunidad para el don de la indulgencia plenaria, concedida por la Penitenciaría Apostólica en las condiciones habituales: confesión sacramental, comunión eucarística y oración según las intenciones del Papa. En el decreto, se enumeran los diversos métodos por los cuales se podrá obtener la indulgencia, al participar en el Año de San José “con un alma despojada de todo pecado”.

Prensa CEV
18 de febrero de 2021