Categoría: Eclesial Internacional

16
Ene

Tierra Santa. Obispos piden una solución política que garantice la justicia y la paz

Los obispos de la Coordinación de Tierra Santa exhortan a los gobiernos a contribuir, en Tierra Santa, «a la creación de una nueva solución política basada en la dignidad humana de todos» y concluyen hoy la peregrinación de solidaridad con los cristianos de Gaza, Ramallah y Jerusalén Este. En una amplia declaración al final de su visita, los prelados subrayan que tal solución debe ser «elaborada en última instancia por los pueblos en diálogo de Tierra Santa». Pero para los 15 firmantes de la declaración, es necesario que los demás países hagan su parte «instando a la aplicación del derecho internacional; siguiendo las directrices de la Santa Sede en el reconocimiento del Estado de Palestina; teniendo en cuenta las necesidades de seguridad de Israel y el derecho de todos a vivir con seguridad; rechazando el apoyo político o económico a los asentamientos; y oponiéndose resueltamente a los actos de violencia o a las violaciones de los derechos humanos por parte de cualquiera». Contribuir con la justicia y la paz La Coordinación de Tierra Santa recuerda que los obispos católicos locales, en un mensaje reciente, ya habían «denunciado la incapacidad de la comunidad internacional para contribuir a la promoción de la justicia y la paz en este lugar donde nació Cristo» e invita a los gobiernos a «hacer más para cumplir con sus responsabilidades de hacer cumplir el derecho internacional y proteger la dignidad humana», señalando que «en algunos casos han sido activamente cómplices de los males del conflicto y la ocupación». Buscar una solución duradera Testigos de que la población de Tierra Santa «ve cómo se desvanece cada vez más la esperanza de una solución duradera» y de que la construcción de nuevos asentamientos y el muro de separación están destruyendo «toda perspectiva de dos Estados que vivan en paz», los prelados de la Coordinación reconocen que las condiciones de vida son cada vez más insostenibles en Tierra Santa, particularmente en Cisjordania, donde «los derechos fundamentales, incluida la libertad de movimiento, también se niegan», mientras que «en Gaza las decisiones políticas de todas las partes involucradas han llevado a la creación de una prisión al aire libre, a violaciones de los derechos humanos y a una profunda crisis humanitaria». «Hemos sido acogidos por familias que hoy tienen como prioridad la supervivencia diaria y cuyas aspiraciones se reducen a lo esencial, como tener electricidad y agua potable», dijeron los obispos, «tocados por el sacrificio de religiosos, laicos y sacerdotes, comprometidos activamente en todos los campos para tratar de construir un futuro mejor para todos, ofreciendo servicios básicos, especialmente educación, trabajo y asistencia a las personas más vulnerables». Solidaridad con quienes buscan la paz Ante esta realidad, la Coordinación de Tierra Santa invita a todos los fieles «a rezar por esta misión y a apoyarla», mientras que el aumento de los peregrinos a Tierra Santa y el encuentro con las comunidades locales pueden ayudar. Finalmente, los obispos de la Coordinación esperan que la comunidad internacional pueda «expresar su solidaridad con aquellos israelíes y palestinos que no quieren renunciar a su lucha no violenta por la justicia, la paz y los derechos humanos». Prensa CEV Nota de prensa de Vatican News 16 de enero de 2020

16
Ene

Un cristiano de cada ocho es discriminado en el mundo

La persecución afecta a 260 millones de personas en 73 países. Crítica la situación en Corea del Norte y el Sahel, mientras que las comunidades de Irak y Siria siguen disminuyendo. Los asesinatos están disminuyendo. Uno de cada ocho cristianos en el mundo sufre persecución a causa de su fe, 260 millones de personas. Es el dato que emerge de la Lista de Vigilancia Mundial 2020 de la ONG Puertas Abiertas/Open Doors, presentada el 15 de enero en la Cámara de Diputados de Italia. El informe analiza los acontecimientos en el mundo desde el 1 de noviembre de 2018 hasta el 31 de octubre en cien países potencialmente afectados por el fenómeno y muestra cómo, en comparación con el año pasado, los cristianos discriminados a un nivel definido como «alto», «muy alto» y «extremo» han aumentado en 15 millones. El número de cristianos asesinados está disminuyendo El número de cristianos asesinados disminuyó (de 4.305 a 2.983), siendo Nigeria el país más peligroso para los cristianos debido a los ataques de las tribus fulani y los islamistas de Boko Haram. En segundo lugar, se encuentra la República Centroafricana en guerra y en tercer lugar Sri Lanka, donde más de 200 personas murieron en la Pascua de 2019. Excluidos de la vida pública y perseguidos en privado «Las muertes y los asesinatos han disminuido, pero eso suele cambiar dependiendo del año y por lo tanto es un dato muy oscilante», explica Cristian Nani, director de Puertas Abiertas/Open Doors. Sin embargo, lo que es constante es la creciente presión en la vida privada y pública en la comunidad y en la Iglesia. «Según varios parámetros que analizamos – discriminación, violencia, exclusión del trabajo, de la salud y de la atención médica, leyes que prohíben la existencia de cristianos o leyes contra las conversiones que se utilizan contra los cristianos», explica Nani, «todo esto en conjunto conduce a un aumento de la presión en muchos Estados». En al menos 73 países los cristianos experimentan un alto nivel de persecución». Corea del Norte y Afganistán los países más peligrosos De hecho, hay 11 países en los que la persecución contra los cristianos se define como «extrema». En primer lugar, por decimoctavo año consecutivo, está Corea del Norte, donde, según Open Doors, hay entre 50.000 y 70.000 cristianos detenidos en campos de trabajo a causa de su fe. Luego siguen los países que están en guerra desde hace años y que poseen un componente fundamentalista islámico muy alto como Afganistán, Somalia y Libia, seguidos de Pakistán donde, en el año de la liberación de Asia Bibi, la ley contra la blasfemia sigue vigente. La situación en el Sahel empeora Por primera vez, Burkina Faso y Camerún se encuentran entre los 50 primeros países en cuanto a discriminación contra los cristianos, lo que da testimonio de la difícil situación en la zona del Sahel, donde operan al menos 27 grupos yihadistas. En el norte de Burkina Faso se han cerrado más de 200 iglesias. «Uno de los puntos esenciales en la agenda de estos movimientos es, sin embargo, la eliminación de la presencia cristiana», explica de nuevo Nani: «Llegan a las aldeas del norte de Burkina Faso dando un ultimátum de 3 días a las familias cristianas para que desaparezcan del lugar. Si esto no sucede después de tres días los matan». En Irak y Siria los cristianos corren el riesgo de desaparecer La persecución de los cristianos en el Medio Oriente perdura desde hace años. En Irak antes de la guerra de 2003 había un millón y medio. Hoy en día hay alrededor de 200.000 y el regreso a la llanura de Nínive después de la expulsión del Estado Islámico también es difícil debido a la falta de condiciones de seguridad. En Siria, en guerra desde hace nueve años, los cristianos han pasado de más de 2 millones a 744.000. Más de 8.000 abusos contra mujeres cristianas En general, casi diez mil iglesias han sido cerradas o atacadas, mientras que se reportan más de ocho mil casos de abuso a mujeres por discriminación religiosa. «Esta es la punta del iceberg», dice Nani, «porque todavía no podemos rastrear estos fenómenos, como los matrimonios forzados. Las estimaciones, dice, son «que al menos 23 mujeres cristianas sufren cada día violencia sexual» en cuanto tales. América Latina Finalmente, la situación en América Latina, en donde arriesgan sus vidas los sacerdotes y fieles que desafían el crimen organizado en países como Colombia y México. Prensa CEV Nota de prensa de Vatican News 16 de enero de 2020

14
Ene

Corea del Sur. Católicos aumentan casi un 50 por ciento en 20 años

El número de católicos en Corea del Sur ha aumentado en casi un 50 por ciento en las últimas dos décadas, aunque este ritmo de crecimiento se ha ralentizado en los últimos años, informa el diario Korea Herald, citando el nuevo informe del Instituto Pastoral Católico de Corea. En 2018 los católicos surcoreanos eran 5.866.510, en comparación con 3.946.844 en 1999, un aumento del 48,6%. En este período, el porcentaje de católicos en el país aumentó de 8.3 a 11.1%. Sin embargo, el informe señala que la tasa de crecimiento real ha caído por debajo del 1% en los últimos años. Por el contrario, en 2000 y 2001, la población católica aumentó en un 3,2% y un 3,9% respectivamente. La tasa de crecimiento se redujo aún más por debajo del 2% en 2009, alcanzando el 1,7% en 2010, antes de recuperarse hasta el 2,2% en 2014. Este pico de crecimiento se atribuyó a la visita del Papa Francisco a Corea del Sur ese año. A pesar de que el número real de católicos ha crecido, la asistencia a la misa ha disminuido del 29,5 al 18,3 por ciento en el mismo período 1999-2018. «Todas las diócesis han hecho varios esfuerzos para devolver a los cristianos tibios a la Iglesia y para modernizarla, pero un cambio significativo está aún por venir. El problema se ha repetido cada año», dice el informe. «Es hora de reflexionar sobre nuestro actual trabajo misionero – continúa – y de reconsiderar la dirección de la evangelización nacional». Prensa CEV Nota de prensa de Vatican News 14 de enero de 2020

14
Ene

El celibato sacerdotal según el Concilio

El Decreto conciliar Presbyterorum Ordinis habla del «don precioso del celibato sacerdotal», pero también afirma que no es requerido «por la naturaleza misma del sacerdocio» y tiene palabras de estima para aquellos que son «excelentes sacerdotes casados» Los avances del libro escrito por el Papa emérito Benedicto XVI y por el cardenal Robert Sarah, prefecto de la Congregación para el Culto divino, en defensa del celibato sacerdotal, han provocado numerosos comentarios. Ayer, el director de la Oficina de Prensa vaticana, Matteo Bruni, afirmó que la posición del Papa Francisco sobre el celibato es conocida, recordando lo que él dijo en el avión durante su regreso de Panamá: «Me viene a la mente una frase de San Pablo VI: ‘Prefiero dar mi vida antes que cambiar la ley del celibato’». Un don, no un dogma En el debate se recordó también la posición del Concilio Vaticano II a este respecto. El Decreto conciliar Presbyterorum Ordinis sobre el ministerio y la vida sacerdotal, promulgado por San Pablo VI el 7 de diciembre de 1965, afirma: «La perfecta y perpetua continencia por el reino de los cielos, recomendada por nuestro Señor, aceptada con gusto y observada plausiblemente en el decurso de los siglos e incluso en nuestros días por no pocos fieles cristianos, siempre ha sido tenida en gran aprecio por la Iglesia, especialmente para la vida sacerdotal. Porque es al mismo tiempo emblema y estímulo de la caridad pastoral y fuente peculiar de la fecundidad espiritual en el mundo. No es exigida ciertamente por la naturaleza misma del sacerdocio, como aparece por la práctica de la Iglesia primitiva y por la tradición de las Iglesias orientales, en donde, además de aquellos que con todos los obispos eligen el celibato como un don de la gracia, hay también presbíteros beneméritos casados; pero al tiempo que recomienda el celibato eclesiástico, este Santo Concilio no intenta en modo alguno cambiar la distinta disciplina que rige legítimamente en las Iglesias orientales, y exhorta amabilísimamente a todos los que recibieron el presbiterado en el matrimonio a que, perseverando en la santa vocación, sigan consagrando su vida plena y generosamente al rebaño que se les ha confiado”. Más libres para servir a Dios y a los demás El celibato – observa el Decreto – «tiene mucha conformidad con el sacerdocio. Porque toda la misión del sacerdote se dedica al servicio de la nueva humanidad, que Cristo, vencedor de la muerte, suscita en el mundo por su Espíritu”. Gracias al celibato, los presbíteros adhieren a Dios más fácilmente “con un corazón indiviso” y “se dedican más libremente en El y por El al servicio de Dios y de los hombres, sirven más expeditamente a su reino y a la obra de regeneración sobrenatural, y con ello se hacen más aptos para recibir ampliamente la paternidad en Cristo”. “De esta forma, pues, manifiestan delante de los hombres que quieren dedicarse al ministerio que se les ha confiado, es decir, de desposar a los fieles con un solo varón”, que es Cristo, y “se constituyen, además, en señal viva de aquel mundo futuro, presente ya por la fe y por la caridad, en que los hijos de la resurrección no tomarán maridos ni mujeres”. Una legislación confirmada por la Iglesia latina «Por estas razones – continúa el decreto conciliar – el celibato, que al principio se recomendaba a los sacerdotes, fue impuesto por ley después en la Iglesia Latina a todos los que eran promovidos al Orden sagrado. Este Santo Concilio aprueba y confirma esta legislación en cuanto se refiere a los que se destinan para el presbiterado”. La gracia de la fidelidad “Exhorta también este Sagrado Concilio a los presbíteros que, confiados en la gracia de Dios, recibieron libremente el sagrado celibato según el ejemplo de Cristo, a que, abrazándolo con magnanimidad y de todo corazón, y perseverando en tal estado con fidelidad, reconozcan el don excelso que el Padre les ha dado y que tan claramente ensalza el Señor, y pongan ante su consideración los grandes misterios que en él se expresan y se verifican. Cuando más imposible les parece a no pocas personas la perfecta continencia en el mundo actual, con tanto mayor humildad y perseverancia pedirán los presbíteros, juntamente con la Iglesia, la gracia de la fidelidad, que nunca ha sido negada a quienes la piden, sirviéndose también, al mismo tiempo, de todas las ayudas sobrenaturales y naturales, que todos tienen a su alcance. No dejen de seguir las normas, sobre todo las ascéticas, que la experiencia de la Iglesia aprueba, y que no son menos necesarias en el mundo actual”. Apreciar el don del celibato El Decreto concluye así el capítulo dedicado al celibato: «Ruega, por tanto, este Sagrado Concilio, no sólo a los sacerdotes, sino también a todos los fieles, que aprecien cordialmente este precioso don del celibato sacerdotal, y que pidan todos a Dios que El conceda siempre abundantemente ese don a su Iglesia”. Prensa CEV Nota de prensa de Vatican News 14 de enero de 2020

13
Ene

Fortalecer a jóvenes y sacerdotes: otro servicio fundamental de la Iglesia en la Venezuela que sufre

La crisis en Venezuela está dejando unos datos de emergencia social y humanitaria sin precedentes en el país. La ONU estima que unos 1,9 millones de personas en Venezuela necesitan asistencia alimentaria, entre ellos 1,3 millones de niños menores de 5 años. Además de esto, unos 2,8 millones de personas necesitan asistencia sanitaria, incluidos 1,1 millones de niños menores de 5 años. La falta de empleo y la carestía de todo bien básico como comida o medicamentos empuja a cada vez más venezolanos a plantearse marcharse del país. El sueldo mensual medio, para aquellos que aún conservan su trabajo, es actualmente de unos 5 dólares. Sin embargo, según Caritas Venezuela, llenar la cesta de la compra para una familia durante un mes cuesta unos 300 dólares. La gente busca comida fuera en la calle o emigra sin remedio. Centenares de personas están acudiendo a las iglesias y parroquias de Venezuela en busca de ayuda y consuelo. Los sacerdotes se han convertido en los agentes sociales y pastores que tratan de resolver problemas cada vez más graves. Cuentan contigo para renovar su compromiso y poder tener espacios de oración donde coger fuerzas. Cuidar al cuidador, poder estar fuertes para ayudar al débil El padre Beiker Martínez, es de la Diócesis de La Guaira, una zona de la periferia de Caracas, la capital: “Hay que cuidar al cuidador. Para poder nosotros mantener esta ayuda a las personas, el nivel psicológico y espiritual debe ser siempre el óptimo. A mí particularmente, en la parroquia, el día entero tengo siempre que atender a dos o tres personas que van a tocar para buscar algo de alimento”. Este sacerdote es un ejemplo de la enorme presión que vive el clero actualmente y cómo algunas diócesis quieren seguir cuidando de sus sacerdotes sin dejar de lado la creciente misión pastoral y asistencial.  “Ayuda a la Iglesia Necesitada nos viene ayudando desde hace varios años con un programa de formación permanente para los sacerdotes. Consiste en un retiro espiritual, una vez al año durante 6 días, para rezar, para confesarnos, para cargar baterías, como decimos aquí. Dos veces al año tenemos reuniones de estudio”, comenta Mons. Raúl Biord, Obispo de La Guaira y Segundo Vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana. Actualmente del grupo de sacerdotes que trabaja en esta diócesis, algunos son diocesanos y otros pertenecen a alguna orden religiosa, se encuentran reunido en una jornada de formación sobre la exhortación apostólica del Papa Francisco Amoris Laetitia. Tras la presentación del Obispo se abre un momento de trabajo por grupos. Los sacerdotes aprovechan también para compartir sus experiencias y el trabajo que están haciendo ya activamente en sus parroquias El padre Martínez participa en esta jornada: “Es algo estupendo poder tener estos momentos de encuentro. También nosotros corremos riesgo de dejarnos llevar por el mensaje de tristeza y trasmitir un mensaje distinto del evangelio, y no dar lo que las personas vienen buscando en nosotros.” Ayuda a la Iglesia Necesitada apoya a los sacerdotes de Venezuela financiando cursos de formación, retiros espirituales y convivencias para reforzar su misión y poder responder con mayor entusiasmo a tantos problemas que atraviesa el pueblo. Formar a líderes jóvenes en esperanza, fe y caridad Además de los sacerdotes, Mons. Biord ha solicitado ayuda para la formación de los jóvenes, para fomentar la pastoral entre ellos en las parroquias y poder contar con líderes jóvenes que son el futuro de la Iglesia y la sociedad.  “Se han ido del país más de 4 millones de personas, una buena parte, unos 60-70% son nuestros jóvenes, porque no encuentran un trabajo, no encuentran posibilidad de estudiar, no encuentran futuro”, comenta el prelado. “Con los jóvenes que tenemos en las parroquias, estamos comprometidos a formarlos, hemos diseñado una escuela de líderes, la hemos llamado así, que invita a jóvenes universitarios de las distintas parroquias y se les ofrece a través de 5 fines de semana al año, una formación en distintos temas: la formación cristiana, el encuentro con Jesucristo, la Doctrina Social de la Iglesia, su compromiso como ciudadanos”. Los jóvenes de Venezuela han sabido responder con valor y alegría ante las muchas dificultades que atraviesa el país. Son jóvenes heroicos, un orgullo para Venezuela. Sin embargo, muchos han tenido que marcharse en busca de un futuro. La Iglesia les anima y quiere apoyar a los que se han quedado. “Participé en la escuela de líderes jóvenes y de ahí formamos este grupo. La escuela de líderes nos ha unido y nos ha hechos aumentar la conciencia de la familia de Dios, a veces vamos a la Iglesia solo cuando tenemos problemas o cuando te sientes solo (…) pero en ese momento difícil descubrí unos amigos de la Iglesia que me mostraban su cariño, me escuchaban y se convirtieron en mis hermanos en la fe. El grupo juvenil de mi parroquia ha crecido, pero buscamos que aumente y nos fortalezcamos más”. Es la experiencia que comparte Damaris Arteaga, una joven estudiante universitaria, de la Parroquia Beata María de San José, en Catia La Mar, que ha participado en estas jornadas de formación para jóvenes. Los jóvenes en Venezuela, de la mano de la Iglesia local, están siendo apoyados por Ayuda a la Iglesia Necesitada. Para que no se sientan solos, que puedan madurar como cristianos y ser luz para otros jóvenes que están sufriendo tanto esta crisis. Ayuda a la Iglesia Necesitada donó a nivel internacional en 2018 una ayuda total para la Iglesia en Venezuela de cerca de 1 millón de euros. En 2019 se ha previsto un presupuesto que supera el millón de euros. El 80% de las diócesis y jurisdicciones eclesiásticas de Venezuela reciben ayuda de ACN a través de estipendios de Misas, subsistencia para religiosas y sacerdotes, material catequético, construcción de pozos, generadores eléctricos, formación cristiana y vehículos para la misión. Prensa CEV Nota de prensa de Religión en Libertad 13 de enero de 2020

13
Ene

Presidente del CELAM anunció inicio de preparativos para el Gran Evento Eclesial por los 12 años de Aparecida

Panamá.- Durante su participación en la 211° Asamblea Plenaria de los Obispos de la Conferencia Episcopal de Panamá, realizada en el marco de las visitas que viene llevando a cabo a las Conferencias Episcopales de América Latina y El Caribe, Monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, OFM, Presidente del CELAM y Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, anunció que una Comisión Especial del CELAM viene ya trabajando en la preparación del gran evento eclesial por los 12 años de la Conferencia General del Episcopado de Aparecida. “Posiblemente la conmemoración por los 12 años de este importante acontecimiento para nuestra Iglesia se realice en México, en el Santuario de la Virgen de Guadalupe”, sostuvo Monseñor Cabrejos. De esta manera, el CELAM quiere celebrar y poner sobre la agenda actual que los temas discutidos en la V Conferencia General del Episcopado de América Latina y del Caribe aún se encuentran vigentes, añadió el Presidente del CELAM. Asimismo, en el diálogo con los Obispos panameños, Monseñor Cabrejos también expuso los avances del proceso de Renovación y Reestructuración del CELAM. “Estamos viviendo este tiempo de renovación como un proceso, que va a continuar en el futuro por el bien de nuestra Iglesia”, expresó. Asimismo, el Presidente del CELAM comentó que muchas Conferencias Episcopales vienen ofreciendo sugerencias positivas que alimenta dicho proceso. En otro momento, el también Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana relató su experiencia en el pasado Sínodo de la Amazonía realizado en Roma junto al Papa Francisco. “Ha sido un gran acontecimiento y estamos a la espera del Documento Post Sinodal del Papa”, afirmó. “El Sínodo sigue siendo una luz que ilumina la creación de nuevas redes que fomentan el cuidado de la creación, como la Red Eclesial Ecológica Mesoamericana (REEMAM), de la cual la Iglesia de Panamá forma parte”, dijo. Prensa CEV Nota de prensa CELAM 13 de enero de 2020

13
Ene

Colombia: Obispos piden encontrar salidas políticas y pacíficas al conflicto armado

En el comunicado, los Obispos de la Región del Pacífico y Suroccidente de Colombia también solicitan “atender las alertas por posibles situaciones de connivencia de integrantes de la Fuerza Pública con grupos ilegales, expresadas por organizaciones sociales y de derechos humanos, y por la Diócesis de Quibdó desde años anteriores, y reiteradas en los últimos dos años”. En un comunicado firmado el 11 de enero de 2020, los Obispos de la Región del Pacífico y Suroccidente de Colombia, expresaron su solidaridad con los habitantes del Departamento del Chocó, a la Diócesis de Quibdó y a los pobladores de otras regiones de Colombia en las cuales se ha agudizado el conflicto social y armado. “En diversos momentos hemos advertido sobre las dificultades que viven muchas personas en el territorio del Pacífico y Suroccidente, y hemos solicitado al Estado colombiano una solución integral que resuelva las causas estructurales que están en la raíz de la crisis humanitaria”, escriben. Estos territorios, compuestos en su mayoría por afrodescendientes, indígenas y mestizos, ha sido uno de los más golpeados por la violencia. Los prelados elevaron realizaron un nuevo llamado a “retomar el sendero de la paz en la perspectiva del respeto a los Derechos Humanos, los Derechos de los Pueblos y el Derecho Internacional Humanitario». Establecer mecanismos de protección a comunidades y líderes sociales Los obispos convocan “al Gobierno Nacional como a otras instancias estatales, a establecer condiciones de vida digna y mecanismos de protección para las comunidades y líderes sociales, tanto a Leyner Palacios como a los otros liderazgos que están en riesgo”. También solicitan “atender las alertas por posibles situaciones de connivencia de integrantes de la Fuerza Pública con grupos ilegales, expresadas por organizaciones sociales y de derechos humanos, y por la Diócesis de Quibdó desde años anteriores, y reiteradas en los últimos dos años”. Se necesitan salidas políticas y pacíficas al conflicto armado A los grupos armados, subrayan que “deben entender su condición de agresores de la población civil, y por lo tanto, asumir el rechazo del que son objeto a causa de sus acciones delictivas”. “En medio de la zozobra en la que viven tantos ciudadanos colombianos” reafirman la necesidad de “encontrar salidas políticas y pacíficas al conflicto armado”: “con ELN para lograr un acuerdo de paz; y con las AGC y estructuras similares, para que se posibilite un acogimiento colectivo a la justicia”, indican. “Esperamos la respuesta sincera de los diversos actores, mediante gestos concretos de verdadera voluntad de paz.” Finalmente, piden a los colombianos continuar en permanente oración y seguir trabajando con compromiso en la construcción de un país equitativo, fraterno y sin violencia. El mensaje está firmado por: Mons. Darío de Jesús Monsalve Mejía, Arzobispo de Cali; Mons. Luis José Rueda Aparicio, Arzobispo de Popayán; Mons. Juan Carlos Barreto Barreto, Obispo de Quibdó; Mons. Mario de Jesús Álvarez Gómez, Obispo de Istmina – Tadó; Mons. Hugo Alberto Torres Marín, Obispo de Apartadó, Mons. Luis Albeiro Maldonado, Obispo de Mocoa – Sibundoy; Mons. Rubén Darío Jaramillo Montoya, Obispo de Buenaventura; Mons. José Saúl Grisales, Obispo de Ipiales; Mons. Orlando Olave, Obispo de Tumaco; Mons. Edgar de Jesús García Gil, Obispo de Palmira. Prensa CEV Nota de prensa de Vatican News 13 de enero de 2020