Categoría: Eclesial Internacional

22
Sep

Reestructuración del CELAM: Organización más flexible y eficaz

Vaticano.- Durante dos días, los Presidentes y Secretarios de las Conferencias episcopales latinoamericanas discuten sobre la renovación de la institución regional para impulsar una Iglesia más evangelizadora, misionera, sinodal y en salida Tejer una “Red de redes”, articular e integrar los organismos eclesiales y fortalecer las alianzas institucionales, para que en una clave de colegialidad y sinodalidad misionera, se impulse una conversión integral, descentralizada y profética en la Iglesia de América Latina. Esta es la visión que el Presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano, Monseñor Miguel Cabrejos Vidarte ofreció de la reestructuración de la institución regional, en su discurso de apertura, ayer, de la reunión de Presidentes y Secretarios Generales de las 22 Conferencias Episcopales de América Latina y el Caribe. Dedicada precisamente al proceso de renovación y reestructuración del CELAM que se lleva a cabo desde 2019 por mandato de la Asamblea general realizada en Tegucigalpa, la reunión de carácter virtual está abordando temas y reflexiones que van desde el análisis de la identidad y principios del organismo, su estructura, los centros propuestos para su funcionamiento, las prioridades pastorales y su articulación; así como las instancias de decisión. Tras la oración dirigida por el Presidente del Comité Económico, Monseñor Rogelio Cabrera, el Presidente del CELAM recordó las líneas y orientaciones surgidas en Tegucigalpa por los Obispos, cuyo mandato de Renovación y Reestructuración, exigía lograr una estructura organizacional “más ligera, menos pesada, más flexible y eficaz en las respuestas, especialmente las pastorales, y totalmente dispuesta a asumir los desafíos de la realidad de la Iglesia en el continente”. Proceso en construcción desde 2019 Al respecto, Monseñor Cabrejos, según refiere una nota de prensa del CELAM, recalcó que este objetivo supone: “Un proceso en construcción, que se está realizando a partir de un discernimiento teológico-pastoral de los signos de los tiempos, para lograr una conversión integral e impulsar una Iglesia evangelizadora, misionera, sinodal y en salida que tenga en cuenta los rostros presentes en la realidad del continente, sin perder de vista que los procesos son siempre trasversales, y que todo está interconectado” Riqueza del magisterio Al poner de relieve la  riqueza del magisterio representada en documentos como  “Lumen Gentium”, “Christus Dominus” y “Episcopalis Communio”, el Presidente del CELAM recordó que la finalidad del organismo es de acompañamiento a las Conferencias Episcopales, es mostrar nuevos caminos de evangelización frente a los desafíos pastorales y socioculturales del continente. Sin  embargo,  el prelado también advirtió que el discernimiento sobre la realidad continental hace evidentes diversas formas de crisis que se perciben en la familia, la desigualdad social y la educación. Situaciones que para Monseñor Cabrejos, no pueden ser sólo sujeto de denuncia y crítica, sino de propuestas para superar con esperanza esas crisis, es decir, ser esa voz profética a la que está llamada la Iglesia. Ponentes Seguidamente, como parte de la reflexión, el Decano de la Facultad de Teología de la Universidad Católica argentina y miembro de la Comisión Teológica Internacional, padre Carlos María Galli, compartió su ponencia titulada: «El contexto teológico pastoral: la sinodalidad misionera de la Iglesia latinoamericana y caribeña». Luego fue el turno del Dr. Guillermo Sandoval, quien se refirió al contexto COVID-19, la virtualidad y las implicaciones para la Iglesia Latinoamericana y caribeña. La primera jornada finalizó con una oración dirigida por el Arzobispo Metropolitano de Managua, Cardenal Leopoldo José Brenes. Además de los temas inherentes a la restructuración, este martes, se esperan disertaciones en torno a la Conferencia Eclesial de la Amazonía y la Asamblea Eclesial sobre Aparecida prevista para el 2021,  además de las conclusiones del encuentro. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News22 de septiembre de 2020

22
Sep

ONU: desde hace 75 años en busca de la paz

Vaticano.- El Secretario de Estado interviene con un video mensaje en las conmemoraciones del aniversario de la apertura de la Asamblea General de las Naciones Unidas: «La difícil tarea de la búsqueda del bien común sigue guiando a los miembros de las Naciones Unidas que, tras 75 años de historia y compromiso con los derechos, la justicia y la paz, siguen siendo una Organización necesaria para responder a las esperanzas de los pueblos», afirmó. 75 años de trabajo y compromiso en favor del derecho, la protección y el desarrollo del mundo, con fracasos y reveses, pero aún con la necesidad de seguir respondiendo a las esperanzas de los pueblos. Es así como el Cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, habla en nombre de la Santa Sede en un video mensaje con motivo de la conmemoración del septuagésimo quinto aniversario de la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York, que hoy lanza su Asamblea General en modo virtual a causa de la pandemia. En su mirada histórica, el Cardenal recuerda las esperanzas de paz y armonía entre los Estados, con las que los pueblos del mundo han mirado a las Naciones Unidas en los últimos decenios, esperando un respeto cada vez mayor de la dignidad humana, la cercanía, el cuidado de la pobreza, el sufrimiento y el progreso de la justicia, todos ellos valores fundacionales a los que las Naciones Unidas han tratado de dar una expresión concreta a lo largo del tiempo. La ONU: la casa de las naciones fraternas y solidarias También la contribución de la Santa Sede en este largo período -señala el Secretario de Estado- nunca ha fallado en cuanto a apoyo y participación, desde 1964, cuando fue reconocida como Estado observador. Los Papas -recuerda el cardenal citando a Pablo VI, Juan Pablo II y el Papa Francisco- siempre han instado a esta «noble institución» a ser un «centro moral» donde cada país pudiera «sentirse en casa», donde la «familia de naciones» se reuniera y donde la «comunidad internacional, en un espíritu de fraternidad y solidaridad, avanzara con soluciones multilaterales a los desafíos mundiales». Porque, como dejó claro la pandemia del Covid – 19, no podemos «seguir pensando sólo en nosotros mismos», debemos trabajar juntos para superar el sufrimiento más grave del mundo, «conscientes de que la carga que llevan algunos concierne necesariamente a toda la familia de naciones». Una historia de derecho, justicia y diálogo Lo que cabe señalar de estos primeros 75 años de las Naciones Unidas, en palabras del Cardenal Secretario de Estado, es el compromiso de proteger y promover el derecho y la justicia en el mundo contra «la guerra y la violencia», llevar alimentos a los que no los tienen, «proteger nuestro hogar común» y «avanzar en un mundo de desarrollo humano integral». Parolin no deja de mencionar, por tanto, la labor de la ONU en defensa del derecho esencial a la libertad religiosa y el compromiso para que la diplomacia y el diálogo puedan resolver las guerras y los conflictos y reparar lo que la violencia destruye. En la búsqueda del bien común: la Onu no es perfecta En la historia de la institución internacional ha habido reveses y fracasos. Las Naciones Unidas no son perfectas -señala el Secretario de Estado- y no siempre han estado a la altura de su nombre e ideales, y esto cada vez que los «intereses especiales» han prevalecido sobre la búsqueda del bien común. De ahí la advertencia que el representante del Vaticano dirige a los diplomáticos que se sientan en la Asamblea, no sólo para revitalizar, en un mundo cambiante, el espíritu original de la Institución, sino sobre todo para renovar el compromiso sincero con la búsqueda del bien común a través de un consenso y un compromiso auténticos. A pesar de todo -concluye el cardenal Parolin en su discurso- la Organización de las Naciones Unidas, donde los pueblos se encuentran en el diálogo y la acción común, es hoy más necesaria que nunca para responder a las grandes esperanzas del mundo. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News22 de septiembre de 2020

22
Sep

“La eutanasia es un crimen contra la vida: incurable no significa ‘in-cuidable’”

Vaticano.- «Samaritanus bonus», la Carta de la Congregación para la Doctrina de la Fe aprobada por el Papa, reitera la condena de toda forma de eutanasia y de suicidio asistido, teniendo en cuenta los casos de los últimos años. Se da apoyo a las familias y a los trabajadores de la salud. “Incurable no es nunca sinónimo de ‘in-cuidable’”: quien sufre una enfermedad en fase terminal, así como quien nace con una predicción de supervivencia limitada, tiene derecho a ser acogido, cuidado, rodeado de afecto. La Iglesia es contraria al ensañamiento terapéutico, pero reitera como “enseñanza definitiva” que «la eutanasia es un crimen contra la vida humana», y que «toda cooperación formal o material inmediata a tal acto es un pecado grave» que “ninguna autoridad puede legítimamente imponerlo ni permitirlo”. Esto es lo que leemos en «Samaritanus bonus», la Carta de la Congregación para la Doctrina de la Fe «sobre el cuidado de las personas en las fases críticas y terminales de la vida», aprobada por el Papa Francisco el pasado mes de junio y publicada hoy, 22 de septiembre de 2020. La actualidad del Buen Samaritano El texto, que reafirma la posición ya expresada varias veces por la Iglesia sobre el tema, se ha hecho necesario debido a la multiplicación de noticias y al avance de la legislación que en un número cada vez mayor de países autoriza la eutanasia y el suicidio asistido de personas gravemente enfermas, pero también que están solas o tienen problemas psicológicos. El propósito de la carta es proporcionar indicaciones concretas para actualizar el mensaje del Buen Samaritano. También cuando “la curación es imposible o improbable, el acompañamiento médico y de enfermería, psicológico y espiritual, es un deber ineludible, porque lo contrario constituiría un abandono inhumano del enfermo». Incurable, pero jamás ‘in-cuidable’ “Curar si es posible, cuidar siempre”. Estas palabras de Juan Pablo II explican que incurable nunca es sinónimo de “in-cuidable”. La curación hasta el final, «estar con» el enfermo, acompañarlo escuchándolo, haciéndolo sentirse amado y querido, es lo que puede evitar la soledad, el miedo al sufrimiento y a la muerte, y el desánimo que conlleva: elementos que hoy en día se encuentran entre las principales causas de solicitud de eutanasia o de suicidio asistido. Al mismo tiempo, se subraya que «son frecuentes los abusos denunciados por los mismos médicos sobre la supresión de la vida de personas que jamás habrían deseado para sí la aplicación de la eutanasia». Todo el documento se centra en el sentido del dolor y el sufrimiento a la luz del Evangelio y el sacrificio de Jesús: «el dolor es existencialmente soportable sólo donde existe la esperanza » y la esperanza que Cristo transmite a la persona que sufre es «la de su presencia, de su real cercanía». Los cuidados paliativos no son suficientes “si no existe alguien que ‘está’ junto al enfermo y le da testimonio de su valor único e irrepetible”. El valor inviolable de la vida “El valor inviolable de la vida es una verdad básica de la ley moral natural y un fundamento esencial del ordenamiento jurídico”, afirma la Carta. “Así como no se puede aceptar que otro hombre sea nuestro esclavo, aunque nos lo pidiese, igualmente no se puede elegir directamente atentar contra la vida de un ser humano, aunque éste lo pida”. Suprimir un enfermo que pide la eutanasia “no significa en absoluto reconocer su autonomía y apreciarla”, sino al contrario, significa “desconocer el valor de su libertad, fuertemente condicionada por la enfermedad y el dolor, y el valor de su vida”. Actuando de este modo “se decide al puesto de Dios el momento de la muerte”. Por eso, “aborto, eutanasia y el mismo suicidio deliberado degradan la civilización humana, deshonran más a sus autores que a sus víctimas y son totalmente contrarias al honor debido al Creador”. Obstáculos que oscurecen el valor sagrado de la vida El documento menciona algunos factores que limitan la capacidad de acoger el valor de la vida. El primero es un uso equívoco del concepto de «muerte digna» en relación con el de «calidad de vida», con una perspectiva antropológica utilitarista. La vida se considera «digna» sólo en presencia de ciertas características psíquicas o físicas. Un segundo obstáculo es una comprensión errónea de la «compasión». La verdadera compasión humana «no consiste en provocar la muerte, sino en acoger al enfermo, en sostenerlo», ofreciéndole afecto y medios para aliviar su sufrimiento. Otro obstáculo es el creciente individualismo, que es la raíz de la «enfermedad más latente de nuestro tiempo: la soledad». Ante las leyes que legalizan las prácticas eutanásicas, «surgen a veces dilemas infundados sobre la moralidad de las acciones que, en realidad, no son más que actos debidos de simple cuidado de la persona, como hidratar y alimentar a un enfermo en estado de inconsciencia sin perspectivas de curación». El Magisterio de la Iglesia Ante la difusión de los protocolos médicos relativos al final de la vida, existe la preocupación por «el abuso denunciado ampliamente del empleo de una perspectiva eutanásica» sin consultar al paciente o a las familias. Por esta razón, el documento reitera como enseñanza definitiva que «la eutanasia es un crimen contra la vida humana», un acto «intrínsecamente malo, en toda ocasión y circunstancia». Por lo tanto, cualquier cooperación inmediata, formal o material, es un grave pecado contra la vida humana que ninguna autoridad «puede legítimamente» imponer ni permitir. «Aquellos que aprueban leyes sobre la eutanasia y el suicidio asistido se hacen, por lo tanto, cómplices del grave pecado» y son «culpables de escándalo porque tales leyes contribuyen a deformar la conciencia, también la de los fieles». Por lo tanto, ayudar al suicidio es «una colaboración indebida a un acto ilícito». El acto eutanásico sigue siendo inadmisible aunque la desesperación o la angustia puedan disminuir e incluso hacer insustancial la responsabilidad personal de quienes lo piden. «Se trata, por tanto, de una elección siempre incorrecta» y el personal sanitario nunca puede prestarse «a ninguna práctica eutanásica ni siquiera a petición del interesado,

22
Sep

Samaritanus bonus: La esperanza es posible incluso cuando la vida es más frágil

Vaticano.- Fue presentada a los medios de comunicación la Carta de la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre el cuidado de las personas en fases críticas y terminales de la vida: el cuidado «no puede reducirse al cuidado del enfermo en una perspectiva médica o psicológica», sino que debe extenderse al «cuidado de toda la persona». «Un nuevo orgánico pronunciamiento de la Santa Sede sobre el cuidado de las personas en las fases críticas y terminales de la vida parecía oportuno y necesario en relación con la situación actual, caracterizada por un contexto legislativo civil internacional cada vez más permisivo en lo que respecta a la eutanasia, el suicidio asistido y las disposiciones relativas al final de la vida». Así lo declaró el Cardenal Luis Francisco Ladaria Ferrer, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, al presentar la Carta Samaritanus bonus en la Oficina de Prensa del Vaticano. El testimonio cristiano – añadió el Cardenal – muestra cómo «la esperanza siempre es posible, incluso cuando la vida está envuelta y agobiada por la cultura del descarte». «Y todos estamos llamados a ofrecer nuestra contribución específica, porque – como dijo el Papa Francisco – la dignidad de la vida humana y la dignidad de la vocación médica están en juego». Sufrimiento, esperanza y testimonio Durante la conferencia de prensa, teniendo en cuenta la Samaritanus bonus, se subrayó también que el término «incurable» nunca es sinónimo de «in-cuidable». Es importante centrarse bien, dijo Monseñor Giacomo Morandi, Secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que «el dolor es existencialmente soportable sólo cuando hay una esperanza fiable». Y una esperanza así sólo puede ser comunicada cuando hay una colectividad de presencia que espera alrededor del paciente que sufre». «Es el testimonio, humilde pero seguro, de la cercanía de Dios a nuestra vida, una cercanía que nos permite acompañar con una esperanza fiable, incluso en la prueba suprema del sufrimiento y la muerte». En el centro está el hombre en su integridad La Profesora Gabriella Gambino, Subsecretaria del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, se refirió a tres aspectos del documento elaborado por la Congregación para la Doctrina de la Fe. La primera es la condición humana de la que parte el texto, «la vulnerabilidad de todo ser humano». La atención «no puede reducirse al cuidado de la persona enferma desde una perspectiva médica o psicológica», sino que debe extenderse al «cuidado de toda la persona». El segundo aspecto se refiere al principio de que el cuidado del otro es estado de necesidad «no es sólo una cuestión ética de solidaridad social». Es mucho más: «es el deber jurídico, dijo la Dr. Gambino, reconocer a cada persona lo que le corresponde en virtud de su vulnerabilidad». El tercer aspecto en el que ha insistido el Subsecretario del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida es «el valor de cada persona en cualquier fase y condición crítica de la existencia». Cuidar al enfermo y a quien lo cuida El profesor Adriano Pessina, miembro de la Junta Ejecutiva de la Academia Pontificia para la Vida, examinó finalmente algunas de las cuestiones planteadas por Samaritanus bonus en relación con la antropología actual. En un período histórico en el que parece más fácil confiar en la ciencia y la tecnología que en los hombres, la Carta «pone claramente en el centro la importancia de las relaciones humanas en situaciones críticas de enfermedad y en las fases terminales de la vida». «La soledad del enfermo – añadió – es también a menudo la soledad de los que lo cuidan». Una comunidad de curación – concepto introducido por Samaritanus bonus – debería expresar «la doble dimensión de cuidar tanto del enfermo como de los que lo cuidan». Si el Covid-19 – concluyó el profesor Pessina – nos recordó nuestra fragilidad, también nos obligó «a reconfigurar los lazos y a ‘vigilar’ al otro, sin malentendidos». Pero sobre todo hacer como Dios: tener «compasión» porque «nadie en su sufrimiento es nunca un extraño para nosotros». Prensa CEVNota de prensa de Vatican News22 de septiembre de 2020

21
Sep

“Teología y prevención de los abusos”: libro del Pbro. Daniel Portillo

Vaticano.- La obra del director del Centro de Investigación y Formación Interdisciplinar para la Protección del Menor, (CEPROME), cuyo prólogo fue escrito por el Papa Francisco, está dirigido a personas interesadas en la teología y la prevención del abuso. El Pbro. Daniel Portillo, director del Centro de Investigación y Formación Interdisciplinar para la Protección del Menor, (CEPROME) presentó su libro titulado “Teología y prevención: Un estudio interdisciplinar en la prevención de los abusos en la Iglesia “.   En la entrevista de Paola Calderón Gómez, publicada por la Oficina de Prensa del Celam, el padre Portillo explica el objetivo del libro:  generar «desde una perspectiva interdisciplinar y con un alcance de teología latinoamericana, un primer acercamiento a los tópicos que dentro de la teología resultan fundamentales abordar en el tema de la prevención y entre ellos, vamos viendo la parte de la eclesiología, la parte de restructuración, reforma, renovación, aspectos como el discernimiento moral, aspectos como el celibato”. El prólogo del Papa Francisco El prólogo del volumen fue escrito por el Papa Francisco, quien ha venido acompañando la misión del Centro de Investigación y Formación Interdisciplinar para la Protección del Menor, (CEPROME). “Él ha estado muy pendiente de este tipo de temas ha sido un abanderado de la lucha”, afirma el director del CEPROME. La esperanza de la reparación En palabras del padre Portillo, el libro busca sensibilizar a los lectores sobre la problemática y sobre todo apunta a reparar, a “la esperanza de la reparación”. «Este es una un primer acercamiento desde la teología, queremos generar como un ‘despertar’ sobre los alcances, los límites, sobre los dolorosos acontecimientos que como Iglesia hemos permitido, pero además las cuentas pendientes que como Iglesia deberíamos tener y  los actos concretos que no hemos hecho». El CEPROME El Centro de Protección de Menores (CEPROME) es un organismo que en América Latina y el Caribe, que actualmente es considerado como un referente para la investigación y la formación interdisciplinar que busca promover la protección de los menores y las personas en estado de vulnerabilidad. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News21 de septiembre de 2020

21
Sep

Pax Christi Internacional: «Días de Acción por la No Violencia»

Vaticano.- Cada año, el 21 de septiembre, se celebra el Día Internacional de la Paz en todo el mundo. La Asamblea General ha declarado esta fecha como el día dedicado al fortalecimiento de los ideales de paz, a través de la observación de 24 horas de no violencia y alto el fuego. Con ocasión de esta Jornada Mundial, Pax Christi promueve, desde hoy y hasta el próximo 2 de octubre, Día Internacional de la No Violencia, los “Nonviolence Days of Action”. La Iniciativa Católica sobre la No Violencia, un proyecto de Pax Christi International, nacido después de la Conferencia sobre «La no violencia y la paz justa», celebrada en Roma del 11 al 13 de abril de 2016, y copatrocinada por el Consejo Pontificio Justicia y Paz (que ahora forma parte del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral), Pax Christi International y otras organizaciones internacionales, invita a las comunidades, parroquias y grupos a unirse a los “Nonviolence Days of Action”. Por lo tanto, se insta a estudiar, rezar, actuar y celebrar el poder de la no violencia, desde hoy, 21 de septiembre, Día Internacional de la Paz, hasta el 2 de octubre, Día Internacional de la No Violencia y el cumpleaños de Gandhi. Al ofrecer en su página web oraciones, sugerencias para dar testimonios, herramientas para hacer de la no violencia una forma de vida, para crear una parroquia o comunidad no violenta y para celebrar a los héroes no violentos, Pax Christi Internacional se compromete a fomentar acciones de solidaridad en todo el mundo, para promover y celebrar la no violencia, con la esperanza de que estos días de invitación a la acción se conviertan en un evento anual. Prensa CEVNota de prensa de Vatican News21 de septiembre de 2020

21
Sep

Santa Sede: tutelar derechos de los ancianos también en tiempos de pandemia

Vaticano.- Es una generación preciosa, un recurso que la pandemia ha puesto duramente a riesgo: es necesario tutelar los derechos de los ancianos y y hacer una mapeado certero. Son los puntos principales de la intervención del Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas en Ginebra, el arzobispo Ivan Jurkovič, durante la 45ª sesión del Consejo de Derechos Humanos. Los derechos humanos no tienen edad y por lo tanto la salud de los ancianos debe ser protegida como la de todos, especialmente en tiempos de pandemia de Covid-19: este es, en resumen, el llamamiento lanzado hoy, 21 de septiembre, por el Arzobispo Ivan Jurkovič, Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas en Ginebra. Se necesitan datos ciertos sobre los ancianos para la protección de los derechos El prelado intervino en la 45º sesión del Consejo de Derechos Humanos, dedicado al informe del Experto independiente sobre el tema de los derechos humanos de los ancianos. En primer lugar, Monseñor Jurkovič destacó la necesidad de contar con datos ciertos y completos sobre la realidad de los ancianos: las estadísticas, de hecho, son incompletas y genéricas y tienden a «representarlos como un grupo homogéneo, mientras que la realidad es muy diferente». «Una perspectiva tan limitada» no permite «una evaluación precisa de sus necesidades» ni «una apreciación adecuada» de la valiosa contribución que hacen a la sociedad. De ahí el llamamiento del Arzobispo a la necesidad de contar con datos de «alta calidad, oportunos y fiables» para que «se identifiquen y colmen las lagunas en la protección de los derechos humanos» de este segmento de la población. Los datos son de «vital importancia», reiteró el Observador, porque, como demostró la pandemia, representan «un instrumento indispensable para vigilar la emergencia sanitaria» a la que se pueden dar «respuestas específicas». Ninguna discriminación por motivos de edad El pensamiento del prelado se dirigió luego al «triste precio» que el Covid-19 exigió a los ancianos hospitalizados «en casas de cura y residencias de ancianos de todo el mundo». «Teniendo en cuenta esta terrible situación – subrayó el arzobispo – es necesario informar con precisión sobre las infecciones de coronavirus y las muertes que se producen en tal situación, a fin de mejorar la vigilancia dentro de estos centros». En cuanto al acceso a la atención médica, el representante de la Santa Sede se dijo preocupado porque «las decisiones sobre la asignación de los recursos médicos, incluidos los respiradores, puedan o hayan sido adoptadas exclusivamente en función de la edad» de los pacientes. Por ello, «es de suma importancia» que los protocolos de salud se guíen «por evaluaciones clínicas exhaustivas» y «un claro compromiso» de salvaguardar los derechos y la dignidad de toda persona. La protección de los ancianos, un recurso precioso En los últimos meses, añadió monseñor Jurkovič, «toda una generación de ancianos» ha pagado con creces las consecuencias de la pandemia, a pesar de que esta generación constituye «el recurso más precioso» para la familia humana, «en términos de historia, experiencia y enseñanza inestimable». «Hay que proteger las raíces y la memoria de un pueblo -reiteró el prelado-, hay que proteger a los ancianos; hay que salvaguardar sus derechos y su dignidad». Pero para lograr «un objetivo tan noble y necesario», concluyó, se necesitan «datos completos, fiables y significativos», a fin de eliminar los obstáculos presentes y evaluar «la eficacia de las medidas ya aplicadas». Prensa CEVNota de prensa de Vatican News21 de septiembre de 2020

18
Sep

CEBITEPAL invita al Diplomado Virtual sobre Realidad Social y Evangelización

El Centro Bíblico Teológico Pastoral para América Latina y el Caribe (CEBITEPAL); se prepara para iniciar su diplomado virtual en iniciación pastoral. Ciclo formativo que se desarrollará del 5 al 30 de octubre de 2020. Este programa virtual que cuenta con el aval universitario de la Universidad Pontificia Bolivariana busca orientar desde la doctrina social de la Iglesia los elementos humanos, espirituales, bíblicos y pastorales que se aplican en la evangelización de las relaciones sociales, para la construcción de comunidades solidarias y participativas que manifiesten la dimensión social de la fe y hagan claramente visibles los valores del Reino en el contexto de América Latina y el Caribe. El programa estará organizado en cuatro módulos de aprendizaje que abordarán diversos temas: Ideas socio-culturales que interpelan la acción evangelizadora de la Iglesia; Política y corrupción; Fenómenos de la violencia: narcotráfico, bandas criminales; Promoción, formación y defensa de líderes sociales. Entre los docentes invitados se encuentran: Dr. Elvy Monzant (Venezuela); Dra. Emilce Cuda (Argentina), Dr. Juan Luis Hernández (México) y Dr. Rodrigo Guerra (México). La fecha límite de inscripción es el 27 de septiembre; para hacerlo, deberá hacer clic aquí o consultar la web CEBITEPAL. Prensa CEVNota de prensa CELAM18 de septiembre de 2020

18
Sep

Mil doscientos millones de niños pobres debido al COVID-19

Vaticano.- Otros ciento cincuenta millones de niños cayeron en la pobreza a causa del COVID-19, según el nuevo análisis de UNICEF y Save the children. Se trata de una pobreza multidimensional, puesto que carecen de todo: acceso a la educación, salud, vivienda, nutrición, saneamiento y hasta el agua. El aumento es de un 15% desde el inicio de la pandemia La cifra de niños que actualmente viven en la pobreza multidimensional se ha disparado a aproximadamente mil doscientos millones debido a la pandemia de COVID-19, según un nuevo análisis de UNICEF y Save the Children publicado el 17 de septiembre. Esto representa un aumento del quince por ciento de menores en países de ingresos bajos y medianos, o un aumento adicional de ciento cincuenta millones más desde principios de este año. Oros 150 millones cayeron en la pobreza multidimensional El análisis de la pobreza multidimensional utiliza datos sobre el acceso a la educación, la atención médica, la vivienda, la nutrición, el saneamiento y el agua de más de 70 países. De manera que alrededor del 45 por ciento de los niños se vieron gravemente privados de, al menos, una de estas necesidades que resultan críticas en las naciones analizadas antes de la pandemia. “UNICEF advierte que la situación probablemente empeorará en los próximos meses” Save the Children y UNICEF están comprometidos en seguir monitoreando esta situación en evolución y trabajar con los gobiernos y la sociedad civil para enfrentarla. Según Henrietta Fore, Directora Ejecutiva de UNICEF, la pandemia y las medidas de bloqueo impuestas para evitar su propagación ¡han empujado a millones de niños a una pobreza más profunda”. “Las familias que estaban al borde de escapar de la pobreza han vuelto a entrar, mientras que otras están experimentando niveles de privación que nunca antes habían visto. Lo más preocupante es que estamos más cerca del comienzo de esta crisis que de su final” La pobreza infantil es mucho más que un valor monetario En este nuevo informe se señala que la pobreza infantil es mucho más que un valor monetario. Y se explica que si bien las medidas de la pobreza monetaria, como los ingresos familiares, son importantes, sólo ofrecen una visión parcial de la difícil situación de los niños queviven en la pobreza. Para comprender el alcance total de la pobreza infantil, todas las posibles  privaciones deben analizarse directamente. Esto también apunta a la necesidad de implementar políticas multisectoriales que aborden las privaciones de salud, educación,nutrición, agua y saneamiento y vivienda para acabar con la pobreza multidimensional. La mayor emergencia educativa global de la historia Para Inger Ashing, Directora ejecutiva de Save the Children, “esta pandemia ya ha causado la mayor emergencia educativa global de la historia, y el aumento de la pobreza hará que sea muy difícil para los niños más vulnerables y sus familias compensar la pérdida”. Y explica: “Los niños que pierden la educación tienen más probabilidades de ser forzados al trabajo infantil o al matrimonio precoz y quedar atrapados en un ciclo de pobreza durante los próximos años. No podemos permitirnos que toda una generación de niños sea víctima de esta pandemia. Los gobiernos nacionales y la comunidad internacional deben dar un paso al frente para mitigar el golpe” Los niños pobres se vuelven más pobres Y como si fuera poco, se informa que no sólo hay más niños en situación de pobreza que antes, sino que los niños más pobres también se están volviendo más pobres, señala el informe. Algunos niños pueden  sufrir una o más privaciones y otros no experimentar ninguna, por lo tanto, el número promedio de privaciones sufridas por niño puede usarse para evaluar cuán pobres son ellos. Antes de la pandemia, el número medio de privaciones graves por niño rondaba el 0,7. Mientras ahora se estima que ha aumentado en un 15 por ciento o sea a alrededor del 0,85. Evitar que más niños se vean privados de lo básico Henrietta Fore sostiene que deben actuar ahora para evitar que más niños se vean privados de las necesidades básicas de la vida como la escuela, los medicamentos, la comida, el agua y el refugio. “Los gobiernos deben dar prioridad a los niños más marginados y sus familias mediante la rápida expansión de los sistemas de protección social, incluidas las transferencias de efectivo y las prestaciones para niños, las oportunidades de aprendizaje a distancia, los servicios de salud y la alimentación escolar. Hacer estas inversiones críticas ahora puede ayudar a los países a prepararse para futuras crisis” Prensa CEVNota de prensa de Vatican News18 de septiembre de 2020

18
Sep

Un millón de niños invocarán juntos a María por el bien del mundo

Vaticano.- El 18 de octubre la iniciativa que involucra a niños de todo el mundo con sus padres, maestros y catequistas, vuelve a pedir a María, en particular este año, la liberación del coronavirus. Los organizadores dirigen una carta a los niños, explicando cómo se reza el Rosario, y otra a los adultos que los acompañan, subrayando que Jesús es el verdadero «antídoto» contra los males que afligen a la humanidad. Una vez más este año, en el mes de octubre, tradicionalmente conocido por los cristianos como el mes del Rosario, la Fundación «Ayuda a la Iglesia que sufre» promueve la iniciativa «Por la unidad y la paz, un millón de niños rezan el Rosario», que esta vez tiene lugar en un contexto muy especial, el de una emergencia sanitaria y social extendida por todo el mundo que no tiene precedentes. La desorientación causada por la pandemia «Nuestro mundo ya no es el mismo: lo que antes se daba por sentado, ya que no será así», se afirma en la carta de presentación firmada por el cardenal Mauro Piacenza, presidente de la Fundación y por el asistente eclesiástico, el padre Martín M. Barta. A pesar de las medidas de protección introducidas, vivimos un sentimiento generalizado de miedo, desorientación e impotencia- se lee en el texto – junto con una gran solidaridad y unidad social experimentada durante los meses más críticos de la pandemia. Sin embargo, es innegable que «el virus también nos ha distanciado y aislado unos de otros». «Estamos inducidos a ver a nuestro prójimo no como una imagen de Dios sino como un peligro, un portador potencial del virus». En Jesús, Dios ha tomado todas nuestras limitaciones sobre sí mismo Ante esta emergencia y ante otros «acontecimientos nefastos» con los que el mundo podría tener que lidiar en el futuro, está claro que «la humanidad sin Dios -dice la carta- estaría destinada a la derrota». Sería fatal para nuestro futuro pensar que Dios no tiene nada que ver con el virus, con nuestras enfermedades y momentos de necesidad, como si Él no pudiese hacer nada». Al contrario, Dios está a nuestro lado y en Jesús ha tomado todos nuestros males, incluso el pecado, el peor de los virus. Por esta razón, Jesús se ha convertido en un «antídoto» contra todas «las desgracias del mundo». Y por esta razón, Dios nos invita a confiar en Él, nos anima a rezar para pedirle su ayuda y a rezar a su Madre que se vuelca a la humanidad en los momentos más oscuros. La constante presencia de María al lado de la humanidad La carta recuerda cuántas veces en los últimos 200 años la Virgen se ha aparecido en todos los continentes para predecir «un futuro lleno de alegría y paz» a condición, sin embargo, de que la gente se convierta. «Vivir en gracia, confesarse bien, llevar una ferviente vida eucarística, rezar el Santo Rosario, leer la Biblia, consagrarse a su Corazón Inmaculado, realizar obras de misericordia», son los gestos que la Virgen María siempre recomienda. Así que aquí está la invitación a adherirse el domingo 18, o, si se quisiera, rezar el Rosario en la escuela, el lunes 19 de octubre próximo, en la iniciativa mundial de oración «Un millón de niños rezan el Rosario». La intención de los acompañantes y los pequeños es ponerse bajo la protección de María a través de la oración dedicada a ella. La carta concluye agradeciendo a los adultos, padres y maestros, que se comprometerán a dar a conocer a los niños «a María como su madre y a rezar el Rosario», porque esto significará proporcionarles «el mejor equipamiento para el recorrido futuro». La consagración de los niños a la Madre Celestial Además del rezo del Rosario, según los misterios gozosos, se propone a los niños una oración especial en esta ocasión, un acto de consagración a María, Madre de Dios pero también de cada uno de nosotros. Una oración que comienza así: «María, Madre mía, lleno de alegría vengo a ti hoy para darte todo mi corazón. También te doy todo lo que tengo y todo lo que hago, toda mi vida. Vengo a ti con todos los que llevo en mi corazón, mis padres, mis hermanos y hermanas, todos mis amigos, pero también todos los que me han hecho daño. Sé nuestra madre, bendícenos y protégenos». Prensa CEVNota de prensa de Vatican News18 de septiembre de 2020