Categoría: Eclesial Internacional

27
Ago

El Papa: Que se ponga fin al conflicto en Tierra Santa, tanto terror y muerte

Vaticano. Este miércoles, 27 de agosto, al final de la Audiencia General, el Santo Padre ha renovado su llamamiento por la paz, especialmente ha pedido que se ponga fin al conflicto en Gaza. Ha invocado que se liberen a los rehenes, se alcance un alto el fuego permanente, se facilite el acceso seguro a la ayuda humanitaria. Asimismo, el Pontífice se sumó a la Declaración Conjunta de los Patriarcas Griego Ortodoxo y Latino de Jerusalén, que ayer pidieron el fin de esta espiral de violencia. “Hoy, renuevo un enérgico llamamiento a ambas partes implicadas y a la comunidad internacional para que pongan fin al conflicto en Tierra Santa, que ha causado tanto terror, destrucción y muerte”, este fue el llamamiento que realizó el Papa León XIV este miércoles, 27 de agosto, al final de la Audiencia General, en el Aula Pablo VI del Vaticano. Proteger a los civiles y garantizar la ayuda humanitaria Antes de sus saludos a los peregrinos de lengua italiana y tras haber recordado que, “el viernes pasado, hemos acompañado con la oración y con el ayuno a nuestros hermanos y hermanas que sufren a causa de la guerra”, el Santo Padre pidió la liberación de los rehenes israelís y que se garantice el acceso a la ayuda humanitaria. “Suplico que sean liberados todos los rehenes, se alcance un alto el fuego permanente, se facilite el acceso seguro a la ayuda humanitaria y el pleno respeto del derecho humanitario, en particular la obligación de proteger a los civiles y la prohibición de los castigos colectivos, el uso indiscriminado de la fuerza y ​​el desplazamiento forzado de poblaciones”. Que se ponga fin a esta espiral de violencia Antes de invocar la protección materna de la Virgen María, Reina de la Paz, el Papa León XIV se sumó “a la Declaración Conjunta de los Patriarcas Griego Ortodoxo y Latino de Jerusalén, que ayer pidieron el fin de esta espiral de violencia, el fin de la guerra y dar la prioridad al bien común de las personas”. “Invoquemos a María, Reina de la Paz, fuente de consuelo y esperanza. Que su intercesión obtenga la reconciliación y la paz en esa tierra tan querida por todos”. 27 de agosto de 2025Fuente: Vatican NewsCEV Medios

25
Ago

León XIV: Superar el materialismo y promover el florecimiento humano integral

Vaticano. Ante la reducción del florecimiento humano a la acumulación material y al individualismo, el Papa León XIV afirmó a los miembros de la Red Internacional de Legisladores Católicos que la Iglesia propone la plena realización de la persona en todas sus dimensiones, recordando a los legisladores su misión de construir un orden social guiado por la conciencia, la dignidad humana y una “política y economía de la esperanza” sostenidas en la gracia de Cristo. La primera audiencia del Papa León XIV de este sábado 23 de agosto fue con los participantes en la decimosexta reunión anual de la Red Internacional de Legisladores Católicos, con el lema: “El Nuevo Orden Mundial: la política de las grandes potencias, los dominios corporativos y el futuro del florecimiento humano.” El Pontífice les instó a convertirse en constructores de puentes entre la llamada Ciudad del Hombre y la Ciudad de Dios, retomando la enseñanza de San Agustín de Hipona como guía frente a los retos actuales. Dos ciudades como clave de lectura del presente El Santo Padre recordó la visión de San Agustín en La Ciudad de Dios, donde se describen dos orientaciones de la vida humana: la Ciudad del Hombre, fundamentada en el orgullo y el amor propio, marcada por la ambición de poder, prestigio y placer; y la Ciudad de Dios, basada en el amor a Dios y al prójimo, caracterizada por la justicia, la caridad y la humildad. El Papa subrayó que esta enseñanza sigue siendo actual en un mundo que atraviesa cambios de poder, nuevas alianzas geopolíticas, el peso de las corporaciones globales, avances tecnológicos y múltiples conflictos violentos. Frente a este panorama, aseguró que la tarea de los creyentes, y en particular de los legisladores católicos, consiste en impregnar la vida pública de los valores del Reino de Dios para abrir caminos de esperanza y verdadero florecimiento humano. Qué significa florecer auténticamente En su reflexión, León XIV advirtió sobre la confusión contemporánea que identifica el florecimiento humano con riqueza material o autonomía individual absoluta. Señaló que este modelo, ligado al consumo y la comodidad tecnológica, deja vacíos existenciales visibles en sociedades prósperas, donde abundan la soledad y la falta de sentido. Frente a ello, León XIV defendió la visión cristiana del desarrollo humano integral, que abarca todas las dimensiones de la persona: física, social, cultural, moral y espiritual. Este florecimiento, dijo, se realiza cuando las personas viven virtuosamente en comunidades sanas, con libertad para buscar la verdad, adorar a Dios y formar familias en paz, al tiempo que respetan la creación y promueven la solidaridad entre pueblos y clases sociales. Una política y economía de la esperanza El Papa destacó que el futuro dependerá de la elección entre organizar la sociedad en torno al amor propio o en torno al amor a Dios y al prójimo. Invitó a los legisladores a trabajar por un orden donde “el poder sea domado por la conciencia y la ley esté al servicio de la dignidad humana”. Asimismo, pidió rechazar la mentalidad pesimista que asegura que nada puede cambiar. Tras recordar que su predecesor había llamado a una “diplomacia de la esperanza”, añadió que hoy se necesitan también una “política de la esperanza” y una “economía de la esperanza”, confiadas en la acción transformadora de la gracia de Cristo. 25 de agosto de 2025Fuente: Vatican NewsCEV Medios

25
Ago

Cardenal Parolin: consternados ante lo que está sucediendo en Gaza

Vaticano. En Nápoles, para el inicio de la 75ª Semana Litúrgica Nacional, respondiendo a las preguntas de los periodistas sobre el bombardeo israelí de hoy en la Franja de Gaza, el cardenal Pietro Parolin dijo que «es un sin sentido», dando la voz de alarma sobre la situación humanitaria. Y sobre Ucrania, dijo que es necesario «seguir trabajando por la paz y la reconciliación» y que hace falta «mucha política». «Seguimos asombrados ante lo que está sucediendo en Gaza, y a pesar de la condena del mundo entero», porque «hay un coro por parte de todos en la condena de lo que está sucediendo». Lo dijo el cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, en Nápoles (Italia) con motivo de la 75ª Semana Litúrgica Nacional, respondiendo, al margen de la ceremonia de apertura, a las preguntas de los periodistas sobre el bombardeo israelí, en la Franja, sobre el hospital Nasser de Khan Younis que dejó 20 muertos, entre ellos cinco periodistas. «Es un sin sentido», añadió el cardenal, señalando que parece que «no hay visos de solución» y «que la situación es cada vez más complicada y desde el punto de vista humanitario cada vez más precaria, con todas las consecuencias que estamos viendo constantemente.» En cuanto al tema de Ucrania, para el cardenal Secretario de Estado hace falta «mucha política, porque hay tantas soluciones a nivel teórico» y «hay tantos caminos que se pueden tomar para llegar a la paz» pero «hay que querer ponerlos en práctica» y «evidentemente hacen falta también disposiciones del espíritu». «Hay necesidad de esperanza para el mundo entero», dijo también Parolin, subrayando que el Jubileo convocado por el Papa Francisco, dedicado precisamente a este tema, «querría ser un momento de recuperación de la esperanza». «Una esperanza contra toda esperanza», señaló el cardenal, debido a que «hoy» no hay «muchos elementos que nos ayuden a esperar sobre todo a nivel internacional», como se ve «incluso en estos días» por la «dificultad de iniciar caminos de paz en situaciones de conflicto», pero «es necesario no resignarse» y «seguir trabajando por la paz y la reconciliación» 25 de agosto de 2025Fuente: Vatican NewsCEV Medios

25
Ago

León XIV a los monaguillos: «La celebración de la misa salva al mundo hoy»

Vaticano. En un mensaje dirigido a un grupo de jóvenes franceses en peregrinación a Roma, León XIV reitera la importancia de la Eucaristía como lugar de encuentro con el amor de Cristo, que se entrega «sin pedir nada a cambio». La falta de sacerdotes es una «desgracia» para la Iglesia. Espero que «estén atentos a la llamada que Jesús podría hacerles para seguirlo más de cerca en el sacerdocio» y «que puedan, poco a poco, domingo tras domingo, descubrir la belleza, la felicidad y la necesidad de una vocación así». León XIV dirige este aliento a las «conciencias de jóvenes, entusiastas y generosos» monaguillos franceses en peregrinación a Roma, con los que se reunió esta mañana, 25 de agosto, en la Sala Clementina del Palacio Apostólico. Durante su discurso, en el que destacó la importancia de la Eucaristía como lugar de encuentro con el amor de Cristo, insistió en la «vida tan maravillosa del sacerdote» que, «en el centro de cada uno de sus días, a través de la misa, encuentra a Jesús de una manera tan excepcional y lo dona al mundo». Les diré algo que deben escuchar, aunque pueda inquietarlos un poco: ¡la falta de sacerdotes en Francia, en el mundo, es una gran desgracia! ¡Una desgracia para la Iglesia! Solo Jesús nos salva Ante un mundo que «va mal, que debe afrontar retos cada vez más graves e inquietantes» como el sufrimiento, la enfermedad, la discapacidad, el fracaso o incluso la pérdida de un ser querido, el Pontífice reconoce que pueden surgir preguntas: «¿Quién vendrá en nuestro auxilio? ¿Quién tendrá piedad de nosotros? ¿Quién vendrá a salvarnos? … no solo de nuestros sufrimientos, de nuestras limitaciones y de nuestros errores, sino también de la muerte misma?». Pero para él la respuesta es «perfectamente clara y resuena en la Historia desde hace 2000 años: solo Jesús viene a salvarnos, nadie más: porque solo Él tiene el poder de hacerlo —Él es Dios Todopoderoso en persona— y porque nos ama». «Él dio su vida por nosotros, ofreciéndola en la cruz. De hecho, no hay mayor amor que dar la vida por quienes amamos», continúa el Papa, definiendo la muerte y resurrección de Cristo como «lo más maravilloso de nuestra fe católica» y «el acontecimiento más importante de la historia del mundo». «Dios, el creador del cielo y de la tierra, quiso sufrir y morir por nosotros, sus criaturas. ¡Dios nos amó hasta morir! Para hacerlo, descendió del cielo, se humilló a sí mismo y se hizo semejante a los hombres», afirma el Pontífice. ¿Qué podemos temer de un Dios que nos ha amado hasta tal punto? ¿Qué más podríamos esperar? ¿Qué esperamos para corresponderle como se merece? Gloriosamente resucitado, Jesús está vivo junto al Padre, ahora cuida de nosotros y nos comunica su vida eterna. La Eucaristía salva al mundo hoy León XIV destaca además que el lugar donde se puede experimentar este amor de Cristo es la Eucaristía, «tesoro de la Iglesia, tesoro de tesoros». «Domingo tras domingo» y «generación tras generación», la Iglesia custodia «con cuidado la memoria de la muerte y resurrección del Señor», explica el Papa. «¡La celebración de la misa nos salva hoy! ¡Salva al mundo hoy!», reitera, precisamente porque en ella, «entre las manos del sacerdote y con sus palabras «esto es mi Cuerpo, esto es mi Sangre», Jesús sigue entregando su vida en el altar, sigue derramando su sangre por nosotros hoy». Es el acontecimiento más importante de la vida del cristiano y de la vida de la Iglesia, porque es el encuentro en el que Dios se entrega a nosotros por amor, una y otra vez. El cristiano no va a misa por obligación, sino porque lo necesita absolutamente; ¡necesita la vida de Dios que se entrega sin pedir nada a cambio! Pongan a Jesús en el centro de su vida Citando un versículo de San Pedro tomado de los Hechos de los Apóstoles que dice que «no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres por el cual podamos ser salvados», el Pontífice anima a los monaguillos a no olvidar «jamás estas palabras». «Imprímanlas en si corazón y pongan a Jesús en el centro de su vida», reitera. Y los invita a regresar a Francia «más decididos que nunca a amarlo y seguirlo, y así mejor armados de esperanza», en los momentos difíciles de duda, desánimo y tormenta, como un ancla segura, lanzada hacia el cielo, que les permitirá continuar el camino. De hecho, León XIV agradece a los monaguillos por su servicio, los anima a perseverar y los invita a tener siempre presente «la grandeza y la santidad de lo que se celebra». En efecto, ¿cómo no sentir alegría en el corazón en presencia de Jesús? Pero la misa es, al mismo tiempo, un momento serio, solemne, impregnado de gravedad. Que su actitud, su silencio, la dignidad de su servicio, la belleza litúrgica, el orden y la majestuosidad de los gestos introduzcan a los fieles en la grandeza sagrada del Misterio. Jesús quiere ser su mejor amigo De hecho, el Papa exhorta a los monaguillos a no perder la oportunidad «de hablar con Jesús en lo más profundo de su corazón y amarlo cada vez más» mientras están en Roma durante el Año Santo. «Él nos ayuda a «convertirnos», es decir, a volvernos hacia Él, a crecer en la fe y en su amor, para convertirnos en mejores discípulos», explica. El único deseo de Cristo, añade, «es formar parte de su vida para iluminarla desde dentro, convertirse en su mejor amigo, el más fiel. La vida se vuelve bella y feliz con Jesús». Sin embargo, explica el Pontífice, Cristo «espera su respuesta», llama «a la puerta y espera para entrar». Estar «cerca» de Jesús, Él, el Hijo de Dios, ¡entrar en su amistad! ¡Qué destino inesperado! ¡Qué felicidad! ¡Qué consuelo! ¡Qué esperanza para el futuro! 25 de agosto de 2025Fuente: Vatican NewsCEV Medios

25
Ago

Papa León XIV: La “puerta estrecha” del Evangelio. Fe auténtica y vida transformada

Vaticano. El Papa León XIV, en el rezo del Ángelus de este domingo, reflexionó sobre el pasaje evangélico de la “puerta estrecha” (Lc 13,22-30) y advirtió que la salvación no se alcanza con la simple práctica religiosa, sino con una fe auténtica que transforme la vida en amor, justicia y compromiso concreto por los demás. En el Ángelus de este domingo, el Papa León XIV invitó a los fieles a reflexionar sobre un pasaje del Evangelio de san Lucas (13,22-30), en el que Jesús habla de la “puerta estrecha”. La enseñanza del Señor surge como respuesta a la pregunta de si son pocos los que se salvan. “A primera vista, esta imagen hace surgir en nosotros algunas preguntas: Si Dios es el Padre del amor y de la misericordia, que siempre permanece con los brazos abiertos para acogernos, ¿por qué Jesús dice que la puerta de la salvación es estrecha?” La transformación del corazón: gestos concretos  El Pontífice explicó que esta imagen no busca desanimar, sino sacudir la falsa seguridad de quienes creen que basta con cumplir la práctica religiosa para garantizarse la salvación. Jesús advierte que no alcanza con participar en la Eucaristía o conocer bien la doctrina si la fe no transforma el corazón y no se expresa en gestos concretos de amor y justicia. “El Señor no … acepta sacrificios y oraciones que no nos conducen a vivir el amor a los hermanos y a practicar la justicia. Por eso, cuando estos se presenten ante el Señor enorgulleciéndose de haber comido y bebido con Él y de haber escuchado sus enseñanzas, oirán que les dice: «No sé de dónde son ustedes; ¡apártense de mí todos los que hacen el mal!» (v. 27).” Fe auténtica: arriesgarse por amor como hizo Jesús El Papa subrayó que Cristo mismo es la puerta que conduce a la vida eterna, y que atravesarla significa asumir su camino de entrega y cruz. Él no eligió el éxito ni el poder, sino que nos amó hasta dar la vida por nosotros, recordó. Por ello, la fe auténtica es aquella que se convierte en criterio de vida diaria, capaz de inspirar decisiones difíciles, de vencer el egoísmo y de sostener el compromiso por el bien común, la paz y la justicia. “… perseverar en el bien allí donde parecen prevalecer las lógicas del mal, y así sucesivamente. Pero, franqueando este umbral, descubriremos que la vida se abre de par en par ante nosotros como un mundo nuevo, y, desde ese momento, entraremos en el amplio corazón de Dios y en la alegría de la fiesta eterna que Él ha preparado para nosotros.” Finalmente, el Pontífice encomendó a la Virgen María la misión de los cristianos, pidiendo que Ella ayude a recorrer con valentía el camino del Evangelio para abrirse plenamente al amor infinito del Padre. 25 de agosto de 2025Fuente: Vatican NewsCEV Medios

22
Ago

Obispos amazónicos reafirman misión pastoral y compromiso con ecología integral en encuentro continental

Más de 90 obispos, sacerdotes, religiosas y laicos de 76 jurisdicciones eclesiásticas y comunidades religiosas que conforman la Panamazonía en la región concluyeron este miércoles 20 de agosto su encuentro en la sede del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam), en Bogotá, con un mensaje final lleno de esperanza, memoria agradecida y llamados a profundizar en una Iglesia con rostro amazónico. En el pronunciamiento, los prelados expresaron su gratitud por los frutos que ha dejado el Sínodo para la Amazonía, así como por el acompañamiento del Papa León XIV, quien los animó a continuar en la misión evangelizadora, la defensa de los pueblos y el cuidado de la Casa Común. Una Iglesia en camino sinodal Los obispos reconocieron los pasos dados en la articulación pastoral, la formación de agentes y la conciencia creciente en torno a la ecología integral y la defensa del territorio. Destacaron el testimonio de comunidades que, incluso arriesgando su vida, resisten a las amenazas contra sus tierras y sostienen la esperanza de los pueblos originarios. Pese a todo ello, hicieron notar sobre las resistencias internas que aún se ven, como el temor a los cambios, la permanencia de actitudes clericalistas y la falta de audacia para llegar a las periferias. En ese sentido, hicieron un llamado a superar estas ataduras y a vivir a profundidad el espíritu profético que debe caracterizar a la Iglesia. Compromiso con los pueblos y la tierra En el mensaje los obispos son enfáticos en afirmar que la Amazonía no es un “territorio de sacrificio”, sino un espacio habitado y amado por generaciones, donde Dios se manifiesta en la vida de los pueblos y sus culturas. En este sentido, los obispos manifestaron su compromiso con todo el tema de la ecología integral y el cuidado de la creación, señalando con urgencia que la crisis climática exige respuestas concretas y solidarias. Los prelados insisten en la urgencia de caminar de la mano con las comunidades, compartiendo sus alegrías y sufrimientos, aprendiendo de su fe sencilla y reconociendo la riqueza de sus espiritualidades. “No estamos por encima ni aparte, sino al lado”, señalaron, insistiendo en ser una Iglesia que acompaña y se deja acompañar. CEAMA, signo de esperanza Al hacer un balance del encuentro, los pastores ratificaron que la Conferencia Eclesial de la Amazonía (Ceama) ha ido creciendo en su acción pastoral, consolidándose como un espacio de comunión, discernimiento y misión. Por lo anterior, expresaron su deseo de fortalecer esta instancia eclesial con acciones concretas como son: potenciar la formación de seminaristas, religiosos y agentes pastorales, y buscar modelos de sostenibilidad económica que permitan una pastoral más sólida y cercana. Al concluir su mensaje, los obispos expresaron su gratitud al Celam por la acogida en estos días de encuentro y confiaron sus compromisos a la intercesión de María, Madre de la Amazonía, pidiendo su protección para continuar caminando como Iglesia sinodal y esperanzada. 22 de agosto de 2025Fuente: CELAMCEV Medios

22
Ago

El Papa: La idolatría del beneficio compromete la paz

Vaticano. «Ya no podemos permitirnos resistirnos al Reino de Dios, que es un Reino de paz». Y donde los responsables de los Estados y de las instituciones internacionales «parecen no lograr que prevalezcan el derecho, la mediación y el diálogo, las comunidades religiosas y la sociedad civil deben osar la profecía». Lo escribe el Papa León XIV al obispo de Rímini, Nicolò Anselmi, en el mensaje para el 46º Meeting por la Amistad entre los pueblos, firmado por el Secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin. Una profecía que pide abandonar «la idolatría del beneficio» que ha comprometido la justicia y la paz, para «servir al Dios vivo» y traducir el Evangelio «en formas de desarrollo alternativas a las vías de crecimiento sin equidad ni sostenibilidad». Así, «el desierto se convierte en un jardín» y la «ciudad de Dios», anunciada por San Agustín, «transfigura nuestros lugares desolados». El tema: «En los lugares desiertos construiremos con ladrillos nuevos» El mensaje se inspira en el tema del Meeting 2025, que se celebra del 22 al 27 de agosto en la Feria de Rímini, cita veraniega promovida por el movimiento Comunión y Liberación, «En los lugares desiertos construiremos con ladrillos nuevos», que, subraya, es una invitación a la esperanza «que no defrauda». En el desierto, ante todo, nace el pueblo de Dios, que solo en su camino entre sus asperezas «madura la elección de la libertad». Y el Dios bíblico «lo hace florecer como un jardín de esperanza». Los monjes y monjas habitan el desierto «en nombre de todos nosotros», junto al «Señor del silencio y de la vida». El Papa aprecia que una de las exposiciones del Encuentro esté dedicada al testimonio de los mártires de Argelia, en los que «resplandece la vocación de la Iglesia a habitar el desierto en profunda comunión con toda la humanidad, superando los muros de desconfianza que enfrentan a las religiones y culturas», imitando íntegramente «el movimiento de encarnación y donación del Hijo de Dios». Los numerosos diálogos del Meeting Según se lee en el mensaje, los «ladrillos nuevos» con los que construir «ese futuro que Dios ya tiene reservado para todos, pero que solo se abre cuando nos acogemos unos a otros» serán los «diálogos entre católicos de diferentes sensibilidades y con creyentes de otras confesiones y no creyentes». Para «osar la profecía», las comunidades religiosas y la sociedad civil deben «dejarse empujar al desierto» y ver qué puede surgir «de tanto, demasiado dolor inocente». Para los católicos italianos, se trata de «caminos de educación a la no violencia, iniciativas de mediación en los conflictos locales, proyectos de acogida que transformen el miedo al otro en oportunidad de encuentro», que León XIV recomendó a los obispos italianos promover, en la audiencia del 17 de junio. Para hacer de cada comunidad una «casa de paz», «donde se aprende a desactivar la hostilidad a través del diálogo, donde se practica la justicia y se custodia el perdón». Para los ladrillos nuevos se necesitan «las víctimas de la historia» El Pontífice, por lo tanto, anima a «dar nombre y forma a lo nuevo, para que la fe, la esperanza y la caridad se traduzcan en una gran conversión cultural». Y en el mensaje se cita al «querido Papa Francisco» y la «opción por los pobres» como categoría teológica de la Exhortación apostólica Evangelii Gaudium. Dios, de hecho, «ha elegido a los humildes», «a los que no tienen poder», y «se ha hecho uno de ellos, para escribir su historia en nuestra historia». También recuerda la encíclica Fratelli tutti y la petición de incluir a quienes «tienen otro punto de vista, ven aspectos de la realidad que no se reconocen en los centros de poder donde se toman las decisiones más determinantes». Y para tener ladrillos nuevos, se necesitan «las víctimas de la historia», los «hambrientos y sedientos de justicia», los «operadores de paz, las viudas y los huérfanos, los jóvenes y los ancianos, los migrantes y los refugiados, el clamor de toda la creación». Porque, según se lee en el mensaje, «negar las voces de los demás y renunciar a comprenderse son experiencias fallidas y deshumanizantes» y a ellas «hay que oponer la paciencia del encuentro con un Misterio siempre otro, del que es signo la diferencia de cada uno». El cristiano no puede tolerar la desertificación del mundo Por lo tanto, la presencia de los cristianos en las sociedades contemporáneas, «desarmada y desarmante», debe traducir el Evangelio del Reino «en formas de desarrollo alternativas a las vías de crecimiento sin equidad ni sostenibilidad». Para servir al Dios vivo, subraya el papa León XIV, hay que abandonar «la idolatría del beneficio que ha comprometido gravemente la justicia, la libertad de encuentro y de intercambio, la participación de todos en el bien común y, finalmente, la paz». No sigue a Cristo, añade, «una fe que se aleja de la desertificación del mundo o que, indirectamente, contribuye a tolerarla». Por lo tanto, también hay que vivir con creatividad la revolución digital, que «corre el riesgo de acentuar las discriminaciones y los conflictos». Solo así la agustiniana «ciudad de Dios» transfigura «nuestros lugares desolados». La Virgen María, «Estrella de la mañana», es la oración final del Papa, que sostiene el compromiso de todos los participantes «en comunión con los pastores y las comunidades eclesiales en las que están integrados». Estos deben actuar en armoniosa sintonía «con todos los demás miembros del Cuerpo de Cristo», obedeciendo así al Espíritu Santo, como pidió León XIV en la homilía de la Vigilia de Pentecostés con los Movimientos, Asociaciones y Nuevas Comunidades, el 7 de junio de 2025. 22 de agosto de 2025Fuente: Vatican NewsCEV Medios

22
Ago

El cardenal Pizzaballa: «También en Tierra Santa los corazones pueden cambiar»

Vaticano. Agradecimiento por la constante atención del Papa y esperanza de que el corazón de los hombres pueda cambiar. El patriarca de Jerusalén de los Latinos, el cardenal Pierbattista Pizzaballa, expresa estos sentimientos en vísperas del día de ayuno y oración convocado por León XIV para el 22 de agosto, día en que se celebra la memoria de la Bienaventurada Virgen María Reina. Una invitación dirigida por el Pontífice a los fieles al final de la audiencia general del 20 de agosto, para que se suplique al Señor que «conceda paz y justicia» a quienes sufren a causa de los conflictos armados, con la mirada puesta en Tierra Santa y Ucrania. Rezar, ayunar y mirar a Dios «Estamos agradecidos por esta atención al tema de la paz, sobre el que el Papa ha vuelto muy a menudo, casi siempre —son las palabras del cardenal a los medios de comunicación vaticanos— es un tema muy delicado, muy sentido para nosotros. No es la primera vez que nos comprometemos a realizar jornadas de oración y ayuno, también se han hecho en el pasado y es lo único que podemos hacer en este momento: rezar y ayunar, para mantener la atención puesta en Dios, es lo único que podemos hacer en este momento para que cambie el corazón de los hombres». La oración no es una fórmula mágica Sin embargo, según Pizzaballa, no hay que confiar en la oración como si fuera «una fórmula mágica que resuelve los problemas». La oración sirve para cambiar los corazones, el acercarse a la oración de otra manera acabaría creando «solo frustración». La oración, según indica el patriarca, sirve para abrir los corazones en un contexto de odio y rechazo del otro, como el que se ha creado en este momento por la guerra y la falta de paz. «El corazón, en cambio, debe permanecer siempre abierto a la confianza, al deseo de hacer el bien, de construir el bien. Y esta es la fuerza de la oración, sobre todo en Tierra Santa, donde reconocer al otro es casi imposible en este momento». El corazón del hombre puede cambiar La oración y el ayuno darán fuerza incluso a quienes viven en un lugar devastado por la muerte y la violencia, donde la palabra paz parece no encontrar más terreno fértil. «No encuentra terreno en las instituciones —continúa el cardenal— no lo encuentra en las grandes organizaciones, ya sean políticas y, por desgracia, también religiosas, pero encuentra terreno entre muchas personas, movimientos, grupos, asociaciones e individuos que no aceptan esta deriva. La oración también sirve para crear este vínculo con personas de todas las creencias que, a pesar de todo, todavía quieren creer que el corazón del hombre, incluso en Tierra Santa, puede cambiar». La oración no es una fórmula mágica Sin embargo, según Pizzaballa, no hay que confiar en la oración como si fuera «una fórmula mágica que resuelve los problemas». La oración sirve para cambiar los corazones, el acercarse a la oración de otra manera acabaría creando «solo frustración». La oración, según indica el patriarca, sirve para abrir los corazones en un contexto de odio y rechazo del otro, como el que se ha creado en este momento por la guerra y la falta de paz. «El corazón, en cambio, debe permanecer siempre abierto a la confianza, al deseo de hacer el bien, de construir el bien. Y esta es la fuerza de la oración, sobre todo en Tierra Santa, donde reconocer al otro es casi imposible en este momento». El corazón del hombre puede cambiar La oración y el ayuno darán fuerza incluso a quienes viven en un lugar devastado por la muerte y la violencia, donde la palabra paz parece no encontrar más terreno fértil. «No encuentra terreno en las instituciones —continúa el cardenal— no lo encuentra en las grandes organizaciones, ya sean políticas y, por desgracia, también religiosas, pero encuentra terreno entre muchas personas, movimientos, grupos, asociaciones e individuos que no aceptan esta deriva. La oración también sirve para crear este vínculo con personas de todas las creencias que, a pesar de todo, todavía quieren creer que el corazón del hombre, incluso en Tierra Santa, puede cambiar». 22 de agosto de 2025Fuente: Vatican NewsCEV Medios

22
Ago

La voz de los Papas por la paz de los pueblos

Vaticano. León XIV ha proclamado el 22 de agosto, memoria litúrgica de la Santísima Virgen María Reina, día de ayuno y oración para invocar la paz en Tierra Santa, Ucrania y otras partes del mundo devastadas por conflictos. La iniciativa del Pontífice sigue la de sus predecesores. Mientras nuestra tierra continúa herida por las guerras en Tierra Santa, en Ucrania y en muchas otras regiones del mundo, invito a todos los fieles a dedicar el 22 de agosto a ayuno y oración, implorando al Señor que nos conceda paz y justicia y que seque las lágrimas de quienes sufren a causa de los conflictos armados en curso. Con estas palabras, al concluir la audiencia general de ayer, miércoles 20 de agosto, León XIV instó a los fieles a invocar el don de la reconciliación en un mundo cada vez más desgarrado por la violencia. En el día en que la Iglesia celebrará la memoria de la Santísima Virgen María, Reina del Cielo, el Pontífice animó a todos a acudir a ella, invocada también como Reina de la Paz, para que, por su intercesión, los pueblos encuentren el camino de la reconciliación. Seamos todos hombres y mujeres de reconciliación La iniciativa lanzada por el Papa Prevost sigue la línea de su predecesor Francisco, quien, a lo largo de sus doce años de pontificado, hizo reiterados llamados a la paz, especialmente en Oriente Medio y en la desgarrada Ucrania. Ya en septiembre de 2013, seis meses después de su elección al papado, el Papa Francisco proclamó una Jornada de Oración y Penitencia para invocar de Dios el gran don de la paz para Siria, Oriente Medio y el mundo entero. La Vigilia de Oración se celebra en la Plaza de San Pedro el 7 de septiembre, víspera de la festividad de la Natividad de María, Reina de la Paz, y en su homilía, Francisco exhorta a todos a convertirse en hombres y mujeres de reconciliación y paz. La guerra es una locura  En otras dos ocasiones, Bergoglio invitó a la gente a orar por Oriente Medio: el 27 de octubre de 2023, veinte días después del estallido del conflicto entre Israel y Palestina, se celebró en la Basílica Vaticana una hora de oración y adoración eucarística llamada Pacem in Terris , llamada así por la histórica encíclica de Juan XXIII publicada sesenta años antes. «Esta es una hora oscura, Madre», suplicó el Papa. «Y en esta hora oscura, nos sumergimos en tu mirada luminosa y nos encomendamos a tu corazón», para que enseñe a la humanidad a «repudiar la locura de la guerra, que siembra la muerte y borra el futuro». Un año después, el 6 de octubre de 2024, Francisco visitó la Basílica de Santa María la Mayor para ofrecer un llamado por la paz; además, para el día siguiente, exactamente un año después del inicio del conflicto, declaró una Jornada especial de Oración y Ayuno. La invocación a María Reina de la Paz  Específicamente por Ucrania, Bergoglio insta a la oración el 2 de marzo de 2022, Miércoles de Ceniza: una semana después de los ataques de Moscú a Kiev, el Pontífice invoca a la Virgen, Reina de la Paz, para que «preserva al mundo de la locura de la guerra». Esta invocación se reitera el 25 de marzo siguiente, cuando, en San Pedro, Francisco encomienda Ucrania y Rusia al Inmaculado Corazón de la Virgen para el fin del conflicto. Una paz estable se basa en la justicia  Las iniciativas que promueven la reconciliación en todo el mundo también han sido promovidas por los sucesores más recientes de Pedro: el 23 de julio de 2006, por ejemplo, ante el agravamiento de la situación en Oriente Medio, Benedicto XVI declaró una Jornada especial de Oración y Penitencia para implorar de Dios el precioso don de la paz. Finalmente, la memoria colectiva de la Jornada de Ayuno y Oración proclamada por san Juan Pablo II el 14 de diciembre de 2001, apenas tres meses después del atentado del 11 de septiembre contra las Torres Gemelas de Nueva York, sigue vigente. Esta iniciativa tenía como objetivo rogar fervientemente a Dios que conceda al mundo una paz estable, fundada en la justicia.  22 de agosto de 2025Fuente: Vatican NewsCEV Medios

22
Ago

Iglesia latina de Ucrania: Acogemos con esperanza todo esfuerzo de paz

Vaticano. Monseñor Vitalij Skomarovskyj, presidente del episcopado de rito latino del país, expresa su gratitud al Papa León por la Jornada de Oración y Ayuno del 22 de agosto, dedicada a las zonas afectadas por el conflicto: estos años de lucha nos han enseñado a apreciar el gran valor de la estabilidad. Una esperanza que no flaquea ni siquiera ante los bombardeos más insistentes y feroces. La población ucraniana vive con el corazón lleno de diversas emociones, el dolor de los implacables ataques de las fuerzas rusas y la esperanza de que las recientes negociaciones internacionales puedan allanar el camino hacia la paz tras más de tres años y medio de guerra, luto y atrocidades. En este contexto, León XIV decidió dedicar mañana, 22 de agosto, festividad litúrgica de la Santísima Virgen María Reina, a la oración y el ayuno para invocar la paz y la justicia para las naciones en guerra, especialmente para Ucrania y Tierra Santa. Esta decisión fue recibida con gratitud, en una entrevista con medios del Vaticano, por el obispo Vitaly Skomarovsky , presidente del Episcopado Ucraniano de Rito Latino. ¿Qué significado tiene este llamamiento del Santo Padre para la Iglesia en Ucrania? Que el Santo Padre se acuerde de nosotros es muy importante, porque la iniciativa del Sumo Pontífice es un llamamiento a toda la Iglesia en todo el mundo. Y diría que no solo a la Iglesia, sino a todas las personas de buena voluntad. Esta iniciativa tiene un poder extraordinario, y por eso nos alegra mucho que el Santo Padre se acuerde de nosotros. Es una respuesta a las palabras del Evangelio: que la oración y el ayuno son una fuerza que tiene un gran impacto en lo que sucede, en la historia. Tenemos muchos ejemplos de ello, y nos alegra mucho que esta intención de oración también se refiera al fin de la guerra en Ucrania. Y como el Santo Padre también dijo que esta paz requiere un gran compromiso y oración, nos complace unirnos a otros en esta oración y compromiso. Por cierto, ya hemos celebrado un día similar recientemente. Por iniciativa de la Unión Internacional de Superioras Generales (UISG), el 14 de agosto se proclamó una Jornada de Oración y Ayuno por la Paz en el Mundo, y en particular en Ucrania. La Iglesia Greco-Católica Ucraniana y la Iglesia Católica Romana en Ucrania se unieron a este llamamiento. Naturalmente, nuestros fieles respondieron a esta iniciativa con oración y ayuno. Excelencia, ¿qué opina de las iniciativas diplomáticas emprendidas por diversos líderes mundiales para lograr una paz duradera en Ucrania? ¿Y cuál es el estado de ánimo de los fieles y el clero que intentan ayudarles a mantener una actitud de esperanza? Como creyentes, descubrimos cada día que nuestra esperanza está depositada, ante todo, en Dios. Esta esperanza nunca decepciona. Naturalmente, al cumplir sus propósitos, Dios también se vale de las personas. Y todos los que hacen algo por esta paz cumplen la voluntad de Dios, que es que haya paz entre la humanidad. Pero a lo largo de la guerra, hemos visto que cuando depositamos nuestra esperanza en las personas, podemos experimentar una gran decepción. Por el contrario, la esperanza en Dios nunca decepciona. ¿Y cómo manejará Dios la situación? Esta es su santa voluntad. Naturalmente, estas iniciativas son muy positivas y agradecemos todos los esfuerzos de la gente. Pero, en general, dado que la gente común carece de mucha información o conocimiento sobre los procesos internos que están ocurriendo, nuestros esfuerzos se dirigen a orar y apoyar con nuestras oraciones a aquellos de quienes depende la llegada de la paz a nuestro país. El domingo 24 de agosto, Ucrania celebrará el 34.º aniversario de la restauración de su independencia. Esto coincide con la lucha por preservarla. Muchas personas han perdido la vida por ello. ¿Cómo cambia la percepción del valor de la libertad y la independencia en este contexto? Cuando Ucrania obtuvo su independencia en 1991, recuerdo el estado de ánimo que reinaba: una gran felicidad porque había sucedido casi sin derramamiento de sangre, porque esta independencia no se había logrado por la fuerza. Hago referencia a ese momento porque, históricamente, la lucha por lograrla fue, por supuesto, larga. Pero como ha demostrado el tiempo, la independencia es algo muy preciado, y ahora vemos lo alto que es su precio. Por lo tanto, creo que se están produciendo grandes cambios, ya que la gente aprecia más a su pueblo, a sus seres queridos, a sus defensores, a su patria y a su independencia. La conciencia de este valor probablemente se ha vuelto mucho mayor que en el pasado. Por supuesto, la lucha continúa, y queremos hacer todo lo posible para preservar esta independencia. Creo que la guerra también nos enseñó lo importante que es apreciar la paz. Siempre hemos rezado por la paz, pero no creo que hayamos comprendido plenamente el gran regalo que es vivir en paz, vivir sin guerra. Mañana oficiará el funeral de un soldado ucraniano de 45 años que deja esposa y tres hijos. Ha oficiado muchos funerales de soldados caídos. ¿Cómo encuentra la fuerza y ​​las palabras adecuadas para ofrecer apoyo moral y espiritual a quienes han perdido a sus seres queridos? Claro que no es fácil. Los funerales militares son un momento muy difícil de oración. Claro que se trata de personas que aún estaban llenas de vida, que tenían a sus familias: padres, hijos, esposas… Pero creo que quienes pierden a sus seres queridos, quienes se encuentran en una situación tan difícil, en ese preciso momento necesitan desesperadamente palabras de fe, palabras de consuelo. A través de esas palabras, Dios actúa en sus corazones. Algunos podrían pensar: ¿puede una palabra ayudar en este caso? Pero quienes han experimentado tales pérdidas saben que estas palabras ayudan, porque son palabra de Dios y no solo palabras humanas. Y si es palabra de Dios, siempre consuela, es lo único que fortalece, siempre da esperanza de que esta separación no es eterna, de que nos reencontraremos con nuestros seres