Mérida. El 8 de diciembre de 2025, la Arquidiócesis de Mérida celebró con profundo fervor la Solemnidad de la Inmaculada Concepción, patrona de la Iglesia local, con una Eucaristía solemne de acción de gracias en la Catedral Metropolitana de Mérida.
La celebración fue presidida por Monseñor Alexander Rivera, Obispo de San Carlos de Cojedes, hijo nativo de esta tierra, y concelebrada por Monseñor Helizandro Terán, Arzobispo Metropolitano de Mérida, junto al clero arquidiocesano.
Feligreses, autoridades civiles, representantes de instituciones académicas y culturales, así como delegaciones de diversas parroquias, participaron de la jornada festiva que marca también el tiempo de Adviento y el inicio del nuevo año litúrgico. Durante su homilía, Monseñor Rivera compartió reflexiones pastorales a partir de su propia experiencia de servicio en la Arquidiócesis de Mérida.
Recordó con gratitud el afecto recibido en sus años de ministerio en tierras merideñas, y subrayó que “la historia es presente, porque cada instante cuenta, y en un abrir y cerrar de ojos todo pasa”. Invitó a la comunidad a vivir esta solemnidad como un llamado a la conversión, a la unidad eclesial y al compromiso pastoral.
“La vida diocesana es una escuela; en ella todos los días se aprende, y es aprendiendo como se ama a la Iglesia, a la arquidiócesis y a quienes la conducen, con nuestras fragilidades, pero sostenidos por la gracia de Dios”, acotó.
El obispo destacó el significado del dogma de la Inmaculada Concepción —proclamado por el Papa Pío IX en 1854— y la profunda relación entre esta solemnidad y el camino espiritual del Adviento. “La Virgen María, llena de gracia, es modelo de discípula y creyente. Su figura nos impulsa a no temer, a abrir el corazón al Señor y a caminar con alegría, aun en medio de las dificultades”, resaltó.
En el marco de esta celebración se llevó a cabo también la Fiesta de la Santidad, durante la cual fueron entronizadas las reliquias de San José Gregorio Hernández y de Santa Carmen Rendiles. Tras ser bendecidas por Monseñor Helizandro Terán, fueron entregadas a los arciprestes de los distintos arciprestazgos para iniciar su peregrinación por todas las parroquias de la Arquidiócesis, como signo de comunión, esperanza e impulso evangelizador.
Como es tradición, la solemnidad se celebró en todas las parroquias de Mérida por ser la Inmaculada Concepción patrona de la Arquidiócesis. De manera especial, se vivió con particular devoción en Mucurubá, con su reconocida Noche de Velitas, que congrega a familias y peregrinos, y en el Santuario de La Azulita, donde numerosos fieles acuden para honrar a la Virgen en esta advocación.
Con esta celebración, la Arquidiócesis de Mérida renueva su fidelidad a la misión evangelizadora confiada por Cristo y reafirma su identidad bajo el amparo de la Inmaculada Concepción, signo de esperanza y unidad para todo el Pueblo de Dios que peregrina en estas tierras andinas.
10 de diciembre de 2025
Fuente: Arquidiócesis de Mérida
CEV Medios
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