Categoría: Eclesial Internacional

23
Jul

CELAM: Programa Centralidad de la Niñez culminará teleconferencias sobre Ternura y Cultura del Buen Trato

El Programa Centralidad de la Niñez cierra su ciclo de teleconferencias de la mano de Ornella Barros con el tema “El papel de las comunidades de fe en la protección y bienestar de los niños y adolescentes durante y después del Covid-19”. Se trata de la quinta y última conferencia sobre Ternura y Cultura del Buen Trato antes, durante y después de la pandemia. La cita es este viernes, 24 de julio a las 10.00 am (hora de Colombia) y contará con la moderación de la presidenta del Movimiento con la Niñez y la Juventudes Loida Carriel. Una iniciativa que reúne a miles de Iglesias e instituciones cristianas evangélicas en toda América Latina y el Caribe. Además será transmitida por el Fanpage de Facebook del Consejo Episcopal Latinoamericano y Centralidad de la Niñez. También estará disponible la opción modo oyente para quienes deseen recibir materiales en sus correos de estas teleconferencias y de las actividades del Programa Centralidad Niñez a través de sus socios de Huellas de Ternura  Al cierre del ciclo de las teleconferencias aquellos participantes registrados en modo certificado y que hayan cumplido con las normas establecidas, como hacer el registro de asistencia y entregar su reflexión en torno a los temas abordados, obtendrán su certificado de asistencia con el aval de las organizaciones socias pasados 15 días hábiles. Programa Centralidad de la Niñez Esta serie de teleconferencias está dirigida a agentes de pastoral de la infancia, líderes, docentes y todas aquellas personas vinculadas al trabajo con niñez. Se ha pensado desde una vertiente ecuménica de la mano de especialistas de talla mundial. El Programa Centralidad de la Niñez (PCN) es una mancomunidad interinstitucional creada en 2009, está integrada por el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), World Vision América Latina, Cáritas Latinoamérica, la Federación Internacional Fe y Alegría, la Confederación Latinoamericana y Caribeña de Religiosos (CLAR), Confederación Interamericana de Educación Católica (CIEC) y el Movimiento Juntos con la Niñez y la Juventud. Ingresa por zoom La teleconferencia sobre de Ornella Barros sobre “El papel de las comunidades de fe en la protección y bienestar de los niños y adolescentes durante y después del Covid-19”; se transmitirá a través de la plataforma zoom. Aquí les dejamos el link para facilitar el ingreso: https://worldvision.zoom.com/j/93607517733Contraseña: 415174 Sobre la ponente Ornella Barros, de nacionalidad colombiana, es evangélica, trabaja en New York para la iniciativa de Oración y Acción por la Niñez de Arigatou International coordinando el Día Mundial de Oración y Acción por la Niñez que se celebra cada 20 de Noviembre en el marco del aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño. Es politóloga de la Universidad de los Andes (Colombia) y tiene una maestría en Derechos Humanos de la Universidad de Oslo. Está involucrada en espacios interreligiosos promovidos por la Red Global de Religiones a Favor de la Niñez (GNRC por sus siglas en inglés) desde 2002.Ornella tiene más de diez años de experiencia internacional apoyando la participación significativa de niños, niñas y adolescentes en distintos espacios, así como una amplia experiencia en procesos de protección infantil, realizando investigaciones participativas, liderando procesos de monitoreo, evaluación y coordinando campañas de incidencia a favor de la infancia en situación de vulnerabilidad. En el pasado ha colaborado con organizaciones enfocadas en la infancia, como World Vision, The European Wergeland Center, Terre des Hommes International Federation, Kindernothilfe, Save the Children y Global Child Forum.Sobre el Programa Centralidad de la Niñez. Prensa CEVNota de prensa CELAM23 de julio de 2020

23
Jul

Mensaje del Alto Comité para la Fraternidad Humana sobre la antigua basílica cristiana Santa Sofía

Vaticano.- Carta de Mohamad Abdel Salam, secretario general de la HCHF y asesor especial del Gran Imán de Al-Azhar Ahmad al Tayeb, por la conversión en mezquita de la antigua basílica cristiana de Santa Sofía, llamando a «evitar cualquier iniciativa que pueda socavar el diálogo interreligioso y la comunicación intercultural y crear tensión y odio entre los seguidores de las diferentes religiones». La reapertura de la antigua iglesia bizantina como lugar de culto islámico está prevista para el próximo 24 de julio. Continúan los preparativos en Turquía para convertir la basílica cristiana de Santa Sofía en una mezquita. La reapertura de la antigua iglesia bizantina -convertida en mezquita en el siglo XV tras la conquista otomana de Constantinopla y convertida en museo en 1934 a instancias del entonces presidente Mustafá Kemal Ataturk- como lugar de culto islámico está prevista para el 24 de julio. Mientras tanto, han continuado los llamamientos y las protestas en el mundo contra su conversión en mezquita querida por el Presidente turco Recep Tayyip Erdogan. Carta del Alto Comité para la Fraternidad Humana A los llamamientos también se han unido varios representantes importantes del mundo musulmán. Entre ellos, el Alto Comité para la Fraternidad Humana (HCHF) que ha escrito una carta al Consejo Mundial de Iglesias (CMI). «Reconocemos el valor cultural y espiritual de Santa Sofía para toda la humanidad y, por lo tanto, apoyamos su llamamiento para evitar las divisiones y promover el respeto y la comprensión mutua entre todas las religiones«, dice la carta, firmada por el jurista islámico Mohamad Abdel Salam, secretario general de la HCHF y asesor especial del Gran Imán de Al-Azhar Ahmad al Tayeb. La convivencia como prioridad Según la HCHF, los lugares de culto deben transmitir «un mensaje de paz y amor para todos» y no ser utilizados para «contribuir a la segregación y la discriminación, en un momento en que el mundo realmente necesita responder al llamado de las religiones a buscar la solidaridad y fortalecer los valores de la convivencia y la fraternidad humana«. En este sentido -subraya la carta- es necesario «evitar cualquier iniciativa que pueda socavar el diálogo interreligioso y la comunicación intercultural y crear tensión y odio entre los seguidores de las diferentes religiones» y, en cambio, dar «prioridad a los valores de la convivencia«. Santa Sofía: una encrucijada de conocimiento, luz, sabiduría y paz Con otra carta del mismo tono, dirigida al Consejo Mundial de Iglesias, firmada por Hafid Ouardiri, director de la Fundación Musulmana de l’Entre-Connaissance de Ginebra, así como cofundador y vicepresidente de la Plataforma Interreligiosa de Ginebra, quien expresó su pleno apoyo a la carta dirigida el 11 de julio por el Secretario General interino del CMI, el reverendo Ioan Sauca, al Presidente Erdogan: «Junto con otros musulmanes de todo el mundo, rezo para que Santa Sofía siga siendo lo que siempre ha sido desde 1934: una encrucijada de conocimiento, luz, sabiduría y paz para toda la humanidad«, escribió Ouardiri. Signos de un diálogo profundo y genuino Sauca, por su parte, expresó su sorpresa y gratitud por todos estos testimonios de solidaridad: «Fue más de lo que podíamos esperar. Estoy orgulloso y animado de ver estos signos de apoyo y solidaridad expresados por nuestros amigos musulmanes. Demuestra que nuestro diálogo es profundo y genuino y que juntos podemos hacer realidad el sueño de construir un mundo pacífico en el que los pueblos y las religiones se respeten y apoyen mutuamente«, añadió el Secretario General del CMI, señalando que el diálogo interreligioso «se ha venido desarrollando durante casi 50 años y debe seguir profundizándose» en cuanto que es «necesario hoy más que nunca«. Por iniciativa de Erdogan, tres conocidos intelectuales turcos, expertos en teología, citados por la agencia Fides, también intervinieron en estas horas: Nazif Ay, Mehmet Ali Öz y Yusuf Dülger, que hablan de un «error irreparable«, que «destruye el mensaje de reconciliación y justicia del Islam, cuyo significado es ‘paz’«. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News23 de julio de 2020

23
Jul

Quintales de comida en el Vaticano para los pobres

Vaticano.- La organización sin fines de lucro «El corazón se derrite» ha regresado para entregar al cardenal Krajewski un camión lleno de productos y mantas para distribuirlos entre las personas más frágiles de Roma. Un camión cargado de comida para los pobres, y esta vez también para los que se han puesto de rodillas por la pandemia, ha vuelto al Vaticano por tercera vez gracias a los esfuerzos de la organización florentina sin ánimo de lucro «El corazón se derrite». Después de las entregas del pasado diciembre y luego en enero, llegaron otros 50 quintales de comida – con pasta, leche, atún, tomate – pero también con mantas, para ser entregados a la caridad del Papa. El cardenal Konrad Krajewski se puso en contacto con ellos hace un año para tratar de satisfacer la enorme cantidad de necesidades de las muchas personas dispersas por Roma que no saben cómo comer. La entrega tuvo lugar ayer y los alimentos comenzaron a tomar las calles de la solidaridad capitolina, desde los sin techo que orbitan alrededor de San Pedro hasta algunos barrios periféricos pasando por la estación de Termini, una de las zonas que a menudo ven al cardenal trabajando con sus voluntarios en la distribución de la ayuda. El post confinamiento ha permitido, por lo tanto, la reanudación de esta actividad, que tendrá un seguimiento, gracias al espíritu de iniciativa de la organización sin fines de lucro que en las últimas semanas se ha distinguido por haber proporcionado, en colaboración con otras siglas, casi 200 toneladas de productos a las zonas más precarias de la Toscana. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News23 de julio de 2020

23
Jul

Santa Sede sobre la trata de personas: garantizar que no se violen los derechos de las víctimas

Vaticano.- Todo sistema normativo debe garantizar que no se violen los derechos de las víctimas y ofrecerles toda la asistencia necesaria, vigilando al mismo tiempo la aplicación de las leyes contra la trata de personas: lo afirmó Monseñor Joseph Grech, de la Misión Permanente de la Santa Sede ante las Organizaciones internacionales en Viena, interviniendo en la 20th Alliance against Trafficking in Persons. Es una de las actividades ilegales más lucrativas del mundo, pero también una en la que la tasa de impunidad es todavía muy, muy alta: el tráfico de seres humanos cuenta hoy en día con alrededor de 40 millones de víctimas. La mayoría son mujeres, pero también hombres y cada vez más niños y niñas, tratados por las redes delictivas como moneda de cambio y reducidos a una semiesclavitud para la explotación sexual y laboral, la mendicidad, los matrimonios precoces, las adopciones ilegales e incluso la extracción de órganos. Una actividad que a menudo queda impune: por cada 2.154 víctimas, se condena sólo a un traficante de seres humanos, a pesar del creciente compromiso de las instituciones nacionales e internacionales y de las ONG para combatir el fenómeno. El relanzamiento de los esfuerzos para poner fin a la impunidad, garantizar la justicia para las víctimas, protegerlas y asegurar el respeto efectivo de sus derechos humanos fundamentales fue el objetivo de la 20th Alliance against Trafficking in Persons (20ª Alianza contra la Trata de Personas), una plataforma para la defensa y la cooperación contra la trata que reúne a organizaciones internacionales y de la sociedad civil. El evento, titulado «Poner fin a la impunidad: hacer respetar la justicia persiguiendo la trata de seres humanos», tuvo lugar del 20 al 22 de julio en Viena y fue organizado en cooperación con la OSCE, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa. Monseñor Joseph Grech, en nombre de la Misión Permanente de la Santa Sede ante las Organizaciones Internacionales en Viena, participó en los trabajos e intervino en cuatro grupos de debate.  La desconcertante discrepancia entre el elevado número de víctimas y el escaso número de procesos y condenas por tráfico de seres humanos plantea el interrogante de la aplicación efectiva de las medidas que los Estados se han comprometido a adoptar para combatir el fenómeno, observó el obispo maltés en el primero de sus discursos: » No obstante los esfuerzos de la comunidad internacional, los recursos son escasos, principalmente a causa de las continuas crisis económicas y la inestabilidad sociopolítica de muchos Estados». Además -añadió- la financiación inadecuada de los sistemas judiciales nacionales alienta a centrarse en los resultados inmediatos, pero de alcance limitado, en vez de en la captura y condena de los «peces gordos», para los que se necesitan más tiempo y recursos, pero que podrían marcar una verdadera diferencia en la lucha contra este flagelo. La consecuencia – subrayó- es que de esta manera se perpetúa la impunidad de los traficantes de personas. Además, subsiste el problema de fondo del acceso de las víctimas a la justicia y a la garantía de sus derechos fundamentales: personas vulnerables que se han vuelto aún más frágiles -como subrayó el Papa Francisco- por un sistema económico dominado por los intereses del capital especulativo mundial y ahora también por la pandemia de Covid-19. Para estas personas – remarcó el delegado pontificio – los sistemas judiciales están llamados a garantizar un trato justo, pero también un apoyo concreto durante los procedimientos. Para combatir eficazmente las grandes organizaciones criminales internacionales que gestionan la trata -subrayó Monseñor Grech en el segundo panel de debate- es más urgente que nunca una mayor coordinación intergubernamental y, por lo tanto, el intercambio de más información y datos entre las fuerzas policiales de los distintos Estados, en particular a través de organismos como la Interpol y la Europol. También es esencial asegurar la independencia efectiva de los sistemas judiciales. No menos importante -añadió- es el apoyo de los medios de comunicación, que pueden promover campañas para concienciar a los políticos y al público. La obtención de justicia para las víctimas no debe ser el único objetivo de los procedimientos judiciales contra los responsables, precisó el representante de la Santa Sede en su tercera intervención. Es necesario garantizar sus derechos humanos antes, durante y después de los juicios, permitiéndoles así dar testimonio contra sus verdugos en condiciones de seguridad, incluso mediante entrevistas pregrabadas o mediante la representación de terceros, para garantizar una reparación adecuada y ofrecer oportunidades para su plena reintegración social. En su discurso conclusivo, Monseñor Grech reiteró las directrices fundamentales de la Santa Sede en la lucha contra la trata. Empezando por el respeto de los derechos humanos y la dignidad de la persona, que – afirmó – no debe servir sólo para limitar los árbitros y los excesos del uso de la fuerza pública en los Estados, sino que «debe servir de criterio guía para perseguir y castigar aquellas acciones que representen el más grave atentado contra la dignidad y la integridad de toda persona humana». En este sentido, la Santa Sede apoya firmemente el compromiso de la Alianza contra la Trata de Seres Humanos de crear un sistema legislativo que se concentre principalmente en las personas y defienda sus derechos inalienables y libertades fundamentales. «Todo sistema debe garantizar que no se violen los derechos de las víctimas y ofrecerles toda la asistencia necesaria, vigilando al mismo tiempo la aplicación de las leyes contra la trata de personas», concluyó el Representante Pontificio. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News23 de julio de 2020

23
Jul

Oración virtual de religiosas para «escuchar el clamor» de los que sufren el COVID

Vaticano.- La Unión Internacional de Superioras Generales (UISG), las religiosas de América Latina (CLAR) y la Conferencia de religiosas de Estados Unidos (LCWR) invitan a rezar virtualmente por los que sufren a causa de la pandemia del coronavirus. La cita tendrá lugar hoy 23 de julio, a las 15:00 hora europea, a través de la aplicación digital ZOOM. En Vatican News hablamos con la Hermana Liliana Franco, actualmente presidenta de la CLAR en Colombia, quien nos cuenta más detalles sobre esta iniciativa: «orar y trabajar con la esperanza de que un mundo nuevo es posible». Una oración virtual para «escuchar el clamor de los que sufren» y rezar por todos los pueblos que padecen las consecuencias del Covid-19: es la iniciativa lanzada por la Unión Internacional de Superioras Generales (UISG), las religiosas de América Latina (CLAR) y la Conferencia de religiosas de Estados Unidos (LCWR). La cita tendrá lugar hoy, 23 de julio, a las 15:00 hora europea a través de la aplicación digital ZOOM en este enlace. Oración virtual transmitida en varios idiomas En Vatican News hablamos con la Hermana Liliana Franco, religiosa de la Compañía de María y actualmente presidenta de la CLAR en Colombia, quien nos cuenta más detalles sobre este evento online que será transmitido con traducción simultánea en inglés, español, italiano y portugués; y que durará aproximadamente hasta las 16:30 ya que contará que rezos, canciones y testimonios concretos de personas que han vivido un compromiso significativo en este tiempo de pandemia, ayudando de manera voluntaria y solidaria a los más necesitados. Rezando por los afectados por la pandemia «Queremos unirnos para rezar por todos aquellos (y con todos aquellos) que están siendo víctimas del Covid-19. Por quienes han sido afectados en su salud y también por los afectados a causa de las brechas sociales que han aumentado a partir de la pandemia», explica la Hermana Liliana Franco. Que esta crisis nos transforme existencialmente «Nos unimos para invitarlos a orar. A orar por los que más sufren, por las víctimas… esperando el fin de esta pandemia y deseando que todo este proceso de crisis que hemos vivido nos transforme existencialmente, ayudándonos a ser mejores seres humanos y a tener unas relaciones más armónicas y comprometidas entre nosotros y con la tierra», añade la religiosa. Finalmente, nuestra entrevistada anima a todos a que se conecten en ZOOM o también en las redes sociales de las entidades católicas organizadoras, para sumarse «a este espacio de encuentro y oración en el que nos sentimos hermanos más allá de cualquier frontera que pueda existir, y en el que todos experimentamos la necesidad de seguir orando y trabajando por un mundo mejor, sin perder la esperanza de que un mundo nuevo será posible». Prensa CEVNota de prensa de Vatican News23 de julio de 2020

22
Jul

CELAM: XLI Curso para Formadores de Seminarios avanza satisfactoriamente

El itinerario del XLI Curso para formadores de seminario avanza satisfactoriamente. Durante la segunda jornada se hicieron presentes 597 estudiantes de América y Europa. La disertación del Padre Sotero Domínguez motivó diferentes inquietudes sobre el manejo que debe hacerse del Curso Introductorio en los seminarios y el rol de la dimensión humana en la formación sacerdotal. Igualmente recordó que la experiencia de Dios requiere de cierta intimidad y es un proceso vital tanto para los formadores como para los jóvenes que inician la reflexión de su situación personal y el llamado a la vida sacerdotal. Un camino en el que es necesario comprender y aplicar ciertos conceptos que resultan imprescindibles a la hora de acompañar el proceso de discernimiento de los jóvenes. Entre ellos la rectitud de intención, la libertad de los aspirantes, la idoneidad espiritual, moral e intelectual, sin prescindir de la salud física y psíquica; que resultan determinantes al momento de optar por la vida consagrada, como proyecto de vida. En este sentido el Padre Sotero Domínguez indicó que la etapa propedéutica es fundamental, porque solo después de garantizar la idoneidad del joven, es posible considerar el avance a la etapa discipular que requerirá de otros esfuerzos desde la formación intelectual, humana, espiritual y pastoral.

22
Jul

América Latina: el drama de los nuevos 29 millones de pobres

Vaticano.- «Ollas comunitarias y trapos rojos en las ventanas», son símbolos de la nueva pobreza en la región, puesta de rodillas por la crisis económica y la emergencia Covid-19 En los últimos cuatro años el número de personas subnutridas en América Latina ha aumentado en nueve millones, y se prevé un aumento sin precedentes para 2030, con lo que el número de nuevos pobres ascenderá a 29 millones. Estas son las cifras que ha dado a conocer Acción contra el Hambre, una organización humanitaria internacional a la vanguardia de la lucha contra el hambre, que advierte de cómo la crisis económica ligada a la emergencia del coronavirus afectará a la seguridad alimentaria de millones de personas en América Latina. La pandemia, según la organización, «ha provocado un aumento del número de niños con malnutrición aguda, ha paralizado las exportaciones y ha aumentado el número de trabajadores informales, que ahora constituyen el 70% de la fuerza de trabajo». Esto es confirmado por Benedetta Letter, gerente geográfica de Acción contra el Hambre en América Latina. La entrevista R. – En América Latina, desde el año pasado, se ha producido un empeoramiento de la situación y la inseguridad alimentaria. De hecho, es la región del mundo, según el último informe de la ONU, que, de 2014 a 2019, ha tenido un mayor aumento del hambre, pasando del 23% a casi el 32%. ¿Qué pasó entonces con la pandemia? En América Latina, desde marzo, casi todos los gobiernos han tomado la decisión de bloqueo y las mismas medidas que tomamos en Italia, generalmente en Europa. La cuestión es que en América Latina el empleo informal está muy extendido, lo que significa que aunque los gobiernos han puesto en marcha medidas para proteger a los trabajadores, hay todo un sector de la población que ha quedado excluido de esta ayuda. Si la gente no puede salir de sus casas para vender en el mercado, para conducir taxis, etc., no tienen comida ese día, por lo que la situación es realmente muy preocupante, especialmente para aquellos sectores de la población que ya eran más vulnerables que otros. Se ha cuantificado el número de personas que pronto podrían formar parte de los pobres de esa región, estamos hablando de 29 millones de ciudadanos, una cifra espantosa… R. – Sí, eso es dramático. Francamente, los países de América Latina se han esforzado realmente en la última década por combatir la pobreza, por luchar contra el hambre, por mejorar toda una serie de indicadores de desarrollo. La situación de fragilidad sistemática que existía anteriormente, sumada a todos los efectos del confinamiento y la pandemia, ha llevado a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe a calcular que habrá 29 millones de nuevos pobres, buena parte de los cuales se encontrarán en situación de extrema pobreza, es decir, personas que no pueden cubrir sus necesidades básicas. Todo esto está relacionado con una situación dramática desde el punto de vista de la salud… R. – La situación sanitaria es muy difícil, se han superado los 3 millones de contagios y los datos siguen empeorando cada día. En América Latina están cerrados desde marzo y siguen teniendo datos terribles. Hay países como Colombia donde se registran 5.000 casos positivos por día, y luego otros como Guatemala, donde la curva de contagio sube y baja porque hay una capacidad muy limitada para hacer las pruebas. Y así, a pesar de los esfuerzos, a pesar de las reglas para limitar los movimientos, hay que decir que un confinamiento tan duro como el que tuvimos aquí en Europa no es factible, por lo que todavía hay muchos contagios. Y no olvidemos la fragilidad del sistema de salud pública. Cuando hablamos de América Latina estamos hablando de realidades diferentes, pero una cosa que todos los países tienen en común es que en las zonas más alejadas de las grandes ciudades, en las zonas rurales, en las zonas indígenas, los servicios son muy escasos, los servicios de salud, pero también, por ejemplo, el servicio de abastecimiento de agua, etc. Hay una lucha en el frente de la salud que se está llevando a cabo, pero es muy complicado. Estamos distribuyendo materiales de protección personal a muchos centros de salud que de otra manera no tendrían ni siquiera mascarillas para trabajar. Habéis indicado dos símbolos para definir la dramática situación de dos países de la zona: las ollas comunitarias en Perú y los trapos rojos en Colombia. ¿Qué nos dicen? R. – Estamos hablando de Lima y Bogotá, dos ciudades como nuestras grandes ciudades italianas, y para nosotros fue muy fuerte tener que ir a distribuir alimentos a la gente que vive, por ejemplo, en Lima, donde las ollas y sartenes de la comunidad se han vuelto a poner en funcionamiento, lo que significa que la gente se organiza para buscar comida y apoyarse entre los vecinos, a nivel de barrio. Estos fueron los mecanismos que el Perú puso en marcha en los años 90, cuando hubo una tremenda crisis económica y una situación política muy compleja. En Colombia es lo mismo, había gente que no podía salir de la casa, pero que no tenía comida, así que empezaron a poner trapos rojos en la ventana o trapos blancos para pedir medicinas, y es muy chocante ver esto en grandes ciudades como Bogotá y Lima. Si en las zonas más aisladas, en las comunidades indígenas, vemos un sistema de salud que simplemente no puede hacer frente a la emergencia sanitaria, es en las grandes ciudades donde vemos el hambre. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News22 de julio de 2020

22
Jul

7 años de la JMJ en Río: recordando a Francisco y su famoso «¡Hagan lío!»

Vaticano.- Fueron muchos los discursos profundos con los que el Papa logró tocar el corazón de la gente durante la JMJ de Río en 2013. Como aquella famosa frase «¡Hagan lío!… ¡Quiero lío en las diócesis, quiero que la Iglesia salga a la calle!», pronunciada en el evento con los jóvenes argentinos en la Catedral de San Sebastián. Siete años después, analizamos el impacto de este primer viaje internacional de su Pontificado, que pasará al recuerdo como el primer encuentro auténtico (de los muchos que vendrían posteriormente) de Francisco con la juventud del mundo. Han pasado siete años desde la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud en Brasil, del 23 al 28 de julio de 2013: la primera presidida por el Papa Francisco, quien fue elegido como Sumo Pontífice el 13 de marzo de ese mismo año. Fue un encuentro internacional que supuso el primer contacto directo del Santo Padre con la juventud del mundo: un acontecimiento global que superó, sin duda, todas las expectativas que tenían los organizadores ya que, según datos oficiales, casi 4 millones de jóvenes participaron en la Misa de Clausura. La JMJ de Brasil en cifras Fe, juventud, alegría y esperanza fueron los ingredientes que marcaron esta semana de convivencia llena de sintonía entre el Sucesor de Pedro y los más de 3,5 millones jóvenes que acudieron a los diversos eventos organizados en las ciudades de Copacabana, Quinta da Boa Vista y el centro de Río de Janeiro. Según reflejan los datos de la organización, la ceremonia de bienvenida del Santo Padre el día 25 reunió a 1,2 millones de personas en Copacabana, mientras que al vía crucis del día 26 asistieron 2 millones de personas. Asimismo, en la vigilia, cerca de 3 millones de jóvenes se dieron cita también en Copacabana, para reflexionar, rezar y alabar a Dios en compañía del Papa. Gran participación de jóvenes de Latino América La ubicación geográfica de Brasil favoreció la presencia masiva de jóvenes procedentes de América Latina aunque también asistieron muchos de Europa. Los países con mayor número de inscritos fueron Brasil, Argentina, Estados Unidos, Chile, Italia, Venezuela, Francia, Paraguay, Perú y México. Del total de inscritos internacionales un 86,9% nunca había participado en una JMJ: un dato que no deja indiferente ya que esta JMJ fue testigo de muchos casos de conversión espiritual, acercamiento a la fe y testimonios de superación. Cabe destacar el gran interés que despertó esta Jornada a nivel internacional: para muchos medios de comunicación, se trataba de la primera gran oportunidad de ver «en acción» al por aquel entonces, recién elegido, Papa Francisco. Siete años del famoso «¡Hagan lío!» del Papa  Fueron muchos los discursos profundos en los que el Santo Padre logró tocar el corazón de la gente a través de sus palabras: claras, concisas y alentadoras. Uno de los más populares fue aquel mensaje pronunciado por Francisco durante su encuentro con los jóvenes argentinos en la Catedral de San Sebastián, el jueves 25 de julio de 2013. Así hablaba el Papa con un tono de voz emocionado en medio del aplauso de una juventud entusiasta: “¿Qué es lo que espero como consecuencia de la Jornada de la Juventud? Espero lío. Que acá dentro va a haber lío… va a haber, que acá en Río va a haber lío… va a haber, pero quiero lío en las diócesis, quiero que se salga afuera, quiero que la Iglesia salga a la calle, quiero que nos defendamos de todo lo que sea mundanidad, de lo que sea instalación, de lo que sea comodidad, de lo que sea clericalismo, de lo que sea estar encerrados en nosotros mismos, las parroquias, los colegios, las instituciones son para salir, si no salen se convierten en una ONG ¡y la Iglesia no puede ser una ONG!” «Hagan lío; cuiden los extremos del pueblo, que son los ancianos y los jóvenes; no se dejen excluir, y que no excluyan a los ancianos», añadió haciendo referencia a «un lío» que proviene del corazón de Jesús…de un corazón cristiano que busca la fuerza para lograr grandes cambios en beneficio de la construcción del «Reino de Dios» en este mundo. Importancia de las Redes Sociales Por otra parte, la JMJ de Río se convirtió en un escenario de despliegue multimedia, puesto que periodistas de todo el mundo dieron cobertura informativa a los encuentros del Papa con los jóvenes, con un interés especial, teniendo en cuenta de que se trataba del primer evento de esta magnitud al que acudía Francisco. Las Redes Sociales también desempeñaron un papel fundamental a la hora de difundir los mensajes del Pontífice: se registraron cientos de miles de descargas en la página web oficial y millones de personas siguieron las transmisiones en Facebook, Twitter y YouTube. Imágenes, videos, post y tweets dieron la vuelta al mundo tratando de captar los mejores momentos, gestos y anécdotas de una Jornada Mundial que pasará al recuerdo como el primer encuentro auténtico, de los muchos que vendrían posteriormente, de Francisco con la juventud del mundo. Las palabras de Francisco se renuevan en esta pandemia En plena emergencia sanitaria por la pandemia del coronavirus, que ha costado la vida de cientos de miles de personas, sacudiendo los sistemas económicos a nivel global; cuesta mucho imaginar en qué condiciones se podrá llevar a cabo un proyecto como la JMJ. Mientras que Europa pone ya el ojo en el período de la post pandemia, muchos países de América Latina todavía no han alcanzado su pico de contagiados. Son tiempos nuevos, por tanto, para la humanidad que tendrá que enfrentar nuevos desafíos y lograr implantar grandes cambios, para evitar así, que todos los esfuerzos realizados hasta ahora hayan sido en vano. Es por ello que las palabras del Papa a los jóvenes en Río se renuevan y cobran actualmente un valor especial:  “Yo pienso que, en este momento, esta civilización mundial se pasó de rosca, se pasó de rosca, porque es tal el culto que ha hecho al dios dinero, que estamos presenciando una

22
Jul

Pontificia Academia para la Vida sobre el COVID-19: Necesaria la ética del riesgo, la cooperación internacional y solidaridad

Vaticano.- “Humana communitas en la era de la pandemia: consideraciones intempestivas sobre el renacimiento de la vida”. Es el nuevo documento de la Pontificia Academia para la Vida (Pav) sobre las consecuencias de la crisis sanitaria causada por el coronavirus. Desarrollar una ética del riesgo, poner en práctica la cooperación internacional y promover una solidaridad responsable: estos son los principios clave que figuran en el documento de la Pav -el segundo después del del 30 de marzo pasado titulado «Pandemia y hermandad universal»- dedicado a la emergencia mundial a raíz del virus Covid-19. El texto comienza con una pregunta: de la pandemia “¿Qué lecciones hemos aprendido? Más aún, ¿qué conversión de pensamiento y acción estamos dispuestos a experimentar en nuestra responsabilidad común por la familia humana?” A la primera pregunta, la Pav responde con «la lección de la fragilidad» que toca a todos, pero sobre todo a los hospitalizados, a los prisioneros, a “los abandonados destinados al olvido en los campos de refugiados del infierno”. Pero al mismo tiempo, otra lección ha resultado de esta enseñanza: la conciencia de que la vida es un regalo. Y más aún: la pandemia nos ha hecho comprender que todo está conectado y que “la depredación de la tierra”, las opciones económicas basadas en la avaricia y los consumos excesivos, “la prevaricación y el desprecio” de la creación también han tenido consecuencias en la propagación del virus. El virus no conoce fronteras, unir fuerzas para encontrar la vacuna También debe prestarse más atención -reitera la Academia- a “la interdependencia humana y a la vulnerabilidad común”, porque mientras los países “han sellado sus fronteras”, algunos incluso practicando “un cínico juego de culpas recíprocas”, el virus “no reconoce fronteras”. De ahí el llamamiento a “una sinergia de esfuerzos” para intercambiar información, prestar ayuda y asignar recursos. Hay que hacer un esfuerzo especial en el desarrollo de remedios y vacunas: en este ámbito, de hecho, “la falta de coordinación y cooperación se reconoce cada vez más como un obstáculo para abordar el Covid-19”. Mientras tanto -continúa Pav- la pandemia ha ampliado aún más la brecha entre los países ricos y pobres que han pagado “el precio más alto” porque ya carecen de recursos básicos y a menudo están plagados de otras enfermedades letales, como la malaria y la tuberculosis. La atención de la salud es un derecho humano universal ¿Qué hacer, entonces? En primer lugar, el documento recuerda la importancia de la “ética del riesgo”, que comporta responsabilidades específicas hacia las personas cuya salud, vida y dignidad corren mayores riesgos. De hecho, “centrarse en la génesis natural de la pandemia, sin tener en cuenta las desigualdades económicas, sociales y políticas entre los países del mundo, – explica la nota – es no entender las condiciones que hacen que su propagación sea más rápida y difícil de abordar”. En segundo lugar, la PAV pide «esfuerzos mundiales y cooperación internacional» para que sea reconocido como un “derecho humano universal”, “el acceso a una atención de salud de calidad y a los medicamentos esenciales”. La investigación científica sea responsable, libre y justa Al mismo tiempo, se espera en una “investigación científica responsable”, es decir, íntegra, libre de conflictos de intereses y basada en reglas de igualdad, libertad y equidad. “El bien de la sociedad y las exigencias del bien común en el ámbito de la atención de la salud se anteponen a cualquier preocupación por el lucro”, señala la Academia. Esto porque “las dimensiones públicas de la investigación no pueden ser sacrificadas en el altar del beneficio privado”. De ahí también el énfasis en la importancia de la Organización Mundial de la Salud, para apoyar, sobre todo, “las necesidades y preocupaciones de los países menos adelantados que se enfrentan a una catástrofe sin precedentes”. Hacer la propia parte para un futuro mejor Por último, la Pontificia Academia para la Vida para la vida anhela la promoción de una solidaridad responsable, que sepa reconocer la igual dignidad de todas las personas, especialmente de las que están en situaciones de necesidad. “Todos estamos llamados a hacer nuestra parte”, subraya el documento, y por eso se necesitan estrategias políticas correctas y transparentes y procesos democráticos íntegros. “Una comunidad responsable es aquella en la que las cargas de la cautela y el apoyo recíproco se comparten” con miras al bienestar de todos. La nota concluye invitando a una “actitud de esperanza” que va más allá de la resignación y la nostalgia del pasado: “Es hora – dice la Academia – de imaginar y poner en práctica un proyecto de convivencia humana que permita un futuro mejor para todos y cada uno”. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News22 de julio de 2020

21
Jul

Primera Asamblea Mundial por la Amazonia

Vaticano.- Bajo el lema “contra el etnocidio, el ecocidio y el extractivismo que se agravan con la pandemia”, el pasado 18 y 19 de julio se realizó de modo virtual la primera Asamblea mundial autoconvocada por la Amazonia. La crisis sanitaria golpea de modo especial a los pueblos que habitan en la región Panamazónica. Según los datos de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM), hasta el pasado 17 de julio, se contabilizaron 609.121 casos confirmados de COVID-19 y 17.869 muertos en la región. Según Mauricio López, secretario ejecutivo de la REPAM, “estamos frente a una situación sin precedentes, esta pandemia nos ha puesto en una situación de vulnerabilidad que nunca antes habíamos vivido, pero sobretodo revela y desnuda todas las realidades de exclusión, desigualdad e injusticia que hemos estado viviendo, sobre todo en los pueblos originarios y comunidades de la amazonia”. Asamblea Mundial por la Amazonía Frente a esta crisis sanitaria, movimientos, redes, activistas y organizaciones de pueblos indígenas, quilombolas, ribereños, siringueros (caucheros), caboclos, campesinos, artistas, religiosos, defensores de la naturaleza, comunicadores, académicos, mujeres, jóvenes y pobladores de las ciudades amazónicas, se han autoconvocado para realizar la Primera Asamblea Mundial por la Amazonía que tuvo lugar de manera virtual el pasado 18 y 19 de Julio. Se ha suscripto a esta iniciativa la REPAM, a través de su secretario ejecutivo, invitando a sus miembros a participar. Reflexión y acción Durante el primer día de la Asamblea, se ha reflexionado y debatido sobre la problemática de los países y la región panamazónica, mientras que el segundo día se discutieron propuestas para acción concretas. En esta línea, se han acordado llevar adelante diferentes iniciativas, por ejemplo una campaña mundial para hacer frente a los graves impactos del COVID-19 sobre poblaciones indígenas, afrodescendientes y de toda la Amazonía. Declaración final Al cierre de la Asamblea se publicó una declaración final donde se hizo hincapié que “es hora de unirnos en la diversidad de saberes de los pueblos de Abya Yala y del mundo, y en las culturas del cuidado, para retornar el espíritu de la selva a la humanidad”. Para más información: https://asambleamundialamazonia.org/ Prensa CEVNota de prensa de Vatican News21 de julio de 2020