Diócesis de Guarenas inicia novena a su patrona la Virgen de Copacabana

13
Nov
2020

Guarenas.- El Pbro. Teodoro Sosa, párroco de “Sagrado Corazón de Jesús”, en la urbanización Doña Menca de Leoni, de la Diócesis de Guarenas, entronizó el 12 de noviembre de 2020 la réplica de Nuestra Señora de Copacabana, patrona de la diócesis, iniciando la novena que culminará el próximo viernes 20, un día antes de la fiesta patronal de los guareneros.

Nuestra Señora de Copacabana es la patrona de Guarenas y su imagen original se encuentra en el Santuario que lleva su nombre en esta ciudad del estado Miranda, próxima a cumplir 400 años, ya que fue fundada el 14 de febrero de 1621. Igualmente, cada 21 de noviembre, a las 10 de la mañana, los guareneros celebran a la Virgen de Copacabana. 

El sacerdote motivó a realizar obras de caridad ya que el próximo domingo 15 de noviembre la Iglesia celebrará la Jornada Mundial de los Pobres. También, invitó a continuar participando de las diversas actividades en la Parroquia, y se sumen a esta novena en honor a la patrona diocesana.

La diminuta imagen es ícono de Guarenas

La novena se cumplirá simultáneamente en el Santuario Diocesano Catedral «Nuestra Señora de Copacabana», bajo la responsabilidad del párroco José Antonio Barrera Ruiz, lugar donde se resguarda la imagen original de esta advocación mariana. 

Se trata de una talla que apenas llega a 16 centímetros. La devoción llegó a Venezuela desde Bolivia hacia 1607 y 1608. Tiene su origen en Copacaguanas, hoy territorio de Bolivia, donde un indígena de nombre Tito Yupanqui quiso agradecer a Dios y buscar la conversión de sus hermanos de raza, y luego de una visión sobrenatural elaboró con barro una tosca imagen que culminó con la ayuda de artesanos y artistas de la zona.

Esa imagen tomó forma definitiva y aparece en 1583, como patrona de Copacaguanas, y desde allí llega a Venezuela una copia, aunque su devoción comenzó antes por intermedio del Capitán Sebastián Díaz de Alfaro, fundador de San Sebastián de Los Reyes.

Al principio debió ser un pequeño cuadro, que poco después fue sustituido por una imagen en madera de cedro, en cuyo pie estaba grabada la fecha de 1626”, tal como se conoce hoy en día. Actualmente la imagen está recubierta en pintura dorada para protegerla, y se ha convertido en el ícono más representativo en la identidad de Guarenas y sus habitantes.

Prensa CEV
Nota de prensa El Guardián Católico
13 de noviembre de 2020