Categoría: Papa Francisco

09
Nov

Papa Francisco: La fraternidad avanza a través del diálogo que es el oxígeno de la paz

En la audiencia general, el Papa repasó los momentos más significativos de su viaje apostólico a Baréin, resumiéndolos en tres palabras: diálogo, encuentro y camino. Vaticano. Diálogo, encuentro, camino: son las tres palabras que el Papa Francisco subraya en la catequesis de la audiencia general de este miércoles, tres días después de su regreso del viaje apostólico a Baréin y dedicado precisamente a repasar lo vivido en aquella ocasión. Pero se produce un acontecimiento inesperado: dos niños llegan hasta el Papa y no tienen ningún problema en detenerse con él un rato. Francisco aprovecha la circunstancia para llamar la atención sobre cómo establecer una relación con Dios: “Antes de hablar de lo que he preparado, me gustaría llamar la atención sobre estos dos niños, chicos que han venido aquí. No pidieron permiso, no dijeron: ‘Ah, tengo miedo’: vinieron directamente. Así es como debemos estar con Dios: directamente. Nos han dado un ejemplo de cómo debemos estar con Dios, con el Señor: ¡adelante! Siempre nos está esperando. Me hizo bien ver la confianza de estos dos niños: fue un ejemplo para todos nosotros. Así es como debemos acercarnos siempre al Señor: con libertad.” El diálogo hace que uno descubra las riquezas del otro «Uno se pregunta espontáneamente: ¿por qué ha querido el Papa visitar este pequeño país de amplia mayoría islámica?», dice el Papa, explicando que la ocasión de ese viaje fue la participación en un Foro sobre el Diálogo entre Oriente y Occidente. «Diálogo», asegura, «que sirve para descubrir la riqueza de quienes pertenecen a otros pueblos, otras tradiciones, otros credos». Y es «el oxígeno de la paz». Cita el Concilio Vaticano II, que, en relación con la paz, afirma en Gaudium et spes que «exige que [los hombres] amplíen su mente y su corazón más allá de los límites de su propia nación, dejando de lado todo egoísmo nacional y toda ambición de supremacía sobre otras naciones, y alimentando en cambio un profundo respeto por toda la humanidad». Y agrega: “En Baréin, sentí esta necesidad y esperé que, en todo el mundo, los líderes religiosos y civiles fueran capaces de mirar más allá de sus propias fronteras, de sus propias comunidades, para ocuparse del conjunto. Es la única manera de abordar ciertas cuestiones universales, por ejemplo el olvido de Dios, la tragedia del hambre, el cuidado de la creación, la paz. En este sentido, el foro de diálogo, titulado «Oriente y Occidente para la convivencia humana», llamó a elegir el camino del encuentro y a rechazar el de la confrontación.” Los conflictos no se resuelven con la guerra Y cuánto se necesita este encuentro, continúa el Papa. Sus pensamientos se dirigen a las numerosas guerras que se libran en el mundo, en primer lugar a la «guerra insensata -insensata- de la que es víctima la martirizada Ucrania», conflictos «que -dice- nunca se resolverán con la lógica infantil de las armas, sino sólo con la fuerza suave del diálogo». Del mismo modo, añade: “Pensamos en guerras [que duran] años, y pensamos en Siria, ¡más de 10 años! – (…) pensamos en los niños de Yemen, pensamos en Myanmar: ¡en todas partes! Ahora, más cerca está Ucrania, y ¿qué hacen las guerras? Destruyen, destruyen la humanidad, destruyen todo. Los conflictos no deben resolverse mediante la guerra.” No hay diálogo sin encuentro El diálogo presupone el encuentro, y Francisco recuerda que en Baréin escuchó repetidamente «el deseo de que entre cristianos y musulmanes aumenten los encuentros, de que se forjen relaciones más fuertes, de que nos tomemos más a pecho». “Sin aceptación, el diálogo sigue siendo vacío, aparente, sigue siendo una cuestión de ideas y no de realidad. Entre los muchos encuentros, recuerdo el que tuve con mi querido Hermano, el Gran Imán de Al-Azhar -querido Hermano- ; y el de los jóvenes del Colegio del Sagrado Corazón, alumnos que nos dieron una gran lección: estudiar juntos, cristianos y musulmanes. Como jóvenes, como niños, debemos conocernos, para que el encuentro fraternal evite las divisiones ideológicas.” Una nueva etapa en el camino inaugurado por Juan Pablo II El Papa Francisco subraya que su viaje a Baréin no debe verse como un episodio aislado, sino que continúa un camino de acercamiento iniciado por San Juan Pablo II cuando fue a Marruecos. Y explica su significado: ‘Así, la primera visita de un Papa a Baréin representó un nuevo paso en el camino entre los creyentes cristianos y musulmanes: no para confundir o diluir la fe, no: el diálogo no diluye; sino para construir alianzas fraternas en nombre del padre Abraham, que fue peregrino en la tierra bajo la mirada misericordiosa del único Dios del Cielo, Dios de la paz. Por eso el lema del viaje era: «Paz en la tierra a los hombres de buena voluntad». Ampliar horizontes: un llamamiento para todos El Papa Francisco afirma que en el país de Oriente Medio se vivió el encuentro y el diálogo no sólo con los musulmanes, sino también entre los cristianos con la presencia del «querido Patriarca y hermano Bartolomé y con hermanos y hermanas de diversas confesiones y ritos».  «Los hermanos y hermanas en la fe que he encontrado en Baréin -dice el Papa Francisco- viven verdaderamente ‘en el camino’: son en su mayoría trabajadores inmigrantes que, lejos de su casa», encuentran «su familia en la gran familia de la Iglesia». El Papa dirige un último pensamiento a los católicos del país y de otros países del Golfo, con los que se encontró en la misa celebrada en el estadio, y concluye con una invitación que parte de su ejemplo: “Hoy me gustaría transmitirles su genuina, sencilla y hermosa alegría. Al reunirnos y rezar juntos, sentimos que somos un solo corazón y una sola alma. Pensando en su viaje, en su experiencia cotidiana de diálogo, sintámonos todos llamados a ampliar nuestros horizontes (…). Ampliar nuestros horizontes, abrirnos, ampliar nuestros intereses y dedicarnos al conocimiento de los demás. Si te dedicas al conocimiento de los demás, nunca te verás amenazado. Pero si tienes miedo de los demás, tú mismo

07
Nov

El Papa: Los santos eran de carne y hueso como nosotros, con el estilo de Dios

En un tuit publicado hoy Francisco nos recuerda una vez más que todos podemos buscar la santidad, porque los santos «muestran de forma narrativa y comprensible el estilo de Dios en la vida de personas parecidas a nosotros». A través de ellos, «Dios se hace presente y nos habla», como afirmó Juan Pablo II al promulgar en 1983 la Constitución Apostólica ‘Divinus perfectionis magister’, que agilizó los procesos de canonización Vaticano.  “Leamos las vidas de los santos, porque muestran de forma narrativa y comprensible el estilo de Dios en la vida de personas parecidas a nosotros, ya que los santos eran de carne y hueso como nosotros. Sus acciones hablan a las nuestras y nos ayudan a comprender su significado” En el tuit de este lunes 7 de noviembre, el  Papa Francisco impulsa la búsqueda de la santidad por parte de cada uno de nosotros ya que, como anticipó Juan Pablo II en su Constitución Apostólica Divinus perfectionis magister de 1983, «teniendo tan numerosos testigos, mediante los cuales Dios se hace presente y nos habla, nos sentimos atraídos a alcanzar su reino en el cielo por el ejercicio de la virtud». Las nuevas normas determinadas por el Papa polaco -junto con la reforma del Código de Derecho Canónico- han agilizado los procesos de canonización, como el propio Juan Pablo II escribió en el documento: Después de las más recientes experiencias, nos ha parecido oportuno revisar la forma y procedimiento de instrucción de las causas y estructurar la misma Congregación para las Causas de los Santos, de tal manera que queden satisfechas las exigencias de los peritos y los deseos de nuestros hermanos en el Episcopado, quienes varias veces solicitaron la simplificación de las normas, salvaguardando naturalmente la solidez de las investigaciones en un asunto de tanta importancia. Juzgamos también, a la luz de la doctrina de la colegialidad propuesta por el Concilio Vaticano II, que es muy conveniente que los mismos obispos estén más asociados a la Sede Apostólica en el estudio de las causas de los santos. 40 años de la Constitución Apostólica del Papa Juan Pablo II El tema será analizado también a nivel internacional por un simposio promovido por el Pontificio Comité de Ciencias Históricas en colaboración con el Dicasterio para las Causas de los Santos y titulado «Modelos de santidad y canonizaciones a 40 años de la Constitución Apostólica Divinus Perfectionis Magister (1983-2023)». El evento comienza el próximo miércoles 9 de noviembre en la Pontificia Universidad Lateranense de Roma. En la primera de las tres jornadas se analizarán los estudios históricos y la práctica canónica de la beatificación y canonización, con la participación del prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, el cardenal Marcello Semeraro hablará sobre la llamada universal a la santidad. El simposio internacional se presentará en una conferencia de prensa el martes 8, a las 11.30 en Italia, con transmisión en directo, en idioma original, en el canal de YouTube de Vatican News. Prensa CEVNota de Vatican News07 de noviembre de 2022

02
Nov

El Papa Francisco por centésima vez en Santa María La Mayor: reza por el viaje a Baréin

Francisco, en vísperas de su 39º viaje apostólico al país de Oriente Medio, acudió como es tradición desde el inicio de su pontificado a rezar a los pies del icono Salus Populi Romani. El viaje comienza mañana hasta el 6 de noviembre. El Pontífice participará en un foro de diálogo con representantes de otras religiones. Vaticano. Un cartel amarillo colgado sobre la barandilla de la Capilla Borghese celebra la visita número 100 del Papa Francisco a Santa María La Mayor. Por cien veces desde el inicio de su pontificado, el Pontífice cruzó esta tarde el umbral de la Basílica de Liberia para rezar y rendir homenaje a la Salus Populi Romani, la efigie mariana que, según la tradición, fue pintada por San Lucas y que los habitantes de la Urbe veneran como su patrona. A Ella el Papa le ha confiado el viaje apostólico al Reino de Baréin que comenzará mañana hasta el 6 de noviembre. En silencio a los pies de la Virgen Como esta mañana, a la entrada del Cementerio Teutónico, donde rezó unos instantes por todos los fieles difuntos, Francisco, en silla de ruedas, se recogió en otra oración solitaria, intensa y silenciosa a los pies de la Virgen, a la que rindió homenaje con un ramo de flores blancas. «Esta tarde, miércoles 2 de noviembre, el Papa Francisco ha acudido a la Basílica de Santa María la Mayor para rezar ante el icono de la Virgen Salus Populi Romani y encomendarle su próximo viaje al Reino de Baréin. Al final regresó al Vaticano», informa una breve nota de la Oficina de Prensa del Vaticano, que subraya: «La visita de esta tarde es la centésima que el Papa Francisco realiza a la Basílica de Santa María la Mayor desde que fue elegido Pontífice». Tradición desde el inicio del pontificado Una tradición bien establecida, por tanto, iniciada desde 2013 y mantenida antes y después de cada viaje apostólico. La última visita fue el pasado mes de septiembre, a su regreso de un viaje a Kazajistán. Esta vez se trata de Bahrein, el país del Golfo Pérsico, cuna del Islam chiíta, un viaje al que el Papa argentino acude para poner una pieza más en el gran mosaico del diálogo que se viene dando desde hace una década. La petición de oraciones Para este viaje de poco más de 72 horas, en el que participará en el «Foro de Bahrein para el Diálogo» con representantes de otras confesiones, Francisco había pedido acompañamiento espiritual durante el Ángelus de ayer. «Participaré en un Foro que tematiza la necesidad ineludible de que Oriente y Occidente se acerquen por el bien de la convivencia humana; tendré la oportunidad de hablar con representantes religiosos, en particular islámicos», dijo ayer por la mañana desde la ventana del Palacio Apostólico. «Pido a todos que me acompañen con la oración, para que cada encuentro y evento sea una ocasión fructífera para apoyar, en nombre de Dios, la causa de la fraternidad y la paz, que nuestro tiempo necesita con tanta urgencia». Viaje bajo la bandera del diálogo El que se inaugura mañana es el 39º viaje internacional del Papa Francisco, el primero de un Pontífice al Reino de Bahrein, el noveno a un país de mayoría musulmana que ostenta el récord entre los países del Golfo en la apertura de una iglesia, (en Manama, en 1939) y donde se consagró una catedral, la de Nuestra Señora de Arabia, en Awali, en un terreno donado por el propio Rey. En el mejor de los casos, el viaje continúa el recorrido que comenzó en febrero de 2019 con la visita a Abu Dhabi para la firma con el Gran Imán de Al-Azhar, Ahmed al-Tayeb (a quien verá en privado durante el viaje) del «Documento sobre la Hermandad Humana», un texto pivote de las renovadas y redescubiertas relaciones entre el Islam y la Iglesia católica que guiará las distintas paradas del Papa en Baréin. Las etapas del viaje Entre ellas se encuentran, además de la ya mencionada participación en el «Foro de Diálogo», la reunión con el Consejo de Ancianos Musulmanes, en la Mezquita del Palacio Real de Sakhir, y el abrazo, el sábado 5, con la misa en el Estadio Nacional de Bahrein, a la exigua comunidad católica. En esta ocasión, se espera la asistencia de más de veinte mil personas, de las cuales algunos miles llegarán también de los países vecinos. A continuación, Francisco se reunirá con el clero local, los jóvenes y los estudiantes en lo que el Secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, describió en una entrevista con los medios de comunicación vaticanos como una preciosa oportunidad para lanzar «un mensaje de unidad, cohesión y paz» en «un mundo caracterizado por las tensiones, los contrastes y los conflictos». Prensa CEVNota de Vatican News02 de noviembre de 2022

02
Nov

El Papa: Dejémonos sorprender por la presencia de Dios que nos espera entre los pobres

En el día en que la Iglesia recuerda y reza por todos los fieles difuntos, Francisco celebró en la Basílica de San Pedro la Santa Misa en sufragio de los cardenales y obispos fallecidos a lo largo del año. En su homilía, centrada en la espera del encuentro con el Señor, instó no perder de vista el “sentido del viaje” y a vivir amando a fondo perdido, sin dejarnos distraer por cosas superfluas Vaticano.  “Vamos al encuentro de Dios amando porque Él es amor”. Con estas palabras el Papa indicó cómo vivir la espera del encuentro con el Señor, al presidir en la mañana del miércoles 2 de noviembre, la Santa Misa en sufragio de los cardenales y obispos fallecidos durante el año, en el altar de la Cátedra de la Basílica de San Pedro. Francisco inició su homilía centrando su reflexión en dos palabras que le suscitaron las lecturas leídas durante la Liturgia de la Palabra: expectación y sorpresa. La expectación expresa el sentido de la vida, porque vivimos a la espera del encuentro: el encuentro con Dios, que es el motivo de nuestra oración de intercesión de hoy, especialmente por los cardenales y obispos fallecidos durante el último año, por los que ofrecemos este sacrificio eucarístico en sufragio No perder de vista lo que cuenta “Todos vivimos a la expectativa” esperando escuchar un día aquellas palabras de Jesús: «Vengan, benditos de mi Padre», precisó el Papa. “Estamos en la sala de espera del mundo para entrar en el cielo”, añadió, invitando alimentar nuestra expectativa del Cielo, a ejercitar nuestro deseo del Paraíso y preguntarnos hoy si nuestros deseos tienen algo que ver con el Cielo. Porque corremos el peligro de aspirar constantemente a cosas que pasan, de confundir los deseos con las necesidades, de anteponer las expectativas del mundo a las de Dios. Pero perder de vista lo que cuenta para perseguir el viento sería el error más grande de la vida. Miremos hacia lo alto, porque estamos en camino hacia lo Alto, mientras que las cosas de aquí abajo no irán allí: las mejores carreras, los más grandes éxitos, los títulos y los reconocimientos más prestigiosos, las riquezas acumuladas y las ganancias terrenales, todo se desvanecerá en un instante, todo. Y todas las expectativas depositadas en ellos se verán defraudadas para siempre. Y, sin embargo, notó el Pontífice, ¡cuánto tiempo, cuánto esfuerzo y energía gastamos preocupándonos y afligiéndonos por estas cosas, “dejando que la tensión hacia casa se desvanezca, perdiendo de vista el sentido del viaje”. Por eso, invitó a cada uno a preguntarse si vive lo que dice el Credo: “¿espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo que vendrá? ¿Voy a lo esencial o me distraigo en tantas cosas superfluas?” La sorpresa ante el Señor La segunda palabra, “sorpresa”, emerge del capítulo 25 de Mateo, y es “similar a la de los protagonistas” del Evangelio, afirmó el Papa, cada vez que le preguntan al Señor cuándo lo han ayudado. “Así se expresa la sorpresa de todos, el asombro de los justos y la consternación de los injustos”. ¿Cuándo? Lo podremos decir también nosotros: esperaríamos que el juicio sobre la vida y el mundo tuviera lugar bajo la bandera de la justicia, ante un tribunal decisivo que, examinando todos los elementos, arrojara luz sobre las situaciones y las intenciones para siempre. En cambio, en el tribunal divino, la única línea de mérito y de acusación es la misericordia hacia los pobres y los descartados: «Todo lo que hicieron a uno de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicieron», juzga Jesús (v. 40). El Altísimo habita en los más pequeños, el que habita en los cielos habita entre los más insignificantes del mundo. ¡Qué sorpresa! Amar «a fondo perdido» como Jesús “Pero el juicio se hará así porque será Jesús, el Dios del amor humilde, el que, nacido y muerto pobre, vivió como siervo”, aseguró el Papa. “Su medida es un amor que va más allá de nuestras medidas, y su criterio de juicio es la gratuidad”. De aquí su invitación a prepararnos y a “amar gratuitamente y a fondo perdido, sin esperar reciprocidad”. Y la exhortación a no dejarnos sorprender también nosotros: Estemos atentos a no endulzar el sabor del Evangelio. Porque a menudo, por comodidad o por conveniencia, tendemos a suavizar el mensaje de Jesús, a diluir sus palabras. Reconozcámoslo, nos hemos vuelto bastante buenos para hacer concesiones con el Evangelio: dar de comer a los hambrientos sí, pero el tema del hambre es complejo y ciertamente no puedo resolverlo. Ayudar a los pobres sí, pero las injusticias tienen que ser tratadas en un cierto modo y entonces es mejor esperar, también porque si te comprometes entonces te arriesgas a que te molesten todo el tiempo y quizás te das cuenta de que podrías haberlo hecho mejor. Estar cerca de los enfermos y de los encarcelados, sí, pero en las portadas de los periódicos y en las redes sociales hay otros problemas más acuciantes, y entonces ¿por qué justamente yo debo interesarme por ellos? Acoger a los inmigrantes sí, pero es una cuestión general complicada, tiene que ver con la política… Y así, a fuerza de peros, hacemos de la vida un compromiso con el Evangelio. El programa del cristiano es un corazón que ve De esta manera, subrayó el Papa, “de simples discípulos del Maestro pasamos a ser maestros de la complejidad, que argumentan mucho y hacen poco, que buscan respuestas más frente al ordenador que frente al Crucifijo, en internet más que en los ojos de los hermanos” y olvidamos que «el programa del cristiano es un corazón que ve» (Benedicto XVI, Deus caritas est, 31). Y a la pregunta que se hacen sorprendidos tanto los justos como los injustos, el Papa respondió:   La respuesta es sólo una: el cuándo es ahora. Está en nuestras manos, en nuestras obras de misericordia: no en las puntualizaciones y en los análisis refinados, no en las justificaciones individuales o

01
Nov

Papa Francisco: La paz no se alcanza conquistando, nunca es violenta ni armada

A la hora del Ángelus de la fiesta de Todos los Santos, el Papa Francisco habló de las Bienaventuranzas descritas en el Evangelio de Mateo, definiéndolas el carné de identidad de los santos. Vaticano. Los santos no son personas que en su vida fueron perfectas, siempre lineales, precisas o “almidonadas», tal como nos lo revela el Evangelio, dijo el Papa a la hora del Ángelus del Día de Todos los Santos. Y explicó que las páginas que Mateo dedica a las Bienaventuranzas – que pueden considerarse el carné de identidad de los santos – “¡hablan de una vida a contracorriente y revolucionaria!».El Papa dijo que Jesús “no llama bienaventurados a aquellos que están en paz, sino a aquellos que hacen la paz, los constructores, los que trabajan por la paz”. Y añadió que “de hecho, la paz hay que construirla y como toda construcción, requiere compromiso, colaboración, paciencia”. Es un concepto de paz diferente al que solemos pensar: querer «estar en paz, que te dejen en paz, no tener problemas sino tranquilidad». “A nosotros nos gustaría que la paz lloviera de lo alto, y en cambio, la Biblia habla de la ‘semilla de paz’ (Zc 8,12), porque germina del terreno de la vida, de la semilla de nuestro corazón; crece en silencio, día tras días, a través de obras de justicia y de misericordia. Como nos muestran los testimonios luminosos que festejamos hoy” Desarmar el corazón para hacer crecer la semilla de la paz Y si «se nos hace creer que la paz viene por la fuerza y el poder – prosiguió el Papa – para Jesús es lo contrario», de hecho «su vida y la de los santos» nos muestran «que la semilla de la paz, para crecer y dar fruto, debe morir primero». “La paz no se alcanza conquistando o derrotando a alguien, nunca es violenta, nunca es armada” En su diálogo ideal con los presentes en la Plaza de San Pedro el Obispo de Roma preguntó: “¿Cómo convertirse, entonces, en alguien que trabaja por la paz?” Hacer espacio para Jesús “Ante todo – dijo – es necesario desarmar el corazón. Sí, porque estamos todos equipados con pensamientos agresivos y palabras cortantes y pensamos en defendernos con el alambre de espino de la queja y con los muros de cemento de la indiferencia. La semilla de la paz pide que se desmilitarice el campo del corazón”. “¿Cómo? Abriéndose a Jesús, que es ‘nuestra paz’ (Ef 2, 14); estando frente a su Cruz, que es la cátedra de la paz; recibiendo de Él, en la Confesión, ‘el perdón y la paz’. De aquí se empieza, porque ser operadores de paz, ser santos, no es una capacidad nuestra, es un don suyo, es una gracia” ¿Somos constructores de paz? “Hermanos y hermanas – añadió el Papa – mirémonos dentro y preguntémonos: ¿Somos constructores de paz? ¿Allí donde vivimos, estudiamos y trabajamos, llevamos tensión, palabras que hieren, chácharas que envenenan, polémicas? O ¿abrimos la vía de la paz: perdonamos a quien nos ha ofendido, nos ocupamos de los que se encuentran en los márgenes, reparamos alguna injusticia ayudando a quien menos tiene? “Esto es construir la paz. Perdonar, cuidar a los más pequeños, curar las injusticias” Jesús nos da la respuesta Puede surgir una última pregunta dijo el Papa Francisco a los fieles y peregrinos: “¿Conviene vivir así? ¿No es perdedor?”. “Es Jesús quien nos da la respuesta: los que trabajan por la paz ‘serán llamados hijos de Dios’ (Mt 5,9): en el mundo parecen fuera de lugar, porque no ceden a la lógica del poder y del predominio, en el Cielo serán los más cercanos a Dios, los más parecidos a Él” “Pero, en realidad – concluyó – también aquí, el que prevarica se queda con las manos vacías, mientras el que ama a todos y no hiere a nadie gana: como dice el Salmo, ‘el pacífico tendrá porvenir’ (cf. Sal 37, 37)”. Con la ayuda a la Reina de todos los santos Antes de rezar a la Madre de Dios el Pontífice formuló votos para que “la Virgen María, Reina de todos los santos, nos ayude a ser constructores de paz en la vida de cada día”. Prensa CEVNota de Vatican News01 de noviembre de 2022

26
Oct

El Papa: la tristeza no debe ser descartada sino comprendida, ayuda a mejorar la vida

En la Audiencia General Francisco continúa con sus reflexiones sobre el tema del discernimiento y en la catequesis de hoy aborda un aspecto que tiene que ver con los sentimientos, la desolación, una experiencia común en la vida de todos: puede desanimar a quien quiere seguir el Evangelio y hacer el bien, pero ninguna tentación está por encima de nuestras fuerzas Vaticano. «Dios habla al corazón», por lo que el discernimiento no es sólo una cuestión de cabeza, sino que también contiene aspectos afectivos como el sentimiento de desolación al que el Papa dedica la catequesis de este miércoles. ¿Pero de qué se trata? Para explicarlo, Francisco cita lo que escribió San Ignacio de Loyola al respecto: «La oscuridad del alma, la turbación, la inclinación hacia las cosas bajas y terrenales, la inquietud debida a diversas agitaciones y tentaciones: así el alma se inclina a la desconfianza, está sin esperanza ni amor, y se encuentra perezosa, tibia, triste y como separada de su Creador y Señor». La desolación, una experiencia común Creo, continúa el Papa Francisco, que todos hemos experimentado la desolación. Pero tal vez no todos la sabemos leer «porque también tiene algo importante que decirnos» y por eso no debe perderse. Nadie querría estar desolado, triste: esto es cierto. A todos nos gustaría tener una vida siempre alegre, feliz y plena. Sin embargo, esto, además de no ser posible -porque no es posible-, tampoco sería bueno para nosotros. De hecho, el cambio de una vida orientada al vicio puede partir de una situación de tristeza, de remordimiento por lo que uno ha hecho. El remordimiento puede llevar al cambio El remordimiento «es la conciencia que muerde», afirma el Papa y señala que es importante aprender a leer la tristeza.  En nuestro tiempo, la mayoría de las veces se considera negativamente, como un mal del que hay que huir a toda costa, y en cambio puede ser una señal de alarma indispensable para la vida, que nos invita a explorar paisajes más ricos y fértiles que la fugacidad y la evasión no permiten. Santo Tomás define la tristeza como un dolor del alma: como los nervios del cuerpo, despierta nuestra atención ante un posible peligro, o ante un bien no atendido. Para los que quieren hacer el bien, la tristeza es un obstáculo La situación es diferente para los que quieren hacer el bien, en cuyo caso «la tristeza es un obstáculo con el que el tentador quiere desanimarnos». Por lo tanto, no hay que ir tras ella, sino que hay que «actuar de manera exactamente contraria a lo que se sugiere, decididos a continuar lo que uno se había propuesto». Pensemos en el trabajo, en el estudio, en la oración, en un compromiso que hayamos contraído: si los dejáramos en cuanto sintiéramos aburrimiento o tristeza, nunca concluiríamos nada. Esta es también una experiencia común a la vida espiritual: el camino hacia el bien, nos recuerda el Evangelio, es estrecho y cuesta arriba, requiere un combate, una conquista de sí mismos. Comienzo a rezar, o a dedicarme a una buena obra y, curiosamente, justo en ese momento se me ocurren cosas que hacer con urgencia para no rezar y no hacer las cosas buenas. Todos tenemos esta experiencia. Es importante, para los que quieren servir al Señor, no dejarse llevar por la desolación. Saber atravesar la desolación hace crecer En un momento de tristeza, continúa el Papa, muchos deciden abandonar una elección que han hecho, «sin detenerse primero a leer este estado de ánimo». Y recuerda que «una sabia regla dice que no hay que hacer cambios cuando se está desolado». Un ejemplo es Jesús que, como leemos en el Evangelio, rechaza con firmeza las tentaciones del demonio, que desaparecen ante su actitud decidida de hacer la voluntad del Padre. Afirma Francisco: Si sabemos atravesar la soledad y la desolación con apertura y conciencia, podemos salir fortalecidos en el plano humano y espiritual. Ninguna prueba está fuera de nuestro alcance; ninguna prueba será mayor que lo que podamos hacer. Pero no hay que huir de las pruebas: es necesario ver lo que significa esta prueba, el significado de que estoy triste: ¿por qué estoy triste? ¿qué significa que en este momento estoy desolado? ¿Qué significa que estoy desolado y no puedo avanzar? No darse por vencidos por un momento de tristeza «Ir adelante», esta es la invitación del Papa Francisco: si no logramos vencer la tentación hoy, caminemos y «la venceremos mañana». Y concluye: «Que el Señor te bendiga en este camino – valiente – de la vida espiritual, que siempre es caminar». Prensa CEVNota de Vatican News26 de octubre de 2022

25
Oct

Papa Francisco: la paz es un grito que merece ser escuchado

El Papa participó por la tarde en el Coliseo en el encuentro de religiones promovido por la Comunidad de San Egidio, firmando un llamamiento común: no nos resignemos a la guerra, que los gobernantes se inclinen a escuchar con seriedad y respeto las aspiraciones de reconciliación de sus pueblos. La guerra es la madre de todas las pobrezas Vaticano. El Papa Francisco intervino en la clausura del Encuentro de Oración por la Paz con los Líderes Cristianos y de las Religiones del Mundo que se inauguró el pasado domingo en «la Nuvola» de Roma. Repitió con fuerza un llamamiento que ya había lanzado hace un año, también en el Coliseo, pero que afirmó que era «aún más actual» hoy: «Las religiones no pueden ser utilizadas para la guerra (…) nadie utilice el nombre de Dios para bendecir el terror y la violencia». Que la búsqueda de la paz esté en el centro de nuestras acciones, reiteró el Papa, precisamente en el día en que, en relación con la guerra de Ucrania, parece abrirse un atisbo de diálogo. De hecho, las agencias informaron a primera hora de la tarde de la noticia de que Rusia estaría dispuesta a dialogar con el Papa Francisco, Estados Unidos y Francia para buscar una solución al conflicto en curso. La oración de las religiones por la paz Antes de pronunciar su discurso, alrededor de las 16:20 horas, Francisco participó en un momento de oración en el interior del Coliseo en presencia de representantes de las Iglesias y Comunidades Cristianas, mientras que los líderes de otras religiones se reunieron en oración en varios lugares de la ciudad. A continuación, a las 17:00 horas, en el escenario instalado en el exterior del Anfiteatro Flavio, la ceremonia final todos juntos, con algunos testimonios y discursos finales, seguidos de un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de la guerra, el terrorismo, la violencia y la trata de seres humanos. Al final, la firma del Llamamiento de Roma por la Paz por parte del Papa Francisco y de los demás líderes religiosos, luego entregado a algunos chicos y chicas por la escritora, testigo de la Shoá, Edith Bruck y simbólicamente a toda la juventud del mundo. Francisco: una paz hoy gravemente herida Al tomar la palabra, Francisco agradeció a cada uno de los presentes en el encuentro animado por ese mismo «espíritu de fraternidad» que inspiró la primera convocatoria en nombre de la paz querida por San Juan Pablo II en Asís hace treinta y seis años y afirmó:  Este año, nuestra oración se ha convertido en un «grito», porque hoy la paz está gravemente violada, herida, pisoteada: y esto en Europa, es decir, en el continente que vivió las tragedias de las dos guerras mundiales del siglo pasado. Estamos en la tercera. Lamentablemente, desde entonces, las guerras no han dejado de ensangrentar y empobrecer la tierra, pero el momento que vivimos es particularmente dramático. El grito de paz no puede ser suprimido El Papa Francisco subraya una vez más que «la paz está en el corazón de las religiones», esa paz que es negada y humillada en tantas partes del mundo y cuyo grito es a menudo silenciado «por la retórica de la guerra», pero también por el odio y la indiferencia. Sin embargo, es una invocación que, según el Papa, «no puede ser suprimida»: Surge del corazón de las madres, está escrito en los rostros de los refugiados, de las familias que huyen, de los heridos o de los moribundos. Y este grito silencioso sube al cielo. No conoce fórmulas mágicas para salir de los conflictos, pero tiene el sacrosanto derecho de pedir la paz en nombre de los sufrimientos padecidos, y merece ser escuchado. Merece que todos, empezando por los gobernantes, se inclinen a escuchar con seriedad y respeto. La guerra es siempre una derrota  Que la guerra es «la madre de todas las pobrezas», y deja «al mundo peor de lo que lo encontró», que es «un fracaso de la política y de la humanidad», lo demuestran, observa el Papa, «las dolorosísimas lecciones del siglo XX, y desgraciadamente también de esta primera parte del XXI», en el que, olvidando Hiroshima y Nagasaki, se ha vuelto a amenazar con el uso de armas nucleares. Pero si, dice el Papa Francisco, los poderosos de la tierra no escuchan las aspiraciones de sus pueblos, eso no cambia el diseño de paz de Dios para la humanidad y que nos corresponde aceptar. Y continúa: La paz es su don y la hemos invocado de Él. Pero este don debe ser acogido y cultivado por nosotros, hombres y mujeres, especialmente por nosotros, los creyentes. No nos dejemos contagiar por la lógica perversa de la guerra; no caigamos en la trampa del odio al enemigo. Volvamos a situar la paz en el centro de nuestra visión del futuro, como objetivo central de nuestra acción personal, social y política, a todos los niveles. Desactivemos los conflictos con el arma del diálogo. El llamamiento al diálogo de San Juan XXIII Un llamamiento similar había sido hecho a los gobernantes en octubre de 1962 por San Juan XXIII en un mensaje radiofónico. En aquel momento parecía cercano un nuevo «enfrentamiento militar y una deflagración nuclear», y el Papa Roncalli suplicaba que se hiciera todo lo posible para «salvar la paz» y evitar al mundo los horrores de la guerra. El Papa Francisco repite las palabras pronunciadas por su predecesor: Promover, favorecer y aceptar negociaciones a todos los niveles y en cualquier tiempo es una medida de sabiduría y de prudencia que atrae las bendiciones del Cielo y de la Tierra. Sesenta años después, estas palabras suenan sorprendentemente actuales. Las hago mías. No somos «neutrales, sino a favor de la paz. Por eso invocamos el ius pacis, como un derecho de todos a componer los conflictos sin violencia. Hoy entre las religiones nos sentimos más hermanos La fraternidad entre las religiones ha crecido en los últimos años, constata Francisco, «cada vez más nos sentimos hermanos entre nosotros»,

21
Oct

Papa Francisco aprueba canónicamente a la CEAMA

El anuncio fue comunicado este jueves 20 de octubre por la misma institución. El Santo Padre ve este paso como “una gran alegría para la Iglesia universal” y, en especial, para el Pueblo de Dios que peregrina en la Amazonía. Vaticano. La Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA) ha sido erigida como una organización de la Iglesia católica con personería jurídica canónica y pública. Así fue comunicado por el Cardenal Marc Ouellet, Prefecto del Dicasterio de los Obispos, en un decreto del 3 de octubre de 2022. Como también recoge el CELAM, se trata de una noticia grata y desafiante, según un comunicado de la CEAMA, difundido este jueves 20 de octubre. “Sin duda, la aprobación de la CEAMA es fruto del Espíritu Santo”, afirma el texto, que también resalta que el proceso sinodal se inició con la creación de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) el 14 de septiembre de 2014, cuyo presidente fue el Cardenal Claudio Hummes. Las entidades cofundadoras de la REPAM son el Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (CELAM), la Confederación Latinoamericana de Religiosos (CLAR) y el Secretariado Latinoamericano y del Caribe de Cáritas (SELACC). Ocho meses después, el Santo Padre publicó la encíclica Laudato si’, en la que afirma que “hay lugares que requieren un cuidado particular por su enorme importancia para el ecosistema mundial, o que constituyen importantes reservas de agua y así aseguran otras formas de vida (…) Mencionemos, por ejemplo, esos pulmones del planeta repletos de biodiversidad que son la Amazonía uy la cuenca fluvial del Congo, o los grandes acuíferos y glaciares. No se ignora la importancia de esos lugares para la totalidad del planeta y para el futuro de la humanidad”. El proceso desembocó en la realización del sínodo panamazónico del 6 al 27 de octubre de 2019 y al documento final, donde aparece como una propuesta la necesidad de crear un organismo episcopal que contribuyera a realizar un plan pastoral de conjunto para la región amazónica. Siguiendo los pasos, el 29 de junio de 2020, en plena pandemia de coronavirus, nació la CEAMA, en consonancia con la eclesiología del Concilio Vaticano II, de cuya apertura se cumplieron 60 años el pasado 11 de octubre. La CEAMA considera que su aprobación jurídica y canónica es un “motivo de profundo agradecimiento a Dios, al Papa Francisco y a todos los que animaron este proceso sinodal”, establece la nota. No obstante, desde la institución asumen un desafío: ponerse en comunicación con las Conferencias Episcopales para explicar “la gracia especial de la CEAMA como un espacio de escucha, discernimiento y de acción pastoral misionera en la Región Amazónica”. Este espacio también se llevará a cabo con las Nunciaturas Apostólicas, buscando ayuda en el reconocimiento legal de la CEAMA ante los Estados comprendidos en el territorio amazónico. Prensa CEVNota de Vatican News21 de octubre de 2022

18
Oct

El Papa: confiemos a la Virgen los pueblos donde reinan la guerra y la miseria

Vaticano. En un tuit de la cuenta @Pontifex, Francisco pide unirse en oración por Ucrania y otros países donde se producen tragedias cotidianas, junto al millón de niños que participan hoy en el Rosario por la paz en el mundo. La iniciativa de Ayuda a la Iglesia Necesitada cuenta con la participación de niños de jardines de infancia, parroquias, escuelas y familias de los cinco continentes.Está la martirizada Ucrania, pero también Yemen, Siria, Libia, Myanmar, los países de África y Oriente Medio, y todos aquellos lugares «donde reinan la guerra, la violencia y la miseria», en el centro del pensamiento del Papa, que pide unirse en oración por estas poblaciones junto con el millón de niños que hoy rezan el Rosario por la paz en el mundo. En un tuit desde la cuenta en nueve idiomas @Pontifex, que llega simultáneamente a millones de personas en todos los rincones del planeta, Francisco invita a sumarse a la iniciativa que cada año lanza la Fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada: #Oremos junto con los niños de todos los continentes que hoy rezan el Rosario por la paz en el mundo. Encomendemos a la intercesión de la Virgen al martirizado pueblo ucraniano y a las poblaciones en las que reinan la guerra, la violencia y la miseria. #1millionchildrenpraying También después del Ángelus del domingo pasado, reiterando la angustia recurrente por la población ucraniana, que ha sufrido una nueva lluvia de fuego en los últimos días, el Papa recordó este evento mundial de oración.¡Gracias a todos los niños y niñas que participan! Nos unimos a ellos y encomendamos a la intercesión de la Virgen al martirizado pueblo ucraniano y a las demás poblaciones que sufren la guerra y toda forma de violencia y miseria.Escuelas, familias y parroquias de todo el mundoLa campaña de la ACN involucra a niños de las parroquias, jardines de infancia, escuelas y familias, a quienes se les entrega un paquete informativo gratuito con instrucciones sobre cómo rezar el Rosario, breves meditaciones sobre los Misterios del Rosario y otros materiales -todos disponibles en línea- junto con imágenes para colorear en 26 idiomas diferentes.Piacenza: Dios tiene el control incluso de las guerras y la maldadEl objetivo de la iniciativa, explica el presidente de la Fundación, el cardenal Mauro Piacenza, en un comunicado, «es implorar la paz y la unidad en todo el mundo, animando a los niños y jóvenes a confiar en Dios en los momentos difíciles». El tema elegido es el «amor del Padre por el mundo», representado también por el cartel de la campaña que muestra dos manos abiertas que encierran el globo terráqueo y lo sostienen junto a niños de todos los continentes. «Estas manos simbolizan al Padre divino que ha creado el mundo con amor y que desea salvar a todos los pueblos y devolverlos a Él sanos y salvos», dice Piacenza. «Mirando a nuestro alrededor las guerras y la maldad, las persecuciones, las enfermedades y los miedos que agobian a nuestro mundo, la gente podría preguntarse: ¿Dios tiene realmente el control? Sí, lo tiene, pero también debemos tenderle nuestras manos y aferrarnos a él».Conectados desde los cinco continentesDesde el 2005, con un primer grupo de niños reunidos en un santuario de Caracas, ACN organiza el Rosario para rezar por los países afectados por tragedias. con una amplia participación en ediciones anteriores, este año la iniciativa -transmitida en directo desde Fátima- parece haber recogido una respuesta global: desde la misma Ucrania, donde la Iglesia greco-católica ha traducido los textos al ucraniano y organizará el Rosario en todo el país, hasta Argentina, donde los niños no se reúnen un solo día sino que han decidido hacer toda una novena. Desde Kenia, donde 45 escuelas han asegurado su «presencia» espiritual, hasta Nigeria, azotada por las inundaciones y un ulterior secuestro de un sacerdote, donde 60 iglesias y escuelas de diferentes diócesis rezarán la coronilla.Barta: «El amor triunfa sobre la violencia»«Algunas de las reacciones más positivas que hemos tenido provienen de las mismas regiones donde más se necesita la paz», explica el padre Martin M. Barta, asistente eclesiástico internacional de Ayuda a la Iglesia Necesitada. «Es especialmente emocionante saber que hay niños en Irak, Siria, Bielorrusia o Myanmar rezando junto a los que se reúnen en Fátima, Portugal, Canadá o Estados Unidos. Nos da la esperanza de que el amor que proviene de la fe puede triunfar sobre la violencia». Prensa CEVNota de Vatican News18 de octubre de 2022

17
Oct

El Papa anuncia dos sesiones del Sínodo sobre la sinodalidad

Vaticano. El camino sinodal de la Iglesia está en el corazón de Francisco, pero requiere «no tener prisa». Lo subrayó al final del Ángelus en la Plaza de San Pedro, recordando que el 10 de octubre del año pasado se abrió la primera fase de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, sobre el tema «Por una Iglesia sinodal: comunión, participación, misión». «Desde entonces – explicó – la primera fase del Sínodo ha tenido lugar en las Iglesias particulares, con la escucha y el discernimiento. Los frutos del proceso sinodal iniciado son muchos» y esto exige un momento de maduración. Por ello, para disponer de un tiempo más amplio de discernimiento, he decidido que esta Asamblea Sinodal se celebre en dos sesiones. La primera del 4 al 29 de octubre de 2023 y la segunda en octubre de 2024. Confío en que esta decisión favorezca la comprensión de la sinodalidad como dimensión constitutiva de la Iglesia, y ayude a todos a vivirla como hermanos y hermanas que dan testimonio de la alegría del Evangelio. Camino en el camino Un comunicado de la Secretaría General del Sínodo explica que el Papa Francisco se remitió a la Constitución Apostólica Episcopalis Communio, que contempla esta posibilidad en su artículo 3.  “Esta decisión – se lee – nace del deseo de que el tema de la Iglesia sinodal, por su amplitud e importancia, sea objeto de un prolongado discernimiento no sólo por parte de los miembros de la Asamblea Sinodal, sino de toda la Iglesia”. Una elección “en continuidad con el actual camino sinodal”. “El Sínodo – continúa el comunicado – no es un acontecimiento, sino un proceso, en el que todo el Pueblo de Dios está llamado a caminar juntos hacia lo que el Espíritu Santo le ayuda a discernir como voluntad del Señor para su Iglesia”. Por ello, la Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos asumirá también una dimensión procesal, configurándose como «un viaje dentro de un viaje», para favorecer una reflexión más madura para el mayor bien de la Iglesia. Escucha y discernimiento La Secretaría General del Sínodo anuncia que en las próximas semanas se definirá mejor la celebración de las dos sesiones de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos y el tiempo intermedio. «Este proceso de escucha comenzó en 2021 por las Iglesias locales, es decir, por el Pueblo de Dios reunido en torno a sus Pastores; convocó a las Conferencias Episcopales y a los Sínodos de las Iglesias Católicas Orientales. Hasta 112 de las 114 Conferencias Episcopales de todas las Iglesias Católicas Orientales realizaron un discernimiento a partir de lo que surgió de las Iglesias particulares. Ahora, continúa con una Etapa Continental que culminará con la celebración de Asambleas Sinodales Continentales, entre enero y marzo de 2023, convocadas para revisar el camino recorrido, para continuar la escucha, el discernimiento a partir del Documento de la Etapa Continental y según las especificidades socioculturales de sus respectivas regiones con el objetivo de lograr una etapa final en este camino espiritual». Prensa CEVNota de Vatican News17 de octubre de 2022