Prensa Diócesis de San Cristóbal Tras cumplirse la lectura de las Letras Apostólicas en las que el Santo Padre designa a monseñor Lisandro Rivas Durán como VI Obispo de San Cristóbal y recibir de manos del obispo emérito monseñor Mario Moronta, el báculo (el mismo que usó el primer obispo diocesano), Monseñor Rivas fue saludado por el Colegio de Consultores, los obispos, presbíteros y diáconos. Luego de ello, se entonó el canto de Gloria y prosiguió la lectura de la Palabra de Dios. Monseñor Lisandro Rivas inició la homilía manifestando su convicción de que su presencia y misión en el Táchira es producto de la voluntad divina, por lo que la recibe con obediencia, amor y plena confianza en el Señor. “Estoy seguro de que mi designación como obispo de San Cristóbal es obra del Espíritu Santo. (…) con el corazón colmado de alegría y gozo en el Señor, asumo la misión de llevarla la Iglesia local a puerto seguro (…) quiero ser un padre, un pastor y servidor de las almas, que acoge a los necesitados, a los pecadores. Un padre que busca sus ovejas y hace que retornen a casa”. Manifestó que las realidades y sufrimientos palpados durante su episcopado en Caracas han sido una gran escuela para él. “Agradezco al episcopado, a los presbíteros, a los religiosos y consagrados porque de ellos he podido aprender a ser un pastor con olor a oveja”. Señaló que un obispo, está llamado a dar la vida por las ovejas, buscando conducirlas a Jesús. “Por lo tanto, entrego mi ser y quehacer como pastor para velar por el bien de mis ovejas, acompañar y continuar el camino de esta diócesis que alcanza ya 102 años. Sigo el legado de mis predecesores. Sé que el camino se ha fortalecido y está guiado por el proyecto pastoral y fundamentado en los tres sínodos diocesanos”.
Pablo Martínez Reques / Director del Centro Cultura, Educación y Comunicación Con la presencia de Monseñor Juan Carlos Bravo, Obispo de Petare, en la Capellanía de la Universidad Metropolitana (UNIMET), el 05 de diciembre de 2024, Día del Profesor Universitario, se reunió el equipo de animación de la pastoral universitaria en la Provincia de Caracas. Al encuentro asistieron los anfitriones Pbro. Isidro Ramírez y profesor Luis Cova, el Pbro. César Muziotti y Ruth Toro en representación de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), la profesora Elisabett Pereira, delegada del Instituto Universitario Jesús Obrero (IUJO) de Petare, el joven Luis Acosta de la parroquia universitaria de la UCV y Pablo Martínez por el Centro de Cultura, Educación y Comunicación del SPEV. El encuentro se inició con la merecida oración del anfitrión. Posteriormente se recibió la salutación de Mons. Juan Carlos Bravo quien recordó los programas y acciones que la diócesis de Petare está desarrollando con el apoyo de la Universidad Metropolitana y la Universidad Monte Ávila, así como también se cuenta con el apoyo de varias empresas y fundaciones que actúan en su territorio. Mons. Juan Carlos afirmó que hay que pasar de la consigna a la acción, no quedarse en mensajes alentadores, sino lograr acciones alentadoras que transformen la realidad de las personas. Como parte de la agenda, el Prof. Pablo Martínez informó a la concurrencia algunas de las actividades que en las distintas provincias se han realizado durante la jornada de la pastoral universitaria de este año. Entre el 21 de noviembre, Día del Estudiante Universitario y el 05 de diciembre, Día del Profesor Universitario, cada año la pastoral universitaria de Venezuela celebra su jornada para conmemorar las dos fechas nacionales más importantes en este ámbito. Por ello en distintas regiones del país han celebrado, foros, seminarios, peregrinaciones y celebraciones eucarísticas con la finalidad de reflexionar y animar la labor tan significativa que llevan adelante las universidades venezolanas por el bien y el desarrollo del país y sus habitantes. Luego de las informaciones se abrió el debate sobre la celebración del día del profesor, el cual en muchas instituciones pasa desapercibido. Se acordó tratar de unificar los días del estudiante y el docente con la finalidad de generar acciones de reflexión sobre el papel de la universidad en la sociedad. Surgieron varias propuestas y se acordó organizar un encuentro provincial para mediados del próximo año sobre el papel de la universidad como agente de transformación en la sociedad y que este evento esté precedido por varias actividades en el mismo tono en cada una de las universidades para después culminar en un evento macro donde participen todas las instituciones universitarias. Como ideas orientadoras para estas actividades se deben considerar: la importancia que tiene la pastoral universitaria como propulsora del diálogo entre la fe, la razón, la ciencia y la cultura y no tanto como organizadora de eventos de devoción; invertir mayormente en programas procesuales y no tanto en eventos puntuales. Mons. Bravo se mostró dispuesto a realizar una actividad con los profesores de distintas casas de estudio con la finalidad de explicar la significación del sínodo de la sinodalidad.
Prensa PCN Venezuela El pasado 29 de noviembre se reunió el Programa Centralidad de la Niñez (PCN) y las organizaciones que lo conforman, para renovar su compromiso por un mundo sin violencia y más ternura, avanzando en la articulación de esfuerzos, socialización de buenas prácticas y asumir juntos los desafíos que presentan las vivencias de los niños, niñas y adolescentes. El Instituto de Teología ITER sirvió de sede para que el PCN, Capítulo Venezuela profundizara en sus tres enfoques: ternura, buen trato y derechos de los NNA, en un esfuerzo interinstitucional. Este encuentro, que contó con la presencia de más de cinco organizaciones aliadas, resaltó los esfuerzos conjuntos para reforzar los ambientes seguros de desarrollo infantil y adolescente en Venezuela, además de brindar espacios de socialización y compartir fraterno. La ocasión fue propicia para el lanzamiento de la próxima ELIAD, Escuela de líderes adolescentes, en pro de formar adolescentes promotores de la paz y la ternura en sus ambientes de participación. La Directora del Centro Laicos, Familia y Juventud del SPEV, Saritza Roque, estuvo presente junto a su equipo de trabajo. De igual forma, el licenciado Leonardo Devia, representante de la Comisión Nacional de Buen Trato y Prevención en el área educativa. ¡A cambiar la historia, cero violencia, 100% ternura!
El 4 de diciembre del presente año, fue juramentado el Emmo. Sr. Cardenal Baltazar Porras, arzobispo emérito de Caracas como individuo de número, sillón P, de la Academia Nacional de la Historia y de la Lengua. En el acto de juramentación realizado en el Palacio de las Academias en Caracas, estuvieron presentes el Nuncio Apostólico Mons. Alerto Ortega Marín, el Emmo. Cardenal Diego Padrón Sánchez, Mons. Jesús González de Zárate, arzobispo de Valencia y presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana y Mons. Raúl Biord Castillo, arzobispo de Caracas. El purpurado ocupará el sillón del historiador Guillermo Morón, quien, según sus propias palabras, “para mí fue, primero, un maestro y con los años un amigo”. En sus discursos recordó que en Venezuela se ha aplicado una mala praxis al “desfigurar la historia, ocultar la verdad y manipularla bajo coacción y represión”, por lo que “no podemos dejarnos robar la ética, y la rectitud, camino indispensable para la equidad, la justicia y el bienestar colectivo”. Desde esta redacción, felicitamos al Cardenal Porras. Este logro es un merecido reconocimiento a su extensa trayectoria y su dedicación incansable al estudio y la preservación de nuestra historia nacional. Su compromiso con la historia, la cultura y la fe católica ha dejado una huella indeleble en nuestra sociedad venezolana.
Prensa Diócesis San Fernando de Apure A los pies del Nazareno en Achaguas, el pasado sábado 30 de Noviembre fue ordenado sacerdote el Diácono Andrés Eloy De Moya Gutiérrez, por imposición de Manos y Plegaria del Excmo. Mons. Alfredo Enrique Torres Rondón, Obispo de San Fernando, en compañía del clero diocesano, sacerdotes invitados y gran cantidad de feligreses de todas las Zonas Pastorales. En su homilía, el Sr. Obispo hizo referencia a la fraternidad como fruto del Espíritu Santo, siendo así que el Sacerdote debe ser «artesano de fraternidad». Así mismo recordó al neopresbitero que su vocación primera es ser hombre de oración. «Te ordenas sacerdote para buscar al Señor en su Palabra y en la Eucaristía. Te aconsejo que cada día, en oración, te postres frente al Santísimo Sacramento. Sacerdote que no ora frente al Santísimo se vuelve regañón e incluso obstinado«. Asimismo recalcó que; «la vocación de un sacerdote es servir a nuestra gente, nos debemos al pueblo y para el pueblo». Una vez concluidos los ritos de ordenación, le fue entregado la Constancia de Ordenación y nombramiento como administrador parroquial de la parroquia Nuestra Señora de Fátima de la población de Achaguas. Finalmente, el nuevo sacerdote, ofreció palabras de agradecimiento al Sr. Obispo, y sus hermanos sacerdotes y diáconos que le han ayudado en su formación, así como a los fieles de la parroquia Nuestra Señora del Carmen de Guachara, el Santuario Nacional Jesús Nazareno de Achaguas y en especial a los fieles de Nuestra Señora de Fátima por el cariñoso recibimiento que le han dado, haciéndole sentir «como un hijo más de esta tierra bendecida por Dios».
Prensa Diócesis de Los Teques La mañana del sábado 30 de noviembre fueron ordenados como presbíteros Fr. Denny Martínez y Darwin Cabello, oriundos de la Diócesis de Los Teques. El rito de ordenación fue presidido por Mons. Freddy Fuenmayor, obispo de la Diócesis de Los Teques, acompañado por Mons. Ovidio Pérez Morales, arzobispo-obispo emérito; Mons. Raúl Bacallao, Vicario General de Los Teques; el clero diocesano y sacerdotes visitantes de distintos lugares del país. Al concluir la proclamación del Evangelio, fueron presentados los candidatos al ministerio sacerdotal y recibidos con beneplácito al ser considerados dignos para recibir el sacramento del Orden del Sacerdotal. «Dios llama, Dios consagra, Dios envía», enfatizó monseñor Freddy durante su homilía, haciendo referencia al Evangelio que leído sobre el llamado de los hijos de Zebedeo. Terminada la homilía, siguió el rito de ordenación el cual está compuesto por las promesas de los elegidos; el canto de las letanías acompañado de la postración, la imposición de manos por parte del Clero presente y la plegaria de consagración; la unción de las manos y entrega del pan y vino. Al finalizar la Eucaristía, el neo presbítero Darwin Cabello fue el responsable de dar las palabras de acción de gracias por esta nueva misión que el Señor inspiró en sus corazones y que hoy iniciarán una etapa desde el orden de los presbíteros. Oremos al Señor por los frutos que germinan en estos hermanos nuestros, y rogando a su eterna misericordia que le conceda a la Diócesis de Los Teques, muchas y santas vocaciones.
“Por la entrañable misericordia de nuestro Dios nos visitará el sol que nace de lo alto para iluminar a los que están en tinieblas y en sombras de muerte y para guiar nuestros pasos por el camino de la paz” (Lc 1, 78-79) 1.- Los cristianos católicos de Venezuela y el mundo nos preparamos con el tiempo de Adviento para celebrar uno de los grandes misterios de nuestra fe: el nacimiento del Hijo de Dios, la Navidad. En ella proclamamos que el Hijo de Dios, que es el autor de la vida, quiso hacerse uno de nosotros, quiso ser ENMANUEL, el Dios con nosotros. 2.- Como lo canta la liturgia y lo subrayan los Padres de la Iglesia: “El Hijo de Dios se hace hombre, para que el hombre sea hijo adoptivo de Dios” (cf. San Ireneo). Sólo si somos capaces de encontrarnos con Jesús, verdadero Dios y verdadero hombre, viviremos auténticamente el misterio de fe que celebramos. 3.- Las misas y celebraciones de aguinaldos que se realizan los nueve días antes del 24 de diciembre, los cantos tradicionales de esta época, colocar o vestir el pesebre, la preparación de las hallacas, las gaitas, y el intercambio de regalos, expresiones propias de nuestra cultura venezolana, nos ayudan a vivir el gran regalo del Dios que se hace hombre y nace en Belén, y son expresión del deseo de una humanidad fraterna y solidaria. 4.- Viviremos la próxima navidad en medio de dramáticas realidades sociales, económicas y políticas en nuestro país, por lo cual nuestro compromiso en este tiempo debe ser el expresado por los profetas a (cf. Is 2, 3 – 4) que las armas de la violencia, la exclusión, la violación de los derechos humanos, y la pobreza se transformen en instrumentos de felicidad, progreso, reconciliación, libertad y paz, y podamos ser más hermanos. 5.- Pedimos al niño Jesús que toque el corazón de aquellos que, de acuerdo a la Constitución y las leyes, tomen las medidas necesarias para liberar a los detenidos por los acontecimientos de estos últimos meses, de forma que puedan reencontrarse con sus familiares y amigos. 6.- Cada navidad debe acercarnos a la pascua definitiva cuando la humanidad optando por el bien llegará al lugar donde “se secará toda lágrima de sus ojos y no habrá ya muerte, ni habrá llanto, ni gritos ni fatiga, porque el mundo viejo ha pasado” (Ap 21,4). 7.- En la solemnidad de la Natividad del Señor, daremos inicio al “Año Santo” 2025 dedicado a profundizar en la virtud de la esperanza y que el Santo Padre Francisco nos invita a vivir bajo el lema paulino “La esperanza no defrauda” (Rom 5, 5). Solo en Dios reside la verdadera esperanza. Sabemos que, así como vino en la fragilidad de nuestra carne, un día se manifestará glorioso para instaurar los cielos y la tierra nuevos donde impere el amor y la justicia (2Pe 3, 13) ¡Construyamos una Feliz Navidad para todos! Los Obispos de la Comisión Permanente Caracas, 29 de noviembre de 2024
Este viernes 29 de noviembre, el papa Francisco ha nombrado obispo de la diócesis de San Felipe, al Padre Rubén Gregorio Delgado Carmona, quien actualmente se desempeña como Rector del Seminario mayor de Trujillo, Vicario General de la Diócesis, miembro del Consejo Presbiteral, del Colegio de Consultores y del Consejo para Asuntos Económicos. El Rev. Rubén Delgado nació el 16 de marzo de 1968 en Trujillo. Tras estudiar filosofía en el seminario mayor de Caracas (1986-1989), completó sus estudios de teología en la Pontificia Universidad Lateranense, en Roma, siendo alumno del Pontificio Seminario Mayor Romano (1990-1994). En 1996 obtuvo la licenciatura en Teología moral por la Pontificia Academia Alfonsiana, en Roma. El 23 de abril de 1994 fue ordenado sacerdote en el Pontificio Seminario Romano, e incardinado en la Diócesis de Trujillo. En 2002 fue enviado nuevamente a Roma para estudiar Derecho Canónico, obteniendo la licenciatura en la Universidad Pontificia Lateranense en 2004. Desde su ordenación sacerdotal ha desempañado diversas funciones y servicios pastorales. Ha sido Párroco de “San José de Tostós”, en Trujillo (1995-1996) – Párroco de “Santa Ana”, en Trujillo (1996-1998) – Profesor del seminario mayor de la Arquidiócesis de Mérida (1998-2002) Vicario cooperador de la Parroquia “Regina Pacis”, Roma (2002-2004) – Vicerrector del Seminario mayor de Mérida (2004-2005) – Director espiritual del Seminario mayor de Mérida (2005-2006) – Rector del Seminario mayor de Trujillo (2006-2012) – Capellán del Hospital Dr. José Gregorio Hernández, en Trujillo (2006-2014) – Capellán de las Hermanas “Siervas del Santísimo”, en Trujillo (2006-2012) – Capellán militar del Batallón “Rivas Dávila”, en Trujillo (2008-2021) – Vicario Judicial del Tribunal Eclesiástico Diocesano (2009-2012) – Director administrativo de la casa de retiros diocesana (2011-2012) – Párroco de la Parroquia “Ntra. Sra. de Chiquinquirá”, en Trujillo (2012-2015) – Vicario General (2012-2021, 2022 hasta la actualidad) – Juez del Tribunal Eclesiástico diocesano (2013-2021) – Párroco de la Parroquia-Catedral de Trujillo (2015-2018) – Administrador diocesano “Sede vacante” de la Diócesis de Trujillo (2021) Oramos por el padre Rubén para que el Señor bendiga su acción pastoral como obispo de San Felipe.
Este jueves 28 de noviembre, a las 3 pm inició el II Encuentro de Comisiones Diocesanas para la cultura del buen trato, salvaguarda y prevención en la casa Monseñor Ibarra de Montalbán, Caracas; el mismo se extenderá hasta el próximo sábado 30, en horas del mediodía. Este evento fue organizado por la Comisión Nacional de Buen Trato, Salvaguarda y Prevención la cual está presidida por Monseñor Ángel Caraballo, obispo de Cabimas, junto a Fray Eddy Polo, presidente de la Conferencia de Religiosos y religiosas, CONVER. Las comisiones diocesanas se encuentran este fin de semana para fortalecer los espacios seguros en la Iglesia desde la cultura del buen trato; compartir experiencias, logros y dificultades en sus Iglesias Locales y evaluar las actividades cumplidas para el diseño de nuevas acciones. Este simposio cuenta con dos participantes internacionales quienes desarrollaran los temas centrales. El padre Daniel Portillo, experto regional de América en la Pontificia Comisión para la Protección de Menores en Roma, disertará sobre la Respuesta institucional ante los abusos en la Iglesia; y el padre Luis Zamorano, experto en acompañamiento psico-espiritual; ofrecerá la reflexión sobre el Desafíos psico-espirituales del acompañamiento. Los 63 participantes procedentes de 29 circunscripciones eclesiásticas del país tendrán la tarea de presentar los avances con relación a los protocolos, las comisiones de prevención y los talleres de formación realizados durante el año 2024.
La Conferencia Episcopal Venezolana, a través de la Comisión Episcopal de Liturgia nos invita a orar por la paz al inicio del Adviento. La propuesta consiste en realizar, durante algún día de la primera semana de Adviento, un encuentro de Oración, donde la comunidad (diocesana o parroquial) se disponga a orar por la Paz en Venezuela y el mundo entero. Para ello, envían el subsidio litúrgico Oración por la Paz de Venezuela. El Adviento es un tiempo de preparación para acoger esta paz en nuestras vidas. La espera activa que caracteriza este tiempo litúrgico implica abrir el corazón a la conversión, a la justicia y a la reconciliación. El mensaje del Bautista, “Preparen el camino del Señor” (Mt 3, 3), llama a los cristianos a remover los obstáculos personales y comunitarios que impiden la paz. La paz cristiana en el Adviento es una esperanza que brota de la certeza de que Dios cumple sus promesas. Descargue el subsidio y comparta con su comunidad.
Comentarios recientes