Entra en vigor la prohibición de la ONU sobre las armas nucleares

26
Oct
2020

Vaticano.- El Tratado de Armas Nucleares ha alcanzado las 50 ratificaciones necesarias para entrar formalmente en vigor. El quincuagésimo primer país que votó fue Honduras. Es el primer acuerdo legalmente vinculante para prohibir el desarrollo, ensayo, producción, almacenamiento, transferencia, uso y amenaza de las armas nucleares. Tras su aprobación por la Asamblea General de la ONU el 7 de julio de 2017, el no a la bomba atómica se concreta.

Con la adhesión de Honduras, oficializada el sábado 24 de octubre por la noche después de Jamaica y Nauru, el Tratado de Prohibición de las Armas Nucleares ha alcanzado las 50 ratificaciones necesarias para entrar formalmente en vigor. Para que surta efecto, tendrá que pasar otros noventa días y llegaremos el 22 de enero de 2021. En cualquier caso, tres años, tres meses y dieciocho días después de la histórica aprobación de la Asamblea General de la ONU el 7 de julio de 2017, la prohibición nuclear es concreta.  Todo sucede en la apertura de la semana que, desde 1978, las Naciones Unidas han dedicado al desarme.

Un paso significativo

En resumen, las armas nucleares se convierten en ilegales según las normas internacionales. La satisfacción se expresa en la campaña internacional para la abolición de las armas nucleares (Ican) – con sus socios italianos, la Red Italiana de Paz y Desarme y «Senzatomica» – que ha sido condecorada por la Comisión de Oslo del Premio Nobel de la Paz por su compromiso contra las armas de muerte. Se estima que hay más de 13.000 dispositivos en el mundo. Hay 5 países que son propietarios legales, es decir, que respetan el Tratado de No Proliferación (TNP), y son los Estados Unidos, Rusia, Gran Bretaña, Francia y China. Luego están los propietarios declarados India, Pakistán, Israel y Corea del Norte. En oposición a la prohibición está Estados Unidos, que apoya la teoría de la disuasión. Esto significa que en relación con el Tnp, que se firmó en 1968 y entró en vigor dos años después, se cree que la única manera de evitar un ataque nuclear es la amenaza de destrucción total del enemigo. Para que funcione, los países atómicos deben estar siempre listos para el lanzamiento – a un costo de doce millones de dólares por hora – así como ser dirigidos por líderes racionales.

El riesgo de aniquilación mundial, como tal, no se evita, como ha señalado el Secretario General de las Naciones Unidas, Antònio Guterres. «Podemos decir que estaremos seguros sólo cuando las armas nucleares dejen de existir», reiteró con motivo del 75º aniversario de las tragedias de Hiroshima y Kagasaki el pasado mes de agosto. En los últimos días, el Parlamento Europeo, con 641 votos a favor, cinco en contra y 47 abstenciones, ha aprobado una resolución en la que define el Tratado como un paso «indispensable» en el camino hacia un mundo sin armas nucleares.

Prensa CEV
Nota de prensa de Vatican News
26 de octubre de 2020